Capitulo 6

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(Este capítulo tiene algunas escenas subidas de tono, para mí no lo son, pero hay que dar el aviso)

Las comidas ya habían sido servidas, solo era tiempo de esperar, la paciencia había sido una gran amiga mía desde el día en que llegué a este lugar.

Como si todo fuera hermoso, los guardias las sirvientas, todos los señores, jóvenes, de la familia Loa caían en un inconsciente sueño que duraría al menos 12 horas antes de que todos despertaran.

Solo algunos tendrían la suerte de despertar, saqué la daga entre mi ropa, y caminé a los campos, donde los esclavos veían a los guardias caídos en el suelo.

—Aquellos que quieran ser libres, deben de irse este día, tomen cualquier cosa de valor de la mansión y retírense. —grite cuando todos me veían.

—Porque deberíamos creerte.

—Porque si no se van este mismo día, no responderé por lo que les suceda cuando despierten.

—Tú lo hiciste —pregunto otra persona que se acercaba a mí.

—Claro que lo hice, estas personas han matado a todos los esclavos que en algún momento se prometió liberar —sus rostros cambiaron —todos solo hemos sido encarcelados aquí, para trabajar como esclavos y cuando ya no tenemos valor para ellos, estos simplemente matan a todos y hacen sacrificios que ayudan a su cultivo.

Después de aquella breve charla con la daga mate a cada guardia que encontraba, y los ojos que me observaban de cerca tenían terror y admiración en ellos.

—Corran y tomen dinero, corran lo más lejos de este lugar. —dije por última vez.

—Que pasara contigo.

—Esta es mi venganza.

Todos sabían lo que había pasado meses atrás. Los castigos que recibía, las violaciones. Todo paso, pero nadie hizo nada por temor, y no los culpo por eso.

Cuando seguía matando a todos los guardias en los campos, la multitud de personas comenzaron a moverse salvajemente. Las casas, cuartos habían sido saqueados, el granero estaba quedando vacío, robaron y robaron.

Pero de alguna manera aquí solo se cobra lo que ya les habían quitado, yo solo le doy un poco de esperanza a estas personas.

Cuándo entre en los cuartos de sirvientes, estos estaban tirados en el suelo, en un sueño del que no despertarían por el veneno, así que seguí con los cultivadores de la casa, no lo dude dos veces mate a todos los que no me eran de importancia, casi toda la familia Lao perecería esta noche.

Y llegué a las habitaciones principales, donde solo se entraban los bastardos que habían matado a la abuela, saque los cables y los amarre, me costaría moverlos de lugar hasta el salón grande, pero valdría la pena el esfuerzo.

Termine de colgar los cuerpos, después fui por el protagonista de la obra, no podía faltar Lao Yi, el, quien ocuparía en centro de mi atención, como podría olvidarlo.

Saqué al viejo de su estudio, fue donde calló dormido por el veneno, y tal como había hecho con sus hermanos lo llevé y lo colgué como un jamón en temporada.

Me cercioré que los cables estuvieran bien colocados, para que no hubiera inconvenientes y cuando todo estaba listo, preparé todo lo que iba a necesitar.

Antes de que la diversión comenzara, caminé por toda la propiedad, después de todo iban a tardar en despertar unas cuantas horas.

Había muchas personas aún, muchos amarrando grandes bolsas con comida y objetos de valor, otros ya habían huido en la primera oportunidad.

Una Jiējie para el villano escoriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora