Detroit Become Human: Mi Nombre Es Hank.

Salvando vidas.

-Tenemos que encontrar a supervivientes -Diría Hank, a decir verdad, North estaba consternada con lo que estaba pasando como para irse en contra de Hank -.

A pesar de los disparos y sonido de pisadas sobre el metal del barco oxidado, alcanzaron a escuchar el jadeo de alguien. Cuidadosamente North y Hank investigaron al respecto.

-¡Es un androide! -Exclamaría North. Inmediatamente iría hacia él y lo ayudaría apoyando el brazo de él sobre su hombro. Hank los cubriría -.

-Gracias... -Diría él -, suerte que no dañaron ningún biocomponente, ¿No?

-¿Cuál es tu nombre? -Preguntaría North. Los tres comenzaron a dirigirse hacia una de las salidas que daban a tierra, con la pierna dañada, no podría nadar sin riesgo a hundirse -.

Hank dispararía a dos oficiales especializados antes de permitirle al androide responder con la pregunta.

-Luther... Ese es mi nombre.

-De acuerdo, Luther -Diría Hank -, ya casi llegamos. North, no podemos irnos sin más, tenemos que asegurarnos de que Markus cumplió con su cometido -.

-¿Bromeas? ¡No voy a irme sin él! 

Hank se vio en la obligación de limpiar el área lo más que se pudiera de oficiales. Aún sentía cierto remordimiento por acabar con vidas humanas, pero no le dejaban otra opción.

-¡Vamos! -Exclamaría Hank para animar a los androides a sus espaldas. Debían de darse prisa -, ¡Ustedes, esperen! - Exclama a una pareja de androides -, llévenlo con ustedes.

Hank y North despejaron un poco más el área, permitiendo que varios androides lograsen escapar, sin embargo, no podían estar ahí para siempre, por lo que se vieron en la obligación de regresar.

-¡La bomba ya va a explotar! ¡Nos tenemos que ir! -Exclama Markus al reunirse con ellos nuevamente, logrando encontrarlos a medio pasillo -.

Los cuatro corrieron en dirección a una de las salidas que daban directamente al río y así escapar. Si el plan de colocar el explosivo parecía ser difícil, la huida no resultaría ser más sencilla cuando unos soldados consiguen herir a North en la pierna, obligándola a caer al suelo. Heroicamente Markus iría en su auxilio, cubriéndose con un pedazo de metal oxidado de las balas. Conseguiría levantar a North y neutralizar a los dos soldados más próximos, pero detrás venían más, la luz de sus linternas los delataba.

Contagiado del valor de Markus, Hank desenfundaría su arma y dispararía a los soldados para darle tiempo a Markus y North de avanzar. Las propiedades de la complexión física de su diseño el daban una ventaja en el combate, por lo que podría neutralizar él solo a tres soldados.

-¡Vamos! ¡Rápido! ¡Vamos! -Exclama Markus a escasos centímetros de la orilla -.

A escasos segundos de haber tocado el agua, la bomba estalló y empezó a terminar de hundir el barco. Jericho se había perdido.

Fecha: 10 de noviembre del 2038

Hora: 19:31:05

Después de los acontecimientos de Jericho, lo que restaba del pueblo androide en Detroit encontró refugió en una iglesia abandonada, era grande, así que el refugio era apropiado para resguardar a todos, al menos de momento.

Mientras Markus digería lo que acababa de ocurrir, Hank estaba parado en una esquina oscura, apartado de los demás. Sí, era un divergente como ellos, pero él era causante de la destrucción en sus hombros, las vidas que sus decisiones cobraron lo atormentaban, ¿Qué pensaría el teniente Anderson de lo ocurrido? Suponiendo que siguiera con vida después de haber jugado ese tonto juego con el arma.

-Creo que le fallé, teniente... -Murmuraría para sí mismo. Entonces Markus se empezaría a mover, primero hablaría con una androide, acompañada de un infante, después con sus dos más allegados y finalmente iría con Hank, ¿Qué haría Markus con él? -, Es mi culpa, los humanos consiguieron localizar Jericho... Fui torpe... Debí suponer que me utilizaban - A pesar de sus palabras, no pensaba eso del teniente Anderson, era el único que lo trataba diferente -, Lo lamento, Markus -Por cierto, él seguía sin decir nada al respecto -, Puedo entender que no confíes en mi...

-Ahora eres uno de nosotros -Dice por fin. Sus palabras le daban cierta tranquilidad, el ser aceptado -, tu debes de estar con tu pueblo -Había sido un gesto indulgente de su parte, pero era lo correcto para Markus. Justo cuando Markus se disponía a irse, Hank lo interrumpe, había tenido una idea -.

-Hay cientos de androides en la planta de montaje de CyberLife. Si pudiéramos despertarlos, quizás se unirían y equilibraría todo...

-¿Quieres infiltrarte en la Torre de CyberLife? -Markus frunce el entrecejo de su rostro y niega con la cabeza -, Hank, eso es suicidio...

-Confían en mí... me dejarán entrar -Hank estaba seguro de ello y esa seguridad sería transmitida a Markus -, Si alguien puede infiltrarse en CyberLife, soy yo.

-En cuanto entres ahí, te matarán -Insiste Markus en tratar de hacer desistir a Hank de sus intenciones -.

-Hay altas probabilidades... pero, estadísticamente, siempre puede suceder que ocurran eventos improbables -Fraternalmente Markus se acercaría a Hank y colocaría una mano sobre el hombro -.

-Ten cuidado...