Nuevamente solos en casa, comenzaba a hacerse costumbre para ambos dieciochoañeros.
La casa de los Tucker había quedado a solas para la joven pareja una vez más, los padres de su novio estaban trabajando mientras que su cuñada había salido de paseo con algunas amigas. La ausencia de gente (salvo por él y el primogénito de los Tucker) le había permitido a Tweek estar un rato en la cocina horneando galletas mientras Craig estaba en la sala de estar jugando xbox.
Al concluir con la decoración de las galletas el rubio volvió a donde su estaba su amante, encontrandolo con una expresión alegre y quitándose los audífonos para luego levantarse del sofá e ir a abrazarlo. Tweek soltó unas cuantas risas nerviosas sin entender nada.
- ¿Pasa ngh algo, Craig?
- Oh, no es nada... Sólo acabo de ganar un viaje a casa bonita para ti y para mi...
El más bajo miraba a su novio preguntándose si era verdad o era una broma, aunque Craig parecía bastante convencido.
- Tú... ¿Hablas en serio?
- Sí. El pendejo de Kyle apostó unos cupones de descuento en una partida de battlefield y los perdió. Hubieras escuchado los gritos de desesperación del culo gordo, fué tan divertido.
Ninguno de los dos había ido antes, sólo sabían del lugar por todas esas veces en las que Cartman hablaba de aquellas ocasiones en las que escapaba de casa para ir ahí junto al pelirrojo mientras Kenny y Butters se quejaban porque nunca los invitaban. De todos modos Craig aceptó el trato pensando que si ganaba podría tener un viaje tranquilo para él y su amado rubio.
El día acordado para el viaje había sido un viernes antes de que oscurezca. El plan era que ambos irían a dicho viaje y esa noche Tweek dormiría en casa de Craig.
Ambos vestían elegantemente y aunque el rubio no lo admitiera pensaba que su novio se veía realmente guapo usando ese traje color azul rey y sin el gorro.
- ¿Por qué me miras así? ¿estás pensando cosas indebidas desde tan temprano?
Tweek se sonrojó a más no poder, cosa que inevitablemente hizo que su pareja suelte un par de risas.
- Estaba bromeando, tranquilo. También te ves hermoso en traje.
El más alto tomó al rubio entre sus brazos llevándolo hasta el auto que los esperaba en la entrada de de la casa. Una vez ahí Craig encendió el auto y ambos se fueron.
Esa noche cenaron en el afamado restaurant e incluso tomaron algunas fotografías de recuerdo (Tweek incluso tomó varias de Craig con sombrero charro) y pasaron un buen y lindo rato a solas como pareja, y todo gracias a una estúpida apuesta que llevó a su novio ha tener una de las mejores cenas de su vida y sin duda sería un momento más al lado del rubio, de esos que quedarían por siempre en su corazón.
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Flufftober | Creek
FanfictionNo hay mucho que decir, básicamente es mi participación en el #fluftobber2022