— Hoseok, apúrate a limpiar esas mesas, por favor.
— Yo solo estoy aquí para apoyarte, pero no trabajo aquí, ni siquiera me pagas y mucho menos me das las gracias. — dijo molesto terminando de limpiar la ultima mesa.
— Te estoy dando experiencia para cuando trabajes en alguna gran empresa, así que tu deberías de agradecerme a mi. — sonrió con orgullo.
Hoseok puso los ojos en blanco y soltó un bufido.
— Dudo que en las empresas me pongan a limpiar mesas, estoy estudiando marketing, no para mesero.
— Bueno, pero vas a saber limpiar mesas, hacer rico café y servirlo de manera eficiente, y eso no cualquiera lo hace.
— Cállate. — se río y terminó de ayudar al chico.
Las horas pasaron y el día en aquella cafetería terminó, Hoseok estaba exhausto, y aún debía hacer su tarea para la universidad, su primer año había sido demasiado difícil, ahora que estaba por finalizar su segundo año aun seguía tratando de acostumbrarse.
Estudiar algo que no le gustaba simplemente para cumplir con las reglas impuestas por la sociedad era algo muy desgastante, pero no podía dejar la carrera, corrección, no quería dejarla, porque hacerlo significaba que su mente volvería a aquellos pensamientos dolorosos, que aún no lograba resolver.
— Ya me voy, mañana debo despertarme temprano. — recogió sus cosas y las metió en su mochila. — Vengo después de la universidad, Yoongi, nos vemos. — sonrió y salió de ahí.
— Adiós, Hobi, nos vemos.
Hoseok llegó a su casa y fue a la cocina a dejar la comida que había comprado en el camino.
— Ya llegué, traje la cena.
— Hoseok, no debiste molestarte. — sonrió un poco. — Gracias, hijo.
— Te conozco, y se que te saltas el almuerzo, así que siéntate a comer. — sirvió la comida en platos.
Ambos se sentaron a comer, platicaron un poco del trabajo y de la escuela.
— ¿Cuándo vuelve Jungkook?
— La próxima semana. — dijo Hoseok emocionado. — No puedo creer que ya pasaron casi dos años desde que se fue.
— ¿Lo extrañas?
— Si, demasiado. — suspiró. — El tiempo se me ha hecho eterno desde que se fue.
— ¿Ya hablaste hoy con él?
— Todavía no, en un rato le marco.
— Me lo saludas, y dile que si quiere podemos ir por él al aeropuerto.
Hoseok lo miró y sonrió un poco.
— Yo le digo, gracias.
Terminaron de comer, Hyunki levantó los platos y los lavó mientras Hoseok limpiaba la mesa.
— Deja eso ahí yo lo hago, mejor ve a hacer tu tarea.
Hoseok asintió, subió a su cuarto acostándose en su cama y soltó un suspiro, se sentía muy cansado física y mentalmente por todo.
Taehyung estaba terminando su proyecto, le había tomado más tiempo del que hubiera querido pero confiaba en que el resultado sería exitoso.
La puerta del departamento fue abierta y observó a la persona que entraba.
— Soobin sigue en tu cuarto durmiendo.
— Pasé a comprar un poco de pollo frito para cenar. — sonrió dejando todo en la mesa del comedor.