—Lo mato a golpes —nos informa Massimo.
Mi vista va al albino, ha estado silencioso desde que se enteró, ¿estará preocupado por él?
—Es imposible, dejamos a Mark con su equipo —replica Iván.
—Parece que el muy imbécil decidió hacer la parte final solo. No se que le paso por la cabeza, le contó todo lo que le hizo a la chica.
—Dios, esto es una maldita desgracia.
—Lo encontramos muerto en la misma habitación, lo desfiguró a golpes, volvió a cubrir a la chica, sin dejar rastros.
—Este error no lo podemos dejar pasar.
—Lo se, Iván —señala—. Quiero que lo busquen, encuentre a Mikey, y traigan me su cabeza, ¿entendido?
Asentimos.
—Bien, vayan, ¡ya!
Salgo junto a Alexei, Iván sale momento después, sin vernos, y desaparece.
El albino mueve la cabeza, una seña para que salgamos del lugar, asiento.
—Mikey sigue vivo.
—Si...
—Creí que lo habían matado... Junto a la chica.
Mi mano se mueve instintivamente al bolsillo de mi chaqueta, mis dedos rozan el pequeño contenedor... Creí que lo había perdido.
—¿Aún llevas eso? —pregunta algo asqueado.
—Si encontramos a Mikey, supongo que querrá tener esto...
—Si lo encontramos —repite
Nos detenemos delante de mí auto... ¿Dónde se supone que lo busquemos?
—Adney, ¿crees que sea buena idea buscarlo? Mataron a Auri, intentaron matarlo... Justo ahora, Mikey debe estar inestable.
—Y si no lo buscamos, Massimo querrá matarnos, que dilema —suelto con frustración.
—¿Por qué no nos pidió ayuda?
—No lo se Alexei... Yo no lo sé.
—Si nos hubiera contado lo de Auri... Tal vez.
—Estuviéramos muertos.
Silencio, uno bastante incomodo. Un suspiro escapa de mis labios, y veo al albino.
—Si Mikey te hubiese contado lo que pasaba, ¿lo fueras traicionado? —pregunto serio.
El albino me ve, indignado, aparta su mirada y deja escapar un suspiro.
—No... Yo lo hubiese ayudado.
—¿Incluso si significaba morir?
—Massimo me quería muerto, Mikey debía matarme, pero en vez de eso me salvó... Le debo un favor.
Me subo al auto, el albino hace lo mismo, sin apartar su mirada de mí.
—¿Tu lo hubieses traicionado? —suelta con un tono sombrío.
—No.
Su mirada sigue sobre mí, clavándose como miles de puñales. ¿Sería capaz de traicionar a Mikey? La verdad... Es que no, él era distinto a nosotros, él no merecía esto.
Él fue arrastrado a toda esta mierda en contra de su voluntad, nosotros lo convertimos en lo que es... Yo no podría traicionarlo.
No sería capaz de joder aún más las cosas.
—¿Adónde iremos? —desvía el tema, serio.
—Con la única persona que podría averiguar algo de Mikey.
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Street of Sin
Ação"Hasta la persona más insignificante se puede dar por vencido y terminar a merced de la oscuridad". ¿Como podría llegar alguien como él, alguien "normal" a la mafia? ¿Qué tan cruel puede ser el destino, para mandarte a las manos de los demonios de l...