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—Te ves pálido —le dijo Seungmin a Mark al día siguiente

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—Te ves pálido —le dijo Seungmin a Mark al día siguiente. Había pasado por la fundación solo un instante para hablar con Mark sobre los cambios que deseaba hacer para la subasta. Se le había ocurrido algo divertido para aligerar el ambiente y si todo salía de acuerdo al plan hasta varios de los involucrados podrían salir beneficiados.

—Tengo una jaqueca y tengo que decirte que tú no te ves mejor que yo, amigo —alegó Mark, pero no con mucha convicción. Últimamente había visto al director un poco más cansado de lo habitual. Sabía que estar al frente de esta institución más aparte de sus negocios era algo complicado, muchos ya hubieran delegado las riendas de la fundación. Pero Mark estaba muy comprometido con este lugar— ¿Cómo van las cosas con el general del clan Hwang? —Seungmin enarcó una ceja.

—¿General? —chilló Seungmin. Mark rió, pero inmediatamente se detuvo y se llevó la mano a la cabeza con una mueca de dolor.

—El clan Hwang me odia —Mark comenzó a buscar algo en el cajón de su escritorio—. Jaebeom es el líder, Hyunjin su segundo al mando y su pequeña niña es la ejecutora.

—No exageres —no pudo evitar reír.

—¿Exagerar? —Mark sacó dos píldoras blancas de un frasco—. En una ocasión me dio una patada en la espinilla porque simplemente coloqué mi brazo por encima de los hombros de Jinyoung. —Mark se tragó las píldoras y bebió un trago de agua.

—¿Ella hizo eso? —Era difícil de creer que una niña tan dulce como Giselle pudiera hacer eso.

—Estaba siguiendo órdenes de su padre. Al parecer ella tiene que golpearme si nota que intento robarle a su papá Jinyoung —Mark se estremeció—. Deberías de ver cómo me mira esa niña, al menos tiene los ojos grandes de no ser así pensaría que es el mismo Jaebeom quien me está fulminando con la mirada —Seungmin rió. Era cierto que Giselle tenía muchos gestos parecidos a los de su padre y su tío, pero también tenía un alma gentil como Jinyoung.

Seungmin se dio prisa a resolver todos los pendientes con Mark, ya que tenía que estar en casa de los Hwang antes de que Giselle llegara con su tío.

Una hora más tarde, mientras esperaba a que llegaran tío y sobrina, Seungmin decidió investigar un poco sobre Hyunjin. "Bendito fuera quien inventó al Dios todopoderoso Google". No encontró mucha información, al parecer el hombre era reservado con su vida personal.

Frunció el ceño al encontrar un artículo de una revista del corazón. En la página ponían una foto de la boda de Hyunjin y al otro lado una foto de él saliendo de la corte. Quien sea que hubiera tomado esta foto, seguramente le pagaron muchísimo dinero por ella. Ya que Hyunjin se veía en un primer plano adelante, bajando los escalones de piedra, detrás de él se veía el palacio rústico de la corte de justicia, y encima de las escaleras estaba su ex esposa besando a un hombre rubio.

Joder. El pie de la foto decía: "Otro cuento de hadas convertido en historia de terror".

Malditos periodistas amarillistas. No encontró en ningún artículo la razón del divorcio, aunque Seungmin la sabía de primera mano. También en varias páginas mencionaban que Hyunjin no se había vuelto a casar y se le relacionaba sentimentalmente con varias mujeres. Pero eso eran solo rumores, en cambio la ex esposa, se había vuelto a casar con un hombre diez años mayor que ella y en ese momento estaba embarazada.

BLOODLINE ;hyunminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora