Bonhomía

IV

Bakugo intenta escapar del agarre de la criatura de lodo mientras lo ataca con sus explosiones de sus manos, al mismo tiempo, el monstruo ataca a los otros presentes.

Aichi crea un escudo con un símbolo.

-Imaginary gift! Protect!

Todoroki fue vencido, y el pecoso lo protege, ya que un tentáculo de lodo se acerca, pero Aichi los protege.

-Ahora estamos a mano- les sonríe.

-¡Debemos hacer algo!- exclamó Deku.

El dragón suelta un alarido de dolor, Aichi observa la situación, a continuación, el peliazul comienza a despedir un aura de color azul junto con su espada; en un abrir y cerrar de ojos, Aichi logra cortar al monstruo, liberando al dragón y al rubio, creando una ráfaga de luz, dispersando la materia lodosa como pedazos de plastilina.

-Increíble- susurró el pecoso.

Aichi guarda su espada-¿Se encuentran bien?

El dragón se levanta y se acerca a su salvador, con su hocico le acaricia el rostro agradeciéndole.

-¡Kacchan!- Deku se acerca al rubio y le tiende la mano- ¿Estás bien?

-¡No me toques!- lo aparta y se incorpora- no necesito tu ayuda.

-Kacchan...

-¡No me llames así! ¡¿Quién eres tú para darme apodos infantiles?!

-Deberías estar agradecido- replicó Shoto- el príncipe Sendou los salvó.

Bakugo encara al peliazul quien está acariciando el dragón.

-¡Oye, tú! No creas que te voy a agradecer sólo porque me salvaste. Lo tenía todo controlado.

-Sí, claro. Estando a merced del monstruo es tener bajo control- le respondió- tal vez no lo sepas, pero ese monstruo estaba a punto de beber la sangre de tu dragón, era la única forma de salvarlo.

-¿Acaso quieres morir, idiota?- muestra una pequeña explosión en una de sus manos, pero de pronto el dragón se interpone y protege a Aichi- ¿Qué carajo?

El gruñido del animal lo detuvo.

-¿Lo está protegiendo? ¿Por qué?- preguntó el pecoso.

-Cuando un animal es salvado por alguien ajeno a su especie, están en deuda- explicó Shoto- en el reino animal es su más poderosa ley.

Bakugo gruñe, no puede hacer nada.

-La suerte te acompaña.

El dragón vuelve a acercarse para que Aichi lo siga acariciando.

-Bueno, ahora que estamos en deuda ¿Me podrías llevar a dónde está la espada legendaria?- inquirió el peliazul.

Bakugo le da espalda mientras suelta un suspiro pesado, segundos después, lo mira.

-Eres un testarudo. Está bien, te llevaré a mi tribu, ellos deben saber algo.

-Llévanos a nosotros también- agregó Shoto.

-¡¿Eh?!- de nuevo el dragón gruñe- bien. De acuerdo- dijo entre dientes.

Se subieron al lomo del dragón y empieza el viaje.

-¡Es increíble la magia que usaste!- exclamó Deku con entusiasmo- el clan Royal Paladin usa ese tipo de magia.

-Bueno, no es la gran cosa- Aichi se rasca la nuca con timidez.

-Por cierto, me llamo Izuku Midoriya. Y ya conoces al príncipe Shoto Todoroki.

-Es un placer.

-¿Por qué viajas solo?- preguntó Shoto- debería haber alguien que te proteja.