16 | somos familia

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—¿Lyanna? Despierta —suplicó una voz asustada. 

Sus ojos se abrieron y ya no estaba cayendo; estaba bien. Se dio cuenta de que todavía estaba en el avión y Peter todavía estaba a su lado. Ella levantó la cabeza de su hombro, frotándose los ojos. 

—¿Qué pasa? —preguntó Lyanna con cansancio, bostezando mientras buscaba sus zapatills. 

—Uh... el piloto dijo que aterrizaremos en quince minutos. Pensé en despertarte porque, bueno, estabas teniendo una pesadilla —admitió Peter en voz baja—. La verdad es que daba bastante miedo.

—¿Por qué? —preguntó Lyanna, metiendo su pie en su zapatilla. 

—Bueno, empezaste a dar vueltas, y estabas murmurando —explicó Peter con torpeza—, cosas como "ayúdame" y "sálvame". Y luego... "me vas a dejar morir". ¿Con qué estabas soñando?

Lyanna negó con la cabeza—. Por favor, no me hagas hablar de eso. 

Peter asintió comprensivamente—. Bueno. Uh... ¿quieres despertar a Happy? 

—Ja, no —dijo Lyanna—. Puede que se llame Happy pero es todo lo contrario cuando interrumpes su sueño. Diviértete, chico araña.

Al final, fue Lyanna la que despertó a Happy, parándose detrás del asiento en el que dormía para tocarle el hombro. Instantáneamente, el ex guardaespaldas se levantó en alerta máxima mientras miraba a su alrededor en busca de quien interrumpió su sueño reparador.

Cuando vio a Lyanna mirando a Peter, suspiró—. Dije que no me despierten hasta que estemos en Nueva York. 

—¿Happy? —dijo Lyanna, señalando por la ventana—. Aterrizamos hace diez minutos. 

—¿Por qué no me despertaste? —preguntó Happy. 

—¡Porque eres una persona aterradora para despertar! —exclamó Lyanna—. Eso no importa, ¿podemos salir? Por favor y gracias.

Sin otra palabra, salió de la cabina de primera clase y desembarcó del avión. Cuando sus pies tocaron el suelo, sintió que se relajaba. Estaba en casa, en terreno familiar, y mentiría si dijera que ese pensamiento no la calmó.

—¿Puede Peter ir al complejo con nosotros? —le preguntó Lyanna a Happy—. Nunca lo ha visto. 

Happy parecía inseguro—. No sé lo que piensa tu padre. 

—Lo llamaré —respondió Lyanna, sacando su teléfono y marcando el número de su papá. Cuando él respondió, ella habló primero—. Papá. 

—Lyanna, ahora no es el momento —dijo Tony. 

—Solo escucha por un segundo —dijo Lyanna—. Quiero saber qué haremos con Parker. ¿Lo llevamos a casa o...?

—Llévalo al complejo —respondió Tony—. Pero que no entre.

Y luego colgó. 

Lyanna estaba increíblemente enojada—. Bien, cuelga el teléfono.

—¿Qué dijo? —preguntó Peter.

—Dijo: "llévalo al complejo pero que no entre" —respondió Lyanna—. Sus palabras, no las mías. Vamos.

—¿Vamos a llevar el auto? —preguntó Happy. 

Lyanna se giró en la dirección opuesta, apuntando hacia adelante—. El auto está por aquí. 

Peter se rió. Esa chica estaba loca.

Tenía tantos estados de ánimo diferentes. En un momento estaba feliz y al siguiente podía estar tan desanimada que a Peter le entraban ganas de envolverla en mantas y protegerla con cada fibra de su ser. Era diferente a cualquier otra chica que hubiera conocido, diferente a Liz, MJ y Gwen.

HEROES | Peter Parker ⁴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora