CAPITULO 12

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Ya habían pasado algunas semanas des de que Alex nos contó a todos lo que llevaba guardando tanto tiempo, aun lo pienso y no sé cómo el padre de Alex fue capaz de hacer una cosa así.

La universidad iba más que bien, me encantaba lo que estaba estudiando y lo estoy disfrutando muchísimo. Raquel se estaba convirtiendo un una de mis mejores amigas, le contaba todo lo que quería porque sabía que me ayudaría, cualquier cosa se la contaba a ella, obviamente había hecho más amigos, pero ella ya era una persona especial para mí.

Durante estas semanas he estado intentando que Alex hable las cosas con su padre, pero, es imposible de ninguna manera es posible, por parte de entiendo porque es muy fuerte, pero creo que si los dos hablasen alguna cosa podrían solucionarlo, supongo que Alex también necesita tiempo para asimilar todo lo ocurrido.

Ahora los encontramos los dos sentados en el sofá, estamos mirando otro capítulo más de las chicas Gilmore. En realidad, yo tenía que ir a pasar algunos apuntes porque si no se me acumularía todo en fechas de exámenes.

—Alex, voy a coger unas cosas de la uni que tengo que hacer y me pongo aquí en el comedor contigo—le dije.

—Perfecto porque yo también tengo que hacer varias cosas—me dijo él.

Nos levantamos los dos y cada uno fue a buscar sus cosas en la habitación. Nos sentamos y Alex puso Spotify en la tele y puso música, estaba sonando The Way I Love You de "Taylor Swift", una de las mejores canciones que he escuchado en mi vida.

Vi que Alex abría un libro de los tres que tenía y se ponía a subrayar algunas cosas, yo cogí todos mis apuntes y empecé a pasar a limpio algunos porque en clase no me daba tiempo de copiar todo y hago esquemas para después poder hacer los apuntes.

Levanté un poco la cabeza para mirar a Alex, estaba muy concentrado. La verdad que cada día que lo veía más guapo estaba.

Creo que Alex no está preparado para estar con ninguna persona, primero tiene que superar todo lo que le paso, creo que hablar con su padre haría mucha cosa ya, pero creo que va a costar mucho.

—Alex—le dije dejando de hacer los apuntes.

—Dime—levantó la cabeza y me miró.

—¿Nunca pensaste en ir a un psicólogo y contarle todo? —hacia días que le quería preguntar, pero no me veía con corazón de hacerlo.

—Pensarlo si lo pensé, pero piensa que cuando me paso yo tenía quince años, nadie me lo podía pagar, sino que fuesen mis padres, entonces lo mejor fue guardarme todo dentro de mí y aguantar todos estos años.

—Y, ¿no crees que ahora es un buen momento para ir?

—La verdad que estaría bastante bien, pero que una persona que estudiar psicología vaya al psicólogo es un poco raro ¿no?

—Alex, de raro no tiene nada que tu estudies psicología no significa que no tengas problemas, todos tenemos problemas, y a todos nos va bien contarlos, tu no hiciste durante cinco años y creo que ya sería hora de hacerlo, simplemente para que te sientas mejor contigo mismo.

—Puede que tengas razón.

...

Habían pasado ya unas semanas des de que le dije a Alex el tema del psicólogo, lo convencí, hace una semana que ya va, realmente sé que para él es muy difícil todo esto, pero creo que de aquí unos meses va a ser la persona más feliz del mundo. Cada vez que llega de allí se le ve un poco afectado, normalmente llega cena y se va a su habitación, se pone música y duerme, nada más.

Estoy en mi habitación haciendo algunas cosas de la uni, ya se notaba que estaba llegando invierno porque empezaba a hacer fresquito, la verdad que se agradece porque aquí en valencia hace mucho más calor del que yo estoy acostumbrada.

10 SEGUNDOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora