CARMÍN

CAPITULO 14: Encuentro

Carmín
Capitulo 14
Por RUI

Solo déjame probarte...

- ... Ella intentaba hablar pero la mordaza se lo impedía.

- Ustedes los humanos son tan frágiles, mira como quedaste, tu piel quedó llena de golpes, ya es tarde supongo que debes de tener hambre, debo ir a comprarte algo... Saldré por un momento, estarás bien... Ni se te ocurra escapar, estamos dentro del bosque, si sales te perderás y te quedarás en la fria noche, ha comenzado a nevar, así que no te conviene... Y aunque intentes gritar nadie te escuchara, volveré. - El de acercó a ella y la besó sobre la mordaza, ella alejo su cabeza en señal de repulsión, sus ojos se llenaron de lagrimas, aquel hombre salió, ella escucho el auto alejarse, y una vez que ya no escucho nada intento soltarse.

Después de varios minutos y de lastimarse severamente sus muñecas logro desatarse; corrió hacia la puerta e intento abrirla pero estaba cerrada, no le quedó de otra que escapar por una ventana, al abrirla sintió el frío de la nieve, tomo una cobija que estaba en un sillón y salió de ahí.

No sabía por dónde ir, así que solo camino hasta dejar atrás aquella cabaña, esperaba escuchar el ruido de autos, o de personas, pero solo se escuchaba la calma del bosque.

Camino por dos horas, el frío era penetrante, la cobija apenas y le ayudaba, el sol comenzaba a ocultarse ella casi no podía ver por dónde caminaba, por lo que no se percapto que estaba a punto de caer, dio un paso pero ya no había camino, cayó rodando por varios metros, la ramas de aquella flora le provocaron varias cortadas, cansada, hambrienta y nuevamente golpeada se quedó desmayada.

A varios kilómetros de ahí un ciervo corría a toda prisa para escapar de su cazador, estaba a punto de ser capturado pero el viento de aquella noche llevaba el aroma de sangre, de una exquisita sangre, aquel vuelto llevaba consigo el aroma de la sangre de Carmín.

- Que es esto? Es el aroma de la sangre de Carmín... Jamás olvidaré ese dulce aroma... Pero como? Ella está aquí? Dónde? Norte... Oeste... Debo darme prisa está en peligro!

Russell corrió a toda prisa siguiendo el rastro del aroma por el bosque hasta que encontró a una inconsiente Carmín.

- Carmín, que te sucedió! Despierta... Esta helada, esto es grave, si no hago algo morirá.

El la abrazó pero su cuerpo no generaba calor. La miró entre sus brazos acaricio su cabello, la mordio suavemente en su cuello para extraerle un poco de sangre, mantuvo la sangre en su boca luego mordio su muñeca para combinar ambas muestras para después volverla a morder e introducirle la sangre. El cuerpo de Carmín comenzaba a calentarse.

- Funcionó! Se la quedó mirando esperando que su temperatura se normalizará pero no pudo con su deseo de probar de nuevo su sangre, se acercó a ella y la volvió a morder, luego de tomar un trago la besó, carmín nosé percaptaba de nada, estaba sumergida en un sueño profundo.

El sol estaba saliendo, la noche había llegado a su fin, unos de los primeros rayos del sol se poso en la cara de Carmín haciendola despertar.

- Buenos días Carmín.

- Que?...

- Como te sientes?

- Que sucedió?

- Eso me gustaría saber, te encontré en medio del bosque, estabas desmayada y te traje aquí.

- Esto es una cabaña?! No puede ser, a acaso tú fuiste?!

- No se que estás pensando pero definitivamente no tiene nada que ver conmigo. Estamos en un área de cabañas, mira por la ventana.
Carmín se levantó de la cama para ver atraves de la ventana, efectivamente estaban en una zona de cabañas, la mas proxima solo estaba a unos cuantos metros.