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No tardaron mucho en darle el alta a Katsuki.

Recuerda Katsuki, tienes que echarte esta crema dos veces al día durante dos semanas para que tus heridas cicatricen correctamente.-Le recordó Kirishima por décima vez.

-Ya lo sé.

Se quedaron en silencio durante unos minutos. A Kirishima realmente no le importaba, aunque no lo pareciera estaba bastante cómodo en ese silencio. A diferencia de Bakugou que realmente quería decirle algo a Kirishima, pero le costaba decirlo.

-Gracias, y lo siento mucho.

Lo dijo tan bajito que Kirishima realmente dudó de si había escuchado mal. Esto era inesperado para él. Katsuki le acababa de agradecer y además se había disculpado.

-¿Por qué?

-Gracias por salvarme la vida. Y lo siento porque hayas tenido que ver todo eso y haber arruinado tu semana.

-Vaya, no creí que me ibas a decir esto. No hay de qué, y no tienes porqué disculparte.

❥❥❥

Todos lo habían descubierto. El rumor no tardó en llegar a oídos de todos los estudiantes, y la gente realmente se aburría en esas instalaciones, y que mejor tema de conversación que un alumno que se intentó suicidar y estuvo durante una semana en el hospital.

-Escuché que su compañero de habitación se lo encontró en el baño medio muerto.

-Pobre del chico. Realmente tener que encontrarse con eso...

-¿Por eso se escuchaban gritos esa noche?

-¡Te lo dije! Te dije que el chico era un suicida, no me prestaste atención hasta ahora.

-Callate, son ellos dos.

Esas sólo eran algunas de las cosas que escuchaban mientras caminaban por la cafetería.

No les hagas caso Katsuki. Hablan sin saber.-Dijo Eijiro tratando de reconfortar a Katsuki al ver la expresión plasmada en el rostro del rubio.

Se sentaron en una mesa, algo alejada del resto a elección de Kirishima, que no quería que Katsuki siguiera escuchando como hablaban de ellos dos.

Bon appetit.-Dijo Kirishima antes de empezar a comer.

-Que aproveche.

Katsuki comió en silencio mientras Kirishima hablaba de mil cosas. El rubio lo escuchaba atentamente, al tanto de todas sus palabras, de todas sus gestos y expresiones. Realmente creía que Kirishima era un chico muy bonito.

Vió cómo tres chicos se acercaban a ellos. Una chica con piel rosada y cabello del mismo color, un chico alto de cabello azabache y un chico más bajo de pelo amarillo fuerte. Los miraban fijamente mientras caminaban en su dirección.

¡Hola Ei!-Dijeron los tres casi a la vez. Miraron a Bakugou y no se molestaron ni siquiera en regalarle una sonrisa ni un saludo.

-¡Hola chicos!

-¿Podríamos hablar contigo?

Kirishima lo miró, y Bakugou se limitó a asentir. No tendría sentido que no lo hiciera. Él podía irse si así lo quería.

VenomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora