OBSESSIVE [Billy Hargrove]

Capítulo 4: Eres un idiota.

Ya era lunes,estaba un poco nerviosa tomé un café y me arreglé un poco más linda de lo habitual, no siempre Billy Hargrove pasaría por ti.

Me molestaba lo que se estaba tardando pero de pronto siento el rugido del Camaro en mi puerta,tome mi mochila y salí a saludarlo. Lo ví y su rostro era frío como el hielo, pero bueno era Billy Hargrove, nunca sabrías como iba a estar cuando te lo cruces.

—¿Todo está bien?— pregunté con nervios.

—Si todo está bien, siento llegar tarde—me sonríe levemente.

—No te disculpes, se que odias llegar tarde y....puedes hablarme de lo que necesites.

Me acerco un poco a él mientras me invita a subir al auto donde al subir él, le da un golpe al volante.

—Solo cosas con mi padre pero ya se solucionó—añade un poco molesto mientras conduce hasta que, de pronto su semblante cambia, me toma la mano y lo observó sonreír. Billy Hargrove era una mezcla de sentimientos rara, pasaba de estar molesto a sonreir en tan solo un par de segundos.

—Puedes acudir a mí siempre que las cosas ya sabes...estén complicadas, tú y tu hermana siempre serán bienvenidos en mi casa—murmuró mientras tomaba su mano mirándolo un poco fijo.

—No quiero que te involucres en toda esta mierda—añade serio—y no es mi hermana, es mi hermanastra.

—Creo que tengo el derecho a decidir dónde me involucró, además ya estoy involucrada contigo, digo "Eres Mía" ¿O ya te arrepentiste?— miro por la ventanilla del auto con miedo a su respuesta.

—No, no me arrepentí...es que solo a veces parece que no tengo paz—suspira mientras aún conduce.

—Lamento oír eso Billy, me gustaría que al menos conmigo puedas sentir algo de paz— le sonríe levemente.

—La tengo, pero sabes hoy no iremos a la preparatoria. Conmigo no sabrás nunca que esperar—me sonríe con cierto misterio en sus ojos.

—¿Dónde va llevarme Hargrove? Acaso va secuestrarme...creo que mis amigas tenían razón, estoy loca al meterme contigo, pero ya que estamos—lo miro a los ojos— ¿Podrías aumentar la velocidad? El viernes eso me gustó— le sonrió y veo el brillo en sus ojos ante mi pedido mientras aprieta un poco más el acelerador.

—No están tan lejos de la verdad y no se podría llevarte a cualquier lugar, Grimes y no me tientes hacerlo porque podría ser capaz—añade burlón mientras acaricia suavemente mi pierna llegando a un lugar medio abandonado, como una bodega, estacionando su auto para luego besarme intensamente como siempre lo hace.

—Puedes hacerlo cuando quieras, no se donde estamos pero no me importa. Veo que tienes un gusto bastante peculiar— vuelvo a besarlo hasta que veo que el saca un par de cuerdas.

—Y te sorprenderías de lo que puedo ser capaz de hacer ¿Harás lo que yo diga?—su tono mostraba autoridad pero tambien era seductor a la vez. Me era imposible decirle que no.