𝙱𝚒𝚝𝚝𝚎𝚛𝚜𝚠𝚎𝚎𝚝 🦋 𝚌𝚑𝚊𝚗𝚑𝚘

| Capítulo ۵ 24 |

No puedo negar que las sesiones de terapia para convertirme en mejor omega fueron bastante complicadas debido a que desconocía la mayoría de las cosas que mencionaron mis amigos, sin embargo, estoy dispuesto a tener éxito en mi objetivo que consiste en dejarle claro a Chan que no soy como las personas me describen. Quiero demostrarle que puedo ser todo lo que necesita sin tener la necesidad de sentirme forzado y esto lo estoy haciendo porque realmente lo deseo para mejorar mi vida.

Lamentablemente, ya transcurrieron tres días y no he hablado con Chan ni mucho menos lo he visto en persona debido a que se encuentra muy ocupado con los problemas que hay en su manada. Debo esperar con paciencia hasta encontrarme con él para poner a prueba lo que he aprendido gracias a mis amigos que se tomaron las clases muy en serio porque desean que yo sea feliz y estoy muy agradecido por ello.

Estaba tan absorto en mis pensamientos que no me percaté de la presencia del peliazul que tomó asiento frente a mí en la banca por lo que continué resolviendo el problema de matemáticas que se había vuelto bastante complicado a causa de que no he parado de pensar en todo lo que aprendí gracias a los chicos puesto que no quiero olvidarlo.

Fruncí el ceño a causa de la frustración y procedí a lanzar la goma de borrar con fuerza logrando hacer que rebotara y fue tomado por Chan en el aire y entonces me percaté de su presencia.

—¿Desde cuando estás aquí? — no pude evitar preguntar.

—Llevo bastantito tiempo— respondió —Me gustan mucho tus expresiones y muecas. Te ves bastante lindo.

—Lindo mi trasero— solté sin pensarlo.

—Necesito verlo para comprobarlo— dijo Chan.

—¿Y qué estás esperando?

—El momento ideal para hacerlo.

Estaba a punto de responder otra tontería cuando recordé lo que había aprendido y decidí ponerlo en práctica.

—Channie, ¿podrías sentarte a mi lado?

El antes mencionado frunció el ceño y se quedó mirándome durante unos segundos, después procedió a tomar asiento a mi lado derecho.

—¿Así...? — su pregunta se vio interrumpida y es posible que sea a causa de que se quedó pasmado cuando decidí acurrucarme contra él. No puedo negar que su aroma me vuelve loco y me hace sentir como en casa por lo que no dudé en disfrutar de la cercanía para envolverme por completo de su aroma.

Chan decidió poner su brazo sobre mis hombros para que estuviéramos un poco más pegados uno al otro y sentí la calidez de su cuerpo que me pareció maravillosa. Nunca antes había deseado estar involucrado en esta clase de tonterías, pero ahora que las estoy viviendo, no puedo negar que me está gustando mucho ser mimado.

—Me gusta tu aroma, Channie— admití tras recargar mi cabecita sobre su hombro.

—Tu aroma también es malditamente deliciosa— dijo después de darme un besito en la cabeza.

Tomé su mano entre la mía y entrelacé nuestros dedos.

Me gusta sentir su cercanía y calidez, pero me estoy percatando de que no me siento cómodo mientras "intento" ser como un omega común.

—Bebé, no deberías hacer algo que no te hace sentir tú mismo— dijo con tono suave después de darme un ligero apretón en la mano. —Me gustas tal y como eres, así que, prométeme que no vas a fingir ser alguien más.

—Mierda, ¿por qué no finges que no tienes idea de lo que estoy intentando hacer? — me quejé. Me alejé de él y tomé de nuevo mi lápiz para continuar con el problema de matemáticas pues necesito despejar mi mente, sin embargo, Chan me tomó del mentón sin ejercer demasiada fuerza y atrajo mi rostro hacía él para besarme con delicadeza.

—No puedo hacerlo— admitió sin despegar su mirada de la mía. —Necesito tener a mi lado al verdadero Minho porque es él que me hace sentir bien, feliz y cómodo.

—El verdadero Minho es bastante hijo de perra— dije y abulté los labios a modo de puchero sin pensarlo dos veces. —Me gustaría ser lindo contigo al menos un día.

—Lo podrás lograr, pero estoy seguro que sucederá cuando menos lo esperes, así que, por ahora no te fuerces, bebé.

—Está bien— murmuré.

El celular de Chan comenzó a vibrar por lo que tuvo que ir a responder la llamada y aproveché para ir al sanitario.

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Estaba caminando de regreso a la banca cuando me detuve en seco al percatarme de que Chan se encuentra conversando con una linda chica que está empeñada en hacerle caer sin importar lo que deba hacer.

"No dejaré que te metas con lo mío, chica", pensé mientras retomaba mis pasos hacía la banca con seguridad.

—Cariño, ¿quién es esta chica? — le pregunté tras tomar asiento sobre su regazo.

—Ella...

—¿Eres su omega? — preguntó la chica con evidente curiosidad.

—Es correcto. Channie bebé es mi alfa, así que, te pediré de la manera más amable posible que le dejes de coquetear deliberadamente y procedas a largarte ahora mismo.

La chica soltó una risita para después marcharse.

—Mira esta— murmuré.

—Te ves más sensual de lo normal cuando estás celoso y posesivo— se rio Chan.

—¿Por qué mierda tienes que ser tan guapo? ¡Atraes a todas y todos los omegas! — me quejé.

—¿Realmente no te has percatado de que hay muchos alfas que te miran con deseo? Tú también eres bastante guapo.

—En ese caso, ¿por qué no les dejas claro que este guapo e inteligente omega ya tiene un alfa en su vida? — pregunté con tono pícaro.

—No es una mala idea— respondió después de darme un beso en la mejilla.

Ladeé un poco mi cabeza hacia la izquierda para dejar al descubierto una gran parte de la zona de mi cuello y le pregunté con tono sensual que lo hizo tragar en seco—: Alfa, ¿podría marcarme como suyo?

Chan ejerció un poco más de fuerza en su agarre en mi cintura y sonreí victorioso.

—No me tientes, bebé— dijo entre dientes.

—Alfa... — fui interrumpido a causa de la sorpresa pues el peliazul ha decidido lamer la zona que he dejado al descubierto de mi cuello. —Ngh... — solté un bajo gemido que hizo sonreír a Chan.

—Bebé, te haré mío cuando estés completamente seguro de que eso es lo que realmente deseas— aseguró con tono serio.