Secret ( MarkHyuck / NoRen)

15: The Chaos continues

– ¡Donghyuck basta!

– ¡Suéltame! ¡Que me sueltes!

Mark se negó aún sosteniendo su cintura evitando que fuera tras Renjun.

– ¡Cálmate!

– No me pidas que me calme ¡suéltame maldita sea! —forcejearon hasta que soltó su cintura— Voy a matarlo.

Giselle estaba tratando de asimilar lo que acababa de pasar.

– ¿Dónde está Jeno?

Mark saco el celular de su bolsillo iba a llamarlo, pero tuvo que deternse y tomar la mano de su novio que quiso salir.

–  Déjame.

– ¿Quieres calmarte? Lo importante es Jeno ahora.

– ¿Quieres que finja que no pasó nada? Cuando vino y te beso frente a mi maldita sea.

Negó.

– Donghyuck.

– No pretendas que me calme por ahora.

– No lo hago, pero es tu amigo y no es lo que quieres hacer ahora.

– Mark...

– Piensa un poco por favor, te conozco y no quieres ir a golpearlo –suspiró– Bueno si, pero quieres reclamarle por lo que hizo y recriminarle por tratar así a Jeno.

Quería gritarle, golpearlo si es necesario para que entiendiera. Su novio tenía razón.

– Te odio.

– También te amo, ahora debemos buscar a Jeno después si quieres le lanzas un bote de pintura.

– Chicos se que se ven muy lindos, pero Jeno...

Donghyuck volteó hacia su novio.

– Llamaré a su hermana quizás está en casa.

Mientras Mark trataba de hacer la llamada con un mano, mientras la otra sostenía la mano derecha de su novio. Giselle pensaba que tan lejos habría llegado su amigo.

– Tengo una idea.

– ¿Sabes a dónde fue?

– Eso creo –exclamó la castaña– Pero debemos movernos rápido.

El pelirrojo asintió, su novio suspiró y colgó la llamada.

– Va a llamarlo, aún no llega a casa.

[•••]

La carrera para encontrar a Jeno tenía al menos 30 minutos, y en esos 30 minutos su celular no había dejado de sonar.

Casi todas eran llamadas de Renjun.

No iba a tomarlas, ni siquiera respondería los mensajes. Quería pensar y quizás si era posible embriagarse hasta olvidarse de que le gustaba el chino.

Neo Zone era muy conocido por ser un buen bar y tener buena música.

El ambiente que tenía siempre lo ponía de humor, y sus tragos con colorantes neón hacia más atractivo el lugar.

En la barra había muchos asientos libres y tomó uno esperando que la bartender se acercará para poder pedir algo.

Aunque los nombres de los tragos tenían nombres muy raros.

¿Kick it? ¿Boom? Seguro era parte de la temática pero de todos el llamado Mad Dog le resultaba atractivo.

Ordenó y el vaso tenía detalles muy especigicos, el hielo tenía forma de un perro que se derretía, mezclándose con el tono rojiso neón que tenía la bebida.