Cuando salimos del lugar en el momento que me monto a el auto me quedo dormida y cuando llegamos a la empresa Caled me despierto y no entendí mi mal humor que lo trate muy mal el no le pareció importarle cuando le pedí perdón.Almorzamos juntos y seguimos trabajando asta la hora que acordamos. Justo a hora estoy muy enojada con el.
Hace media hora que llegamos a el súper y parece muy contento platicando con una castaña igual que yo que trabaja en el lugar.
Yo estoy tomando mis cosas mientras él las suyas porque no lo quiero cerca. Agarro muchos chocolates, tres bolsas de cereales. Leche, galletas etc.
— Amor enserio vas a llevar todo eso... No crees que es muchos dulces - Pongo los ojos en blanco lleva más de diez veces diciéndome lo mismo.
— Es que no ves Caled - Hablo con irritación.
— Está bien.. Solo quiero que no te enfermes - Agarro mis frutas y yogures.
El solo tomó unas que otras galletas y cosas para su "sana alimentación ". Llegamos a la caja para cancelar y noto que la castaña esa le sonríe a Mi marido.
El muy tonto también lo hace. Esta ligando frente de mi, ahí que lo mato. Lo empujo y comienzo a pasar mis cosas mientras que él me mira con fingida confusión.
Registramos todo y estoy súper cabreada esa perra le sonríe y le guiña ojo disimuladamente. Cuando le entrega la tarjeta otra ves a Caled le rosa la mano.
Esa fue la gota que derramó el vaso — Amor puedes ir llevando las cosas mientras yo busco algo más - Pongo mi mejor cara.
— Está bien. No tardes - Asiento y lo miro asta que sale del lugar y ahora si miro a la perra esa.
— Tu.. Espero que sea la primera y última ves que coquetees con Mi Marido o te juro por Dios que te saco los ojos y me los como en salsa - Ella me mira asustada y con la cara roja.
— Agradece que no le digo a tu jefe esto.. Estás advertida entendiste perra - Abre los ojos demás al escuchar mis palabras y la dejo atrás saliendo del lugar.
Ella como que si entiende ya que no me dijo ni mu menos mal porque le hubiera dejado la cara muy linda.
Me monto a el auto sin mirar a Caled y siento su pesada mirada en mi pero no lo volteo a ver.
— Que hiciste Aya entro - Pregunta prendiendo el motor.
— Nada que te importe - El gloriosamente calla y comienza a conducir.
Cuando llegamos a casa espero que aparque el auto y me bajo sin mirar atrás y tomó una bolsa para entrar a la casa.
— Hola Carmen - La saludo como siempre.
— ¿Mi niña cómo te fue? - Pregunta limpiándose las manos. Será que no se cansa de asear.
— Bien Carmen - Le digo y ella asiente en ese momento entra Caled con las bolsas.
— Amor que tienes - Me pregunta el muy sónico ese.
— Nada... Hoy no duermes en la habitación - Le aclaro — Puedes dormir en cualquiera de los muebles de la casa menos en las habitaciones - El me mira sorprendido y solo lo ignoro tomando un chocolate y saliendo de la cocina.
— Ah - Me paro en la puerta y lo miro — No tienes permitido usar sábanas ni poner la calefacción.
Cuando me jiro sonrió por dejarlo sin palabras y sin que decirme. Entro a la habitación y de una ves me voy a la ducha.
Me puse mi pijama larga y me senté en la cama a jugar el juego de Caled mientras me como mi chocolate. El entra y me mira queriendo decir algo pero lo callo.
— No me digas nada. Estoy hablando muy enserio - Le explico porque parece no haber entendido — Puedes ducharte si quieres y salir cuando lo hagas.
El me mira me mira y como ya entiende mi cara hace lo que le dije y no opina. Cuando sale del baño lo hace totalmente desnudó provocándome pero no voy a caer en sus provocaciones.
Al ver que no le digo ni mu se va. Miro la hora en el celular y bajo a cenar.
— ¿Hija que te hizo Caled? - Me pregunta Carmen preocupada por mi comportamiento hacia el cuando estamos en la mesa.
— Pregúntale a él Carmen - La animo para que lo haga ella, lo mira pero él desvía la mirada en su plato y no dice nada.
Así que era consiente de que si estaba coqueteando.
— ¿Tienes algo que decir Caled? - Le pregunto sarcástica.
— Bueno como el señorito no quiere hacerlo lo are yo - Me acomodo en la silla y miro a Carmen.
— Resulta y acontece que el señor aquí presente estaba coqueteando con una chica en el súper mercado en mis propias narices - Digo todo mirándolo a él que no me mira.
— Yo no estaba coqueteando - Se defiende.
— A ¿si? - Estaba a punto de decir más cuando Carmen me detiene.
— Que descarado eres Caled - Habla ella indignada.
— Ella solo me sonrió y yo se la devolví.. Están exagerando - Pero que se cree.
— Ningún exagerar - Me enfurezco de la nada.
— Ya bájale a tus celos lía.. Estás muy celosa - Será capullo.
— ¿Lo dice el papá de los celos? - Contraatacó.
— Ya basta los dos - Pone paz Carmen.
— Es ella y sus celos tontos - Pongo los ojos en blanco y me levanto de la mesa cuando eh terminado.
Siento que me llega un mareo de la nada y me tengo que sostener de la silla para no caerme.
— Estás bien amor - Pregunta Caled preocupado.
— Si.. Si. Solo fue por levantarme tan rápido - El asiente no muy convencido a él igual que Carmen y me voy a la habitación.
Después de lavar mis dientes entra el hacer lo mismo y sale con cara de puchero.
Ya son las once de la noche y no puedo dormir, creo que me pase con él pero se lo merece. Está haciendo frío y no me quiero imaginar cómo la está pasando.
Después de pensar y dar vueltas me levanto y tomó una manta para llevársela.
Cuando bajo está acostado en el sillón sin nada de sábana para el frío. Lo arropo y le doy un beso en la mejilla y me devuelvo rápido a mi habitación para que no me note.
Después de media hora dando vueltas me va cogiendo el sueño y me voy a los brazos de morfeo.

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Posesivo
RomanceDespués de una relación si puede existir el amor verdadero. Lia una chica que por una rotura amorosa no quiere volverse a enamorar pero lo que ella no sabe es que no puede mandar en el corazón y tal ves terminará cayendo en los brazos del chico pose...