Cada vez que me miras fijamente a los ojos puedo ver ese brillo de la primera vez que me encanta y me hace sonreír.
Desde hace más de diez minutos Tweek daba vueltas por su habitación sintiéndose nervioso, ¿la razón? Había recibido un mensaje de Craig en el que le decía que iría a verlo a su casa porque había algo que quiere darle. No le molestan las visitas de su novio (al contrario, le encantan, más cuando se queda a dormir) pero para él es inevitable sentirse nervioso en su presencia, los latidos de su corazón se incrementaban y podía sentir esas típicas mariposas en el estómago.
Había dejado de dar vueltas por la habitación y se quedó de pié mirando fijamente a una pared hasta que unos brazos rodearon su cintura y una voz familiar lo sacó de sus pensamientos.
- ¿Estás bien, cariño? Te noto distraído
La voz de su novio lo sacó del trance en el que estaba. Rápidamente volteó la mirada soltando un pequeño grito que hizo reír al contrario.
- ¡Gha! ¿desde cuándo estás aquí?
- Acabo de llegar. Tu padre me dejó pasar y me dijo que podría estar aquí contigo mientras dejemos la puerta abierta... Aunque no podremos seguir esa orden esta vez.
Craig dejó de abrazar a su lindo rubio, lo miró con una sonrisa mientras iba cerraba la puerta de la habitación para posteriormente cerras las cortinas. Tweek no entendía qué carajo esaba pasando hasta que su novio tomó algo que había dejado en el escritorio al llegar, tomó su mano llevándolo a su cama y pidiéndole sentarse a la orilla de esta, Tweek hizo lo que su novio pedía aunque aún no entendía qué era lo que Craig tiene en mente.
- ¿Craig? ¿qué estás haciendo?
- Tranquilo, confía en mí.
Craig conectó un cable que encendió una lámpara que había comprado como regalo para Tweek y que dejó en su mesita de noche. No era una lámpara común, el foco de la lámpara estaba cubierto por un lindo diseño de estrellas que rotaban por toda la habitación.
- ¿Y bien? - Craig preguntó sentándose al lado de su chico, tomándolo por los hombros y abrazándolo - ¿te gustan?
- S - si... Son tan ¡gha! bonitas, gracias Craig.
La luz de la lámpara en contraste con el brillo en los ojos de Tweek lo hacían ver tan lindo, demasiado según Craig. A través de esa linda mirada podía recordar sus primeras citas, ese brillo en los ojos de su novio que lo volvía loco, le encantaba recordar esa pequeños momentos juntos y en lo mucho que significaban para ambos, ese radiante brillo que le hacía perder la razón. Con esa mirada que parecía de niño pequeño se lo decía todo: estaba logrando hacerlo feliz.
- Es muy bonita... E ilumina toda mi habitación.
- También a mí me gusta. Ahora podrás encenderla durante las noches, tal vez te ayude a dormir.
Tweek lo miró asintiendo con una sonrisa. Lo abrazó dándole un beso en la mejilla mientras que Craig pensaba que no podía dejar de ver esos hermosos ojos que adornaban el precioso rostro del novio al que tanto ama. Esos ojitos que le miran con tanto amor y que sin necesidad de palabras reflejan los sentimientos de Tweek por Craig.
Dímelo ahora, que no puedo dejar de mirar esos hermosos ojos que me vuelven loco.
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Flufftober | Creek
FanfictionNo hay mucho que decir, básicamente es mi participación en el #fluftobber2022