𝐶𝑎𝑝𝑖́𝑡𝑢𝑙𝑜 2

461 37 0
                                    

Cuatro muertes, cuatro portales

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cuatro muertes, cuatro portales

Ya habían salido del Otro Lado, se encontraban en el remolque donde viven Max y su mamá. Para que Arya contará lo que vió, sin embargo la rubia aún temblaba de miedo, tenía la mirada perdida. No quería salir de la habitación de la pelirroja.

Unos pequeños golpecitos en la puerta hizo que la rubia dejara de pensar, miró reteniendo el grito ahogado que quiso salir de su boca. Nancy se acercó a ella, se sentó a su lado tomando su mano.

Sintió un pequeño escalofrío y enseguida apartó la mano. Wheeler no era para nada estúpida, sabía perfectamente que lo hizo que viera Vecna le afectó bastante.

—Tranquila, soy yo–le dijo con calma. Arya mirándola a los ojos, ya no sabía lo que era verdad o no–. Escucha, sé que estás asustada. Pero necesitamos saber que fue lo que te hizo.

—Él...

Tienes un poco de sangre, de una Banshee, Todos aquellos que fingen ser tus amigos no lo son, Y si intentas hacer algo en contra de mi...

Memorizaba las palabras que le había dicho. Aún procesaba cada una de ellas. Tragó saliva nerviosa y miró de nuevo a su mejor amiga la cual aún tenía el semblante preocupado.

—Creo que debería de hablarlo con los demás, también–dijo casi en voz muy baja pero Nancy oyó perfectamente. Su amiga asintió y ambas fueron hacia la sala donde estaban todos esperando a que Arya les contara.

Rusia

Trataban de saber cómo salir de esa prisión, mientras que el Demogorgon mataba a los guardias que intentaban detenerlo y tal vez matarlo.

Murray tomó la radio que estaba en el suelo, cuando un guardia que se encontraba con el Demogorgon pidió que encendieran la electricidad. Se acercó al hombre que estaba herido por los golpes que le dió él.

—[Dile que los prisioneros están encerrados y que estás intentando arreglar la electricidad]–le ordenó en ruso pero éste no habló–. [¡Díselo!]

—[Y esa puerta, ¿a dónde lleva?–Antonov se acercó al doctor el cual estaba ileso.

—[Al bloque de celdas...]–Dmitri se enojó y estampó su mano en la pared al lado del doctor.

—[¡Celdas no! Necesitamos una salida]–le aclaró serio, Yuri que aún no le habían quitado la venda de la boca ni desatado, se acercó a ellos tratando de hablar. Pero Antonov lo miró molesto ordenándole que se callara.

Margaret al ver a Yuri resopló y fue por él para apartarlo de ellos.

—No es momento para que digas tonterías–agregó Maggie pero Yuri siguió intentando hablar. En otra parte no muy lejos, Joyce estaba con Hopper ayudándole con su herida del brazo y contándole todo lo que ha pasado estos meses incluyendo a Once.

—Oigan, eh, esto no es bueno–les habló Murray que miraba hacia las cámaras de seguridad. Donde se veía todo el desastre que estaba ocasionando el Demogorgon–. Al parecer, también sabe trepar.

Sé acercaron al ver como el Demogorgon trepaba para ir a los siguientes pisos donde había más guardias. Sin embargo la criatura mató a todos. Oyeron el rugido y voltearon hacia la puerta que estaba enfrente de ellos.

—¿Qué es eso?–preguntó Antonov.

—Por favor, díganme que no tienen otra de esas cosas–suplicó Murray.

Jim fue el primero en dar un paso hacia aquella puerta, tomó el arma, pero el doctor les dijo que no entrarán ahí ya que es peligroso. Pero no le hicieron caso y todos fueron detrás de Hopper.

Cuando abrió la puerta, un chillido oyó. Entraron después de él y vieron que en una camilla había un Demo-dogo (como los había llamado Dustin). Atado. Éste rugía tratando de liberarse.

Hopper se acercó a la criatura y le dió un balazo en la cabeza. La sangre le salpicó un poco en la cara así que con la manga de la chamarra que llevaba se limpió.

Siguieron caminando, Maggie observó a la criatura que ahora estaba muerta. Una mueca de asco se mostró en su cara y continuó su camino con los demás. Su expresión fue aún más de sorpresa y disgusto cuando miró que en cápsulas de vidrio había más de esas cosas congeladas.

—No puede ser...–caminaron observando a los Demo-dogos congelados.

—¿Qué hacen con esto?–preguntó Murray. Un zumbido bronco se escuchó, Maggie se acercó a ellos cuando vieron en un vidrio una clase de niebla negra que se movía muy rápido.

—¡Oigan!–todos vieron a Antonov que les habló cuando abrió unas cortinas–. Encontré algo.

Quitaron el carrito que había y abrieron la rejilla que estaba en el suelo.

—¿Crees que nos saque de aquí?–le preguntó Hopper sentado en el suelo al lado del túnel.

—Le doy una probabilidad de cien a uno–contestó Antonov a su lado de cuclillas. Ambos hombres sonrieron, Jim fue el primero en bajar por aquel túnel para después los demás.

Hawkins

—Él me mostró... cosas que aún no han pasado. Son cosas terribles. Vi... una nube oscura que se extendía sobre Hawkins–todos estaban oyendo a Arya, la cual cuando hablaba sentía que de nuevo lloraría–. El centro en llamas, soldados muertos... y una... criatura gigante con... la boca abierta. Y esa cosa no estaba sola. Había muchos monstruos. Un ejército completo–miraba hacia el suelo, aún no tenía el valor de verlos a ellos–. Y ellos entrarán a Hawkins, a nuestras calles, nuestras casas. Y luego... me mostró a las personas que me importan–Arya por un momento miró a Steve el cual no había quitado sus orbes cafés de ella–. Y estaban... Todos estaban...–sollozó volviendo su mirada al suelo. Nancy que estaba a su lado acarició su hombro.

—Bueno, pero... sólo quería asustarte, Arya–quiso tranquilizarla Steve–. ¿Si? Porque... eso no es real.

—Aún no. Pero aún... había algo más... Me mostró portales. Cuatro portales, a lo largo de Hawkins. Y esos portales... se parecían al del tráiler de Eddie, pero no dejaba de crecer. Y no era el Hawkins del Otro Lado. Era nuestro Hawkins... nuestro hogar.

—Cuatro campanadas–miró a Max de pie recargada de lado–. El reloj de Vecna... Siempre da cuatro campanadas. Cuatro exactamente.

En ese momento Arya recordó la última clase que tuvo en la secundaria.

—El maldito me contó su plan desde el principio–frustró Arya llevando sus manos a su cabello–. Cuatro muertes, cuatro portales.

—El fin del mundo–agregó Lucas.

—Si eso es cierto... falta solamente una muerte–mencionó Dustin.

—Ay, no es cierto. Por Dios–maldijo Eddie sentado entre Erica y Steve. Los cuales estaban enfrente de Arya.

—Otra cosa me dijo antes de salir del trance–dijo Arya moviendo su pierna cada vez–. Él sabe lo que en realidad soy o lo que era mi mamá... dijo que tenía un poco de sangre Banshee.

 dijo que tenía un poco de sangre Banshee

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
 𝑻𝑯𝑬 𝑬𝑵𝑫||𝑺𝒕𝒓𝒂𝒏𝒈𝒆𝒓 𝒕𝒉𝒊𝒏𝒈𝒔  ➋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora