El Diario Real: Princesa Lúa

Capítulo 13

Lúa

No tenia ganas de nada, regresé de la galería y me encerré en mi habitación. Cada palabra e insinuación que Namjoon o más bien el Príncipe Namjoon hizo, se repiten como remolino en mi mente. Empiezo a creer que todo lo que dijo era verdad, no estaba tan equivocado cuando decía que tenia relaciones con él para poder tener una buena historia, pero también fue cierto lo que le dije, lo deseaba. Lo deseo. Eso no justifica lo que hice y no tengo como defenderme cuando estúpidamente lo escribí. Prácticamente él era mi pago o yo era su pago o lo que sea. Me siento mal conmigo misma.

El resto del día fue libre, me dormí y me levante a bañar para volver a dejarme caer en la cama, no planeaba salir y no tenía hambre para bajar a comer. Las Princesas que tuvieran una cita no asistirian y el resto no teníamos un horario para bajar así que nadie notará mi ausencia.

-Princesa- escuché a Diana entrar a la habitación. Salí del baño con los ojos hinchados y ella simplemente se acercó a abrazarme. -Necesita comer algo- dijo y me mostró un plato con un poco de ensalada y un sándwich, además de un poco de fruta y un té.
-No tengo hambre, Diana.- me vio de mala manera -Lúa, no voy a ser tu cómplice en esto, pídeme lo que quieras pero no permitiré que te trates mal a ti misma
-¿Solo por no comer?
-Seré solo tu doncella, pero mi trabajo es cuidarte y estar al pendiente de ti. Has bajado a los desayunos y comidas, pero solo has picado un poco de lo que te sirven.- camino y se sentó conmigo -Se que no te desahogaras con nadie aquí, porque a final de cuentas esto es un concurso, pero deberías inte tardo. La Princesa Estephany o la Princesa Johana tienen sus propios asuntos con otros Príncipes, no creo que suceda algo si les cuentas.

Estaba analizando sus palabras y no estaba tan equivocada, pero mi miseria pesaba un poco más en estos momentos. Lo del Principe Namjoon terminó de explotar hoy mismo y todo esto me esta sobrepasando. Me levante de la cama, tome el tazón de fruta y lo empecé a comer de mala gana.

-¿Feliz?- le pregunte y me sonrió
-Me gustaría que comieran aunque sea el sándwich, pero algo es algo.- Estaba por dar otro bocado cuando se escucho un grito de la habitación de arriba, la habitación de Johana. Subí corriendo y entré al mismo tiempo que Estephany.

-¿Qué sucede?- me preguntó
-No lo se- entramos inmediatamente, algunos segundos antes de la gente se empezará a juntar en la entrada
-Jo, ¿Qué pasa?- pregunté
-Mi mamá...- fue todo lo que dijo y tanto Esteph como yo supimos inmediatamente lo que sucedía. Me agache junto a ella y la abrace mientras Estephany se informaba con su Doncella sobre lo que pasó.

-Me tengo que ir- dijo repentinamente, poniéndose de pie y caminando a su armario
-Pero te van a eliminar- le dije preocupada
-No me interesa- Sabía que esta sería su reacción, si fuera mi madre también lo haría y por otro lado, sabemos que ninguno de los Príncipes ha mostrado interés en ella. 
-Piénsalo, Jo.- dijo Estephany -Tal vez podrían darte permiso.- no hizo caso y continuó guardando sus cosas
-No esperaré hasta que me den permiso. De todos modos no tengo nada que hacer aquí- dijo volteando a la puerta como si le estuviera haciendo saber a alguien de su decisión. Había más Princesas que Príncipes así que no había muchas opciones, Hoseok, Yoongi, Namjoon y Jimin eran los únicos ahi y perfectamente podía descartar a dos. Yoongi se giro y salió de la habitación con su típica cara sin expresión. Definitivamente el no es, pensé.

Nos despedimos de Johana y la dejamos ir, de alguna manera tenia razón, simplemente era un asunto de urgencia y no tenía que esperar hasta mañana para que le dieran permiso, me parece que los Reyes deberían reconsiderar su expulsión. Una vez que se fue, los pocos que habían quedado en wl lugar para despedirla se fueron a sus habitaciones. Estaba a punto de hacer lo mismo pero mi estómago dolía, no tenía hambre pero empezaba a pasar factura mi falta de alimentos. Camine hacia la cocina pero wn cuanto llegue al pasillo lo vi caminar hacia donde estaba yo, camino más lento y cuando estuvo casi junto a mi, hablo, sin voltear a verme