—Ha pasado un mes desde la desgracia, más de 200 oficiales muertos y un sin fin de civiles heridos. Sin duda alguna, uno de los peores desastres en la historia de nuestra ciudad, y para hablar de el está con nosotros uno de los principales afectados, Massimo Salvatore. Señor Salvatore.
—Gracias por invitarme a su programa señorita Gómez.
—No señor Salvatore, gracias a usted por asistir. Entonces, los sucesos de hace un mes.
—Lamentable... No hay más palabras para referirse a esa desgracia. Un grupo de terrorista repartió el caos por toda nuestra ciudad, asesinaron a nuestros honrados oficiales... Y el principal agresor... Él —Su voz se corta.
—Lo lamento señor Salvatore, si usted no puede —suelta la presentadora con rapidez, con un tono dolido.
—No, tranquila —pide—. Todo deben saber el monstruo que es Mikey Trembley, el fue hasta el rascacielos donde estaba junto a mi familia, intento matarme, yo solo me defendí. Fue en defensa propia, y cuando logré detenerlo, su plan quedó expuesto... Tenía francotiradores, arremetieron contra mi familia, mi pobre hija —Solloza.
—Señor Salvatore... —susurra la presentadora.
—No... Mi hija esta mejorando, sigue con vida, pero por culpa de ese monstruo nada será igual. Él incitó una guerra, el creo todo este caos, por la estúpida idea de que yo fui la causa de todos sus problemas, Mikey Trembley era un demente, y sus seguidos también lo son, me quieren muerto sin razón alguna.
—Señor Salvatore, gracias por contarnos todo esto. Le aseguramos que nuestros oficiales cuidarán de usted y su familia, este desastre no se repetirá.
—Gracias señorita Gómez, me tranquiliza saber que estaremos a salvo...
—Y eso fue todo por hoy amigos. Dejaremos que nuestro amado empresario Massimo Salvatore descanse. Ya lo saben, el responsable de todo este caos, Mikey Trembley, no fue más que un monstruo y afortunadamente ya murió, no volverá a herir a nadie más; y para sus seguidores, les advertimos que si los encontramos, también pagarán por sus pecados.
La televisión se apaga, mi mirada va hasta la chica; apuntando el control hacia el aparato.
—Bien, lo lograste, eres famoso —suelta.
—Herir a Gianna, así que eso basto para alterarlo —comenta el chico a mi lado.
—Es su favorita, ¿qué esperabas? —replica el otro.
—No empiecen a discutir, eso no es importante justo ahora —señalo serio—, esto es solo el inicio.
—Si... Él no se lo esperara.
—La guerra solo acaba de empezar.
—Cariño... No...
—Oh mocoso, ¿ahora qué harás?
—Hagamos esto.
Fin.
——————————————
Aquí acaba este libro. Espero desde el fondo de mi corazón lo hayan disfrutado, que se hayan emocionado con algunas escenas y llorado con otras. Yo disfruté bastante escribir este libro, fue un proyecto personal bastante especial para mí, bastante increíble, una experiencia única en realidad.
Por ahora, aquí acaba la historia de Mikey, pero eso no significa que ya haya contado todo, no, aún quedan planes para Mikey, a futuro.
Sin más, les doy las gracias por haber leído la historia, por el apoyo que le dan, y por todo lo bueno.
Hasta la próxima amigos.
ESTÁS LEYENDO
Street of Sin
Acción"Hasta la persona más insignificante se puede dar por vencido y terminar a merced de la oscuridad". ¿Como podría llegar alguien como él, alguien "normal" a la mafia? ¿Qué tan cruel puede ser el destino, para mandarte a las manos de los demonios de l...