Te Encontraré

Confianza

Punto de vista de Lena.

Le había molestado la soltura con la mujer había coqueteado con Kara en su cara, sin importarle que estuviesen juntas, y que Kara no se diese cuenta, si no que le diese su móvil del trabajo, le había hecho sacar a su novia de ahí.

Sabía que Kara era muy ingenua en esos asuntos así que no se lo tenía mucho en cuenta, no le había molestado Kara, si no la agente Moore.

Al abrirse las puertas del ascensor pudo oír la sorpresa en el ambiente de verla.

- Voy a buscar unas copas - Deciçía Kara escabulléndose.

- Huye cobarde - Se reía Lena al ver como su chica se iba sabiendo que la escucharía.

Con su mejor sonrisa se relacionó en sociedad con gente que hacía años que no veía.

Pero su curiosidad cada vez era mayor al pasar el tiempo y que la anfitriona no aparecía.

Kara no se había alejado de ella desde que había vuelto con el cava.

Una mujer se acercó a ellas, joven, más joven que Lena.

- Señorita Luthor, los rumores son ciertos, las cámaras no hacen justicia a su belleza, es un lujo que nos haya honrado con su presencia - La joven de pelo corto y rímel muy marcado vestía de esmoquin con la corbata desanudada dándole un aire rebelde. Le había ofrecido su mano para saludarla.

Lena la aceptó, y la joven en vez de sacudir la mano se la acercó y le dejó un suave beso en el dorso de la mano.

- Encantada, veo que me conoce, aunque no es para tanto ¿Usted es? - A Lena le sorprendió la actitud de la mujer.

- Kate, Kate Kane - Dijo mirándole directamente a los ojos.

Le estaba pareciendo una falta de respeto entrarle así a alguien pero al darse cuenta de quién era tuvo que tragarse la respuesta mordaz que le iba a dar.

- Oh, señorita Kane, encantada, permíteme que te presente a mi novia, Kara Danvers - Lejos de soltar su mano Kate no la soltó, sino que miro a Kara y le sonrió.

- ¿Novia? creía que eras soltera - Soltó su agarre.

- Si, estamos juntas desde la universidad, ella es el motivo por el cual luchar por todo - Lena quería daré a entender a Kara que no iba a entrar en su juego.

- Danvers, me suena de algo - Kate miraba hacia arriba intentando recordar.

- Mañana tenemos una entrevista, soy reportera de Catco - Kara le dio la mano para presentarse.

Kate miró la mano y se la dio con una mueca de repulsión, enseguida la soltó.

- Perfecto, mañana nos veremos ¿Lena quieres subir al ático para que hablemos de negocios? - Kate miró hacia el ascensor.

- Creo que de esos asuntos es mejor hablar de día y sin alcohol en el cuerpo, cuando cerremos acuerdos ya bebemos lo que quieras - Lena era muy profesional en lo que se refería a negocios, sabía que la gran mayoría de tratos se cerraban en fiestas de este estilo, pero ese estilo no era el suyo.

- Cierto, como prefieras, mi oficina estará abierta para ti, siempre, me he de marchar, pasarlo bien en la fiesta, y mañana nos vemos Danvers. Lena. La habitación del hotel estará siempre a tu disposición. Vuestra disposición. - Dijo sutilmente mientras se giraba para marcharse.

Lena se giró dándole la espalda, viendo como Kara miraba por donde se había marchado la mujer con una ceja levantada en claro signo de molestia.

- ¿Y te quejabas de la agente Moore? Que descaro - Kara había pasado a un gesto burlón.

- Touche - Lena la beso contoneándose al son de la música.

- No le reprocho nada, es normal que atraigas a hombres y mujeres por igual, eres el reflejo de una diosa. Y yo soy la más afortunada del mundo al disfrutarte. - Kara la sujetó por la cadera bailando con ella.

- Sabes que nunca tendría nada con ella ¿no? - Lena quería asegurarle a Kara su fidelidad.

- Sé que me amas, pero eres libre de estar con quien quieras, espero que solo conmigo - Lena sabía que confiaba ciegamente en ella.

- Gracias por tu confianza, solo quiero estar contigo mi amor, mi cuerpo te pertenece, mi corazón, mi alma, toda yo - Lena no podía evitar transmitirle todo su amor - Nunca podré expresarte todo lo que siento por ti.

- Tenemos toda una vida, y todas las otras en las que nos uniremos, y, no me tienes que expresar más de lo que haces, quizá nuestras palabras no alcancen a poder expresar todo este amor, pero nuestros actos hablan por sí solos amor.