Harry Potter : Nuevo Mundo [1]

Capítulo 167

Sin ninguna interrupción, comenzó mi lucha con el primer ganador. Fue bastante rápido, en realidad. Intercambiamos golpes un par de veces, y el tipo incluso me golpeó en la mandíbula, pero falló un golpe similar, se desorientó y lo rematé.

La segunda pelea uno contra uno fue igual de rápida, siguiendo más o menos el mismo patrón que la mía.

"¡Veamos quién va a ser el campeón juvenil!" deliró el hombre bigotudo, saltando de un lado a otro del ring. "¡Lucha!"

Mi oponente claramente tenía experiencia en tales peleas. Tal vez incluso hizo algo profesionalmente. Este oponente era el tipo alto y pelirrojo que había visto al principio. Estaba bien animado, tenía los puños cerrados, no tenía prisa por pelear.

Durante aproximadamente un minuto, simplemente dimos vueltas, esperando. Pero el pelirrojo no parecía tener mucha moderación, así que atacó, tratando de tocarme con su izquierda. Tan pronto como encontró una brecha en mis defensas, estuvo justo frente a mí. No tenía mucha habilidad, pero era superior en velocidad y reacción, así que lo esquivé. A veces, el pelirrojo intentaba golpearme con una patada baja bastante hábil, pero levantaba la pierna o retrocedía.

"Deja de retorcerte, rubia", sonrió la pelirroja. O débil para luchar como un hombre.

"No."

"Decir ah..."

A veces encontré oportunidades seguras para contraatacar, pero en vano: me encontré con un bloqueo o esquivé.

"¡Entendido!" retumbó el pelirrojo, lanzando su habitual derechazo de izquierda.

Me puse el bloque y sentí un destello de magia en el mismo momento del impacto, y un golpe muy fuerte se estrelló contra mi brazo, amenazando con aplastar el bloque. Salté de nuevo a mi postura y escuché gritos de indignación de la multitud.

"¡Usó magia! ¡Lo vi!" gritó alguien.

"¡Nada como eso!" deliró un hombre bigotudo, mostrando a todos una especie de medallón. "¡Ninguna magia registrada!"

"¡Boooo!"

Pero la lucha siguió. Otra serie de golpes del pelirrojo fue igual de acompañada de destellos mágicos, agregando dos o tres veces la fuerza a los golpes, y casi me alcanza.

"No te retuerzas, rubia, y déjame vencerte", sonrió la pelirroja. De todos modos, no puedes competir con un oficial en combate.

La risa se elevó desde mi interior. ¡No realmente! Había luna llena en el cielo, era luna llena esta noche. ¡Este imbécil pelirrojo hace trampa y luego se luce! No, bueno, ¡circo! De acuerdo...

Ginger volvió al ataque. Por un breve momento, en el momento mismo del impacto, me fortalecí con hemomancia. Tal salto en los parámetros del cuerpo provocó el efecto de la dilatación del tiempo. Incluso los sonidos se hundieron en tonalidad: el cerebro no tuvo tiempo de igualar la velocidad de percepción a la habitual. Me agaché ligeramente bajo su golpe y me acerqué, inmediatamente golpeé el hígado del pelirrojo con mi mano izquierda. Sin disminuir la velocidad, enderezándome bruscamente, usando mi torso y mis piernas con un uppercut con la palma abierta, mandé al pelirrojo por los aires. Solo en este momento, mi cerebro había compensado la velocidad de la percepción, volviendo a la normalidad pero sin perder la reacción.

El pelirrojo se desplomó sobre su espalda, con el rostro torcido y los ojos en blanco, pero seguía caminando, con los brazos extendidos frente a él. Sus músculos parecieron tensarse.

El hombre bigotudo se quedó en silencio durante unos segundos, pero mi oponente no tenía prisa por volver en sí. Un curandero corrió hacia él, y sin una varita, conjuró algo, y el pelirrojo finalmente perdió el conocimiento, mientras que el hombre con bigote obviamente hizo una mueca de alegría a regañadientes.

"¡¡¡Tenemos un ganador!!!" gritó, corriendo hacia mí. El público vitoreó, aplaudió y felicitó.

"¡Bien hecho, muchacho, bien hecho!" elogió al bigotudo, y cuando todos se calmaron, continuó. "¿Puedes presentarte?"

"Max Knight".

"¡Oh, nombre genial, muchacho! Veamos quién gana esta noche, ¿Escocia o Irlanda? ¿De dónde eres?"

"Mmm..."

La multitud estaba en silencio. Solo Seamus y Dean intentaron no reírse a carcajadas.

"De Londres".

Silencio. Desde la multitud, alguien gritó:

"¿Qué significa eso?"

"Bueno", decidí echarle leña al fuego. "Mientras Escocia e Irlanda pelean, el inglés gana".

El silencio duró poco, estallando en risas generales.

"Pero en general", grité, llamando la atención sobre mí. "Vengo de un campamento irlandés y soy un compatriota irlandés".

"Entonces," el hombre bigotudo hizo una pausa dramática. "¡Irlanda ganó!"

El público tarareaba medio con aprobación, medio decepcionado, y me sirvieron un cerdo recién cocinado en un asador y una caja de cerveza de mantequilla.

"¡Peleas de adultos en quince minutos!" gritó un hombre bigotudo. "¡No se separen, damas y caballeros!"

Mis camaradas de Hogwarts corrieron rápidamente, agarraron los bocadillos, algunos me dieron palmaditas en el hombro alegremente, otros simplemente gritaron "¡Max!"

"¡Qué pelea!" se maravilló Seamus. "¡No esperábamos eso! ¡Y en general!"

Seamus me golpeó en broma en la prensa.

"¿Cuándo entrenaste tus músculos de esa manera? Estás en la biblioteca todo el tiempo..."

Hermione también se abrió paso hacia mí.

"¡Quiero golpearte con algo pesado!" pero me golpeó el pecho con el puño. "¡Eso es ridículo! ¡Te peleaste!"

Y ganó, por cierto.

Una Lavender risueña, con el fuego más real en sus ojos, empujó a una Hermione que chillaba por detrás, y casi tuve que atraparla.

"¡Besa a tu caballero sin armadura! Je, je, je..."

Hermione tenía una cara como si estuviera sumergiéndose en un remolino, pero tampoco había ningún deseo de no sumergirse. Rápidamente se puso de puntillas, me dio un breve beso en los labios y, sonrojándose, volvió a meterme la ropa.

"Eso es por ganar".

"¡Guau!" gritaron los estudiantes de Hogwarts, comenzando a aplaudir. Todo lo que querían era un espectáculo.

"Y hablaremos más sobre la participación en la carpa. No tendrás cena. ¡No, no desayuno!"

Los muchachos se rieron y todos regresamos al campamento irlandés.