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"Hey Dream, ¿Puedo tener el vaso de agua a tu derecha?"

"No lo sé", dijo Dream, girándose hacia George con una sonrisa astuta, "¿Puedes?"

"Te odio."

"Me amas", se rió, agarrando el vaso de agua que estaba en una pequeña mesa de café al lado de su sillón. "¿Di por favor?"

George se burló, “¿Sabes qué? No importa, ya no tengo sed.”

"Dream, sé amable con Gogy", lo regañó Karl, dejándose caer en el sofá junto a George.

El viento aullaba una extraña melodía fuera de su casa, oscuras nubes de tormenta colgaban del cielo como un mal presagio. Hacía un par de días que hacía mal tiempo y, aunque Dream disfrutaba de días acogedores en el interior, frente a un fuego crepitante (le recordaba a la cabaña de Techno, lo que hacía que su corazón doliera y se calentara al mismo tiempo), Dream se estaba poniendo inquieto. Quería salir, explorar el bosque, los campos y las colinas que rodeaban el Reino de Kinoko. Era un sentimiento extraño, algo que no había sentido en mucho tiempo y Dream no sabía qué hacer con eso.

Dándole a George su vaso de agua, se dejó hundir en el suave cojín del gran sillón más cercano a la chimenea. Un tenue brillo anaranjado tiñó la sala de estar, mucho más suave que el calor abrasador de la lava en su celda, mucho menos cegador, ardiente y consumidor.

Cerró los ojos, bañándose en el reconfortante calor. Le dolían las extremidades por otra noche de insomnio y su hombro irradiaba un dolor sordo hasta el cuello, una vieja cicatriz que le gustaba recordarle a Dream su presencia de vez en cuando.

Un silencio se había extendido por la habitación, Karl ocupado leyendo un libro mientras George miraba distraídamente el fuego, con la mente aparentemente en otra parte. Dream podía sentir cómo se alejaba lentamente, su cuerpo se relajaba mientras las mareas del sueño lo alejaban suavemente.

Esto es agradable , decidió. Esto es muy, muy agradable.

Fuertes pasos y el sonido de una puerta chocando contra la pared lo arrastraron abruptamente de regreso al mundo de la vigilia. Su cabeza giró bruscamente hacia donde estaba Sapnap en la habitación, las sombras del pasillo se arrastraban sobre su hombro. Dream podía ver temblores recorriendo su cuerpo, manos apretadas alrededor de un papel como si su vida dependiera de ello. Dream abrió la boca para decir algo, preguntar qué estaba mal, pero cuando miró a Sapnap a los ojos, todas las palabras murieron en su lengua.

Él sabe.

"Dream, ¿qué es esto?" Sostuvo el trozo de papel entre dedos temblorosos, con el rostro pálido y los ojos muy abiertos. Su voz sonaba tan agitada, tan asustada, como si estuviera pidiendo un conocimiento que no quería retener.

Dream se levantó del sillón, inmediatamente invadido por un sentimiento de arrepentimiento al dejar atrás lo único que lo mantenía con los pies en la tierra. "Sap- no es- no es nada". Mentiroso.

Un miedo frío se apoderó de él al mismo tiempo que un pánico caliente se extendía por su pecho y subía por su garganta. Su voz era temblorosa y la odiaba porque sabía que los demás podían oírla; lo odiaba porque sabía que no había forma de convencerlos de que no era nada.

"Dream, detente". No era una súplica, era una advertencia. La garganta de Dream se contrajo cuando trató de tragar, con la lengua pegada al paladar. Su ropa se sentía demasiado apretada, demasiado caliente en su piel quemada.

"¿Qué está pasando?" Karl trató de intervenir, mirando a Sapnap, a Dream, y luego de nuevo a Sapnap. Frunció el ceño cuando no obtuvo respuesta, mirando impotente a George, que estaba tan perdido como él. "Sapnap, ¿qué es eso?"

Yesterday, Tomorrow and Everything Inbetween (by FoxDevil en Ao3) EspañolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora