el máximo depredador (elementos en goblin Salayer)

capítulo 6 guerra.

Elementor había sido designado como la cabeza de la defensa por parte de Goblin Slayer. Muchos de los aventureros experimentados quisieron refutar su autoridad, hasta que los colmillos de Elementor estuvieron cerca de sus caras. "Todos prepárense", ordenó Elementor, su mirada clavada en las figuras de los goblins que usaban a mujeres como escudos. Incluso para alguien como él, comenzaba a sentir algo de repugnancia por estos seres verdes. "Veamos si tu plan puede funcionar", añadió con un asentimiento de cabeza antes de dar la señal al enano para que comenzara a lanzar un hechizo de sueño. "Primero, hagamos que tengan un hermoso sueño", dijo mientras los goblins empezaban a caer rendidos ante la magia del sueño.

"¡Vamos, ahora a salvarlas!" exclamó, y muchos de los caballeros empezaron a tomar a las mujeres para llevarlas a un lugar seguro.

"¿Estás lista, Elfa?" preguntó Elementor.

"Sí", respondió la elfa.

"Entonces haz que lluevan flechas", ordenó Elementor.

"Será un placer", dijo la elfa mientras usaba su gran visión para disparar grandes cantidades de flechas. "¡Digan adiós, chamanes!" exclamó, y todos los chamanes empezaron a caer como si fueran nada.

"Ataquen", ordenó Elementor, señalando a los goblins aún dormidos. "No dejen ningún sobreviviente", añadió, manteniéndose sobre una roca como si estuviera esperando su momento.

Todos los aventureros comenzaron a masacrar a los goblins, y gracias a los magos, las flechas eran desviadas.

"No es que me importe mucho, pero podrías mantenerte dentro del desvío", comentó la hechicera.

Lejos de allí, un goblin observaba con miedo toda la masacre. "Mi señor está siendo masacrado."

"¡Manden a los jinetes!" ordenó, y muchos goblins montados en lobos comenzaron a correr hacia las defensas.

"Creo que es hora de hacer mi parte", anunció Elementor mientras su cuerpo comenzaba a llenarse de llamas. "Es hora de que ustedes mueran." Golpeando el suelo con fuerza, provocó grandes géiseres de lava que consumieron a los lobos y goblins que intentaron atacar. "¿Vas a mandar más escoria?", desafió, mientras todos miraban con asombro el gran poder de Elementor.

"La piroquinesis de esta criatura es increíble", murmuró la maga, mirando con cierto temor a la criatura que parecía evolucionar con cada batalla.

"Todos ustedes manténganse cerca. Si se adentran en el bosque, puede que nunca salgan", advirtió Elementor con seriedad, dejando a muchos helados. "O terminarán como ellos", añadió, moviendo levemente la cabeza para señalar un cuerpo desmembrado detrás de él.

"He escuchado muchas historias, pero nunca pude verlos", comentó el lancero, mirando con asombro a los goblins campeones que tenían grandes quemaduras en todo el cuerpo. "Con que les diste un pequeño recuerdo", dijo mirando a Elementor.

"Son fuertes, no se confíen", advirtió Elementor, plantándose frente a todos los humanos e intimidando a la mayoría de los campeones. Había matado a muchos de ellos, y los que quedaban tenían un trauma por parte de Elementor.

Con un poderoso rugido, Elementor corrió hacia los campeones, quienes no se quedaron atrás. Sus puños impregnados en fuego chocaron contra la cara de uno de los campeones, enviando su cabeza volando. "Eso es todo", declaró, alzando su cuerpo con gran facilidad para lanzarlo contra los otros goblins.

"¡Oye, no te lleves toda la diversión!", exclamó el Lancero clavando su lanza contra otro campeón que intentaba atacar a Elementor. "Después de todo, esto es una misión."

"Los humanos son tan habladores", murmuró Elementor mientras agarraba el brazo de otro campeón. "Que no aprenden que deben concentrarse", añadió con desdén, usando su gran fuerza bruta para destrozarle el codo y dejar al descubierto los músculos desgarrados.