«─ no soy un experto en esas cosas, Natsu ─responde el rubio con timidez.
─ sólo te pido ideas, Michi. ─
─ debes entenderlo, no ha tenido una novia en su vida ─ríe mofandose su amigo castaño.
─ tú tampoco has tenido una, Yamagishi ─Akkun corta las burlas del muchacho, causando en él una mueca dolida muy mal fingida.
─ no había la necesidad de ser tan cruel. ─
─ si necesitas ayuda, podemos darte una mano, Natsu ─Takuya parecía ser el más relajado de los cuatro, no dudó en ofrecer su ayuda al chico que salvó a su amigo de infancia.
─ créeme que me serviría mucho, gracias. ─»
Planeaba su declaración al pequeño pelirrubio de ojos negros con ayuda del quinteto dinámico, más que nada por persistencia de Takemichi que insistía en devolverle el "favor".
Luego de haberse liado a golpes con Kyomasa sólo por defenderlo, el menor no paró de llorar agradecido, incluso fue a buscarlo un par de veces en su instituto. Incómodo pero con la misma amabilidad característica de él pidió que dejara de hacerlo. Sin embargo la insistencia no cesaba, y ahora que se había rendido resulta que Hanagaki no sabía absolutamente nada del tema. Pero sabemos como es Natsuki de masita buena gente y con una paciencia que un profesor de preescolar envidiaría.
El plan apenas en desarrollo apuntaba a un propósito: organizar una linda velada donde Satou declararía cada sentimiento que Mikey le provoca.
Es consiente de los sentimientos del chico ojinegro desde hace meses, fue sencillo saberlo tan sólo viendo su forma de actuar con los demás: bromista y juguetón. Mientras que con él se comportaba más tranquilo y tímido. Además de los claros obsequios que dejaba en su casillero todos los días, porque aunque Mitsuya, Baji y Kazutora trataran de "distraerlo" podía verlo huir junto a Draken de la escena y después regresar como si nada. No era extraño en lo absoluto.
Por supuesto también quiso dar a entender que sus sentimientos eran recíprocos, de hecho desde mucho antes. ¿Por qué nadie lo notó? Quizá fue demasiado minucioso de no ser extremadamente obvio. Tal vez fue un error no haber sido directo desde un primer momento, todo por querer ser un poco más romántico.
En las últimas dos semanas ha buscado ideas, incluso fue a la biblioteca para leer uno o dos libros de romance cliché, además de los torpes e ingeniosos consejos de aquel quinteto.
También cabe decir que en ese corto tiempo, Natsu había estrechado un poco más su relación con Takemichi, se hicieron un poco más cercanos al compartir sentimientos. Según le contó, hay una chica en su escuela que le gusta demasiado, pero no es capaz de acercarse a ella, Hinata Tachibana era popular y él un simple adolescente llorón. Así como el rubio le daba ánimos , él también daba palabras de aliento.
Entre ambos construían planes para la conquista y declaración respectivamente, reforzándolos con nuevas ideas más concretas.
Hasta ese día.
El pelirrojo esperaba que pudiese ser una hora o dos donde Mikey y Takemichi pudieran conocerse mejor, quizá que el pelicenizo dejara de ver al rubio menor como alguna especie de rival. Si tan sólo supiera que él es quien le está ayudando a declararse como cree que es correcto. Definitivamente no esperaba que Manjiro cambiara de ánimo de un momento a otro, básicamente mandándolo a la mierda por algo que no entendía ni había hecho.
Días posteriores intentó acercarse y aclarar la situación, sí había echo algo mal, disculparse. Ya sabemos que no fue posible.
Varias veces se planteó insistir, ir a buscarlo a su casa o algo, pero tenía algo llamado dignidad. ¿Valía la pena perderla con tal de no perder al chico que le gusta? Creía que no. Así que no insistió.
Hubo noches que lloró pensando en qué hacía mal, o porqué simplemente no podía ir y ser directo. Detestaba haberse metido ideas tan cursis en la cabeza por culpa de películas y de los libros que había leído. En serio creyó que Manjiro sabía de sus sentimientos, que tal vez podía esperarlo por preparar un escenario digno, que sólo se burlaba y abusaba de sus emociones por él.
En la escuela se le veía con bajo rendimiento, ojeras debajo de sus ojos y poca atención a clase. Claro que Mikey no estaba mucho mejor, eso lo podía ver desde lejos. ¿Qué era lo que le detenía a acercarse para hablar? Ah sí, lo evitaba a toda costa.
¿Hasta dónde les haría llegar ese estúpido orgullo? Los chicos de ToMan empezaban a tener conflictos entre ellos, algunos como Peyan y Smiley defendiéndolo a él por el infantil comportamiento del rubio bajito; otros como Baji y Kazutora objetando que el fallo era de Natsu por no serle sincero desde un inicio.
La verdad era que los dos tenían la culpa, era un malentendido que ninguno estaba dispuesto a aclarar. No había un abusador ni una víctima. Los dos eran culpables.
Además de saber que Mikey estaría ahí todo el tiempo con ellos, prefería no darles la cara para evitar cualquier pregunta que le hicieran al respecto, estaba demasiado dolido como para darles alguna explicación.
Mitsuya y Takemichi le animaban a acercarse, comentando que todo ese tiempo que pasaron preparando algo no iba a ser en vano, o que al menos dejara en claro que rumbo tomaría a partir de ese momento, si seguiría intentándolo o definitivamente se alejaría.
Por días estuvo pensándolo, incluso en el trabajo, lo regañaron un par de veces por estar distraído. Le frustraba tener el tema todo el tiempo en la cabeza.
«─ es porque cree que te gusta Takemichi. ─
Esperaba que fuera una broma, porque no le hacía nada de gracia. ¿Qué era lo que le hacía creer eso? No tenía ni la más mínima idea.
─ ... ¿cómo? ─
─ como escuchas. Conozco muy bien a Mikey, al igual que tú, ambos sabemos que tomó una impresión apresurada y dió por hecho que quien te gusta es Takemichi ─hubo un pequeño silencio entre ambos mientras Satou salía de su confusión. » ─ deberías hablar con él. ─
Soltó una risita desanimada─ intenté hacerlo durante días, quise arreglar las cosas y él se negó, si tan sólo me hubiera permitido hablar habríamos arreglado esto desde hace ya tiempo. ─
─ ya arreglarán esto, intenta aclarar tu mente, ¿de acuerdo? ─el pelirrojo asiente con la cabeza gacha─. Nos vemos mañana, Natsuki. ─ «
No sabía si Draken estaba metido en esto, si él había sido la mente maestra o ni siquiera estaba enterado. Tampoco se imaginó que Mistuya le traicionaría y lo dejaría encerrado en un aula vacía al final del horario escolar junto a Mikey.
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Buuuenas tardes. Demoré demasiado ésta vez ¿cierto? Jajsjs, pido disculpas. También siento que no quedó bien el capítulo, pero quería hacer un resúmen rápido del punto de vista de Natsu. Sí hay algo que no está bien redactado o no se logra entender pueden preguntarme, yo respondo dudasss. Ya se viene lo bueno. En fin me voy otro mes, chao. Belttom_ ♡