"Cuando me sentí como un viejo cardigan
bajo la cama de alguien más
Tú me pusiste y dijiste que era tu favorita"- Cardigan, Taylor Swift.
Lily había estado por cuatro años en una relación que se sentía correcta, su padre adoraba a su prometido y el...
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"Distancia
Tiempo
Colapsos
peleas
silencio
El tren se descarriló
Me besas
Intentas arreglarlo
¿Podrías tratar de escucharme?" Sad beautiful tragic, Taylor Swift.
Agradecía que después de dos meses de la operación mi padre se estuviera recuperando mucho más rápido de lo que ambos esperábamos, asistía diariamente a terapia física con el Dr. Skarsgard, del cual se habían vuelto grandes amigos, incluso obligándome a cocinarle cupcakes de chocolates los cuales eran sus favoritos, acompañarlos a cenar, a veces me sentía dejada de lado por Bill y cada vez que lo decía no podía evitar reír como un niño.
Estaba segura de que jamás se había hecho tan cercano a alguien, que no fuera miembro del ejército, pero allí estaba yendo junto a él incluso a ver partidos de la NFL del que ahora era aficionado.
Aquel día había decidido no acompañar a papá, a su terapia física y encontrarme con mi prometido Chris en un restaurante, había llegado al amanecer de su última misión en Afganistán y también fue la primera vez que no fui por él al aeropuerto. Estaba enojada y molesta, sobre todo luego de meses sin recibir una sola llamada.
Aliso mi falda con mis manos húmedas mientras reviso la carta, siento unos sonidos femeninos de exclamación y bajo la carta para encontrar a Chris con ropa informal abriendo paso en el lugar como si fuera el dueño de este, luciendo igual de guapo que siempre pero con una maleta en sus manos lo cual me hizo enarcar un poco mi ceja.
- Hola dulzura- murmura una vez frente a mi subiendo sus gafas de sol a su cabeza mientras toma mi cintura haciéndome poner de pie con su brazo alrededor de esta besándome suavemente.
- Hola- murmuro embriagada por su olor masculino rodeando su cuello con mis brazos- te echo de menos - susurro olvidando mi enojo.
- Y yo- sonríe entre beso ayudándome a tomar asiento como el caballero que era - ¿Pediste de comer?
- No... te estaba esperando - murmuró.
- Bien- sonríe tomando la carta sentándose en su lugar y sonríe a la mesera que se acerca a tomar nuestras órdenes, donde pide vino para él y ginger ale para mí, como también una ensalada y pasta para ambos, apenas se va la chica me queda mirando por unos segundos que me hacen sonrojar- Luces más delgada, amor ¿Estás comiendo bien?.
