Kates

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PUNTO DE VISTA DE LENA

Estaban a días de la boda.

Había quedado con Alex para recoger el vestido de la boda y habían acordado en que Sophie les acompañaría, y luego irían a almorzar, por la tarde había quedado con Sam para hacer más exámenes.

Kara iba a estar toda la mañana mirando cosas de la música y por la tarde había quedado con J'Onz y Brainie para hablar del harun-El.

En el centro comercial Alex y Sophie estuvieron hablando casi todo el tiempo de armas, batallas y eventos, a Lena le gustaba ver sonreír a Sophie, se notaba que lo había estado pasando mal.

El móvil de Lena vibró y miro el whatsapp

Morena, ha llegado a mi oficina la propuesta

de tus abogados,

hay cosas que me gustaría hablar.

¿Te parece bien la semana que viene?

Kate Kane

Lena le sorprendía una vez más la confianza con que le hablaba Kate.

Ante la expresión de su rostro Alex le preguntó.

- ¿Pasa algo?

- Kate, no consigo pillarla - Lena miró a Sophie buscando ayuda.

- ¿Eres el nuevo objetivo de la inútil de mi ex? - Sophie escupía rencor.

- Espero que no. - Murmuraba Lena. Escuchaba un nuevo mensaje.

- ¿Puedo leer? - Preguntaba Alex. Lena al no tener nada que ocultar le dejo el móvil a Alex. - ¿Cenita y reunión en mi suite del hotel? - Leía en voz alta Alex - Lena, va a por ti...

- Y tanto, no va a parar hasta que caigas y rompa tu relación como hizo conmigo, aunque claro la diferencia entre tu y yo es que yo si sentía algo por ella - Sophie buscaba un atisbo de duda en Lena que no encontró.

- Sophie lo que te hizo a ti la marca como una persona de dudosa honradez, si entablo relación con ella es meramente por asuntos laborales. - Lena volvió a coger su móvil - No negaré que es una mujer atractiva, pero mi corazón le pertenece a Kara. Hay algo en Kate que me hace desconfiar.

- Si la hubieseis conocido cuando yo la conocí... son personas totalmente diferentes, antes mi Kate habría matado por estar a mi lado, su mirada y su sonrisa era única, inocente. Se quería comer el mundo. Ahora casi ni la reconozco, está llena de rencor y venganza. - Decía Sophie mientras daba vueltas al café con la cucharilla.

- ¿Vengativa? - Preguntaba Alex mientras Sophie asentía confirmando sus palabras.

- Oye Lena - Sophie miraba entre la multitud. - ¿Esa de ahí no es Kara?

Kara estaba con una mujer en un puesto de cafés pidiendo.

- Si, es ella - Lena miró la perfección de la mujer de su vida, solo con mirarla sentía una felicidad difícil de describir.

- ¿Y esa no es la chica con la que jugaba a volley? - Alex se percató de la compañía de su hermana.

- Hudson - Lena recordó que por culpa de aquella joven Kara y ella tuvieron su primera pelea, gracias a ella Kara le dijo que le quería por primera vez.

- Es aquella que tubo unos años de relaciones proliferas, ¿no? - Lena asintió, mirando al móvil - no se que hace mi hermana con esa mujer...

Lena debía de reconocer que en ese momento sabia lo mismo que Alex, nada. Al parecer estaban pasando la mañana juntas ya que la actitud de ambas era bastante cercana.

En ese momento sintió un nuevo mensaje en su móvil.

Confírmame cuando puedas para reservar la

terraza para nosotras en exclusividad.

K.K.

Bien, allí estaré así cerramos todo

contra antes mejor.

Así podemos empezar contra antes

con la investigación.

L.L.

¿Te has dado cuenta la coincidencia

de nuestros nombres?

¿¿??

K.K. L.L.

¿Nos estará mandando una pista el destino?

Si, que nuestros padres tenían

poca imaginación

o un gran sentido del humor

jejeje

Hasta el viernes que viene

Punto de vista de Kara

Se había tirado toda la mañana preparando la música de la boda.

Después de la reunión había cogido comida para llevar y se dirigió a la DEO.

En la DEO estuvieron hablando de como ir hasta el punto en el espacio exterior donde estaba el Harun-El.

Era una misión muy difícil, no sabían cómo llegarían al punto en concreto, si tendrían combustible para volver, que les deparaba allí, de momento solo tenían claro que iban a arreglar la nave de J'Onz para el viaje.

Kara estaba algo distraída llevaba toda la tarde pensando en su morena, no hacía ni unas horas que no la veía y moría por estar junto a ella.

En un segundo pensó en una cita improvisada.

Amor, ponte cómoda,

y coge una mochila con algo de ropa

de las dos, unos pijamas y algo para mañana.

Te amo K

Te EncontraréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora