Capítulo 55

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¿Cómo lo reconoció Qi Feiyun?

Yan Shuang no entendía.

¿Podría ser que Qi Feiyun tuviera un tercer dedo de oro relacionado con la identificación? 

Esto era demasiado, ¡¿de acuerdo?!

"Dr. Qi, ¿ustedes dos se conocen?" Preguntó Cui Zheng.

"En."

Su toalla apareció de nuevo en sus ojos bajados. Yan Shuang la aceptó con rigidez, y luego levantó la cabeza para dar a Qi Feiyun una brillante sonrisa. "Qi-laoshi. Qué coincidencia."

Cui Zheng fue lo suficientemente perspicaz como para captar la diferencia en la expresión de Yan Shuang. Sonrió sin decir nada, esperando que comenzara el espectáculo.

Qi Feiyun asintió a Yan Shuang. Viendo que la cara de Yan Shuang seguía igual, dijo: "Ve a bañarte."

Su hermosa voz era elegante y seductora. Incluso las palabras más sencillas sonaban coquetas.

Escuchando desde un lado, Cui Zheng levantó una ceja.

Yan Shuang no se atrevió a lanzar una mirada a Cui Zheng, temiendo que este OP Qi Feiyun se diera cuenta de algo. Sólo podía rezar para que Qi Feiyun se mantuviera en su configuración de carácter frío y distante y se marchara rápidamente, y que Cui Zheng fuera lo suficientemente inteligente como para mantener la boca cerrada.

De lo contrario, sólo podía admitir la derrota.

¿Y qué si estaba expuesto? De todos modos, su carácter era 'resistente'.

Podría estar expuesto, pero no hasta el final.

Entró sombríamente en el baño de la habitación de Cui Zheng. Se quedó helado cuando se vio en el espejo.

Vaya, Qin Yubai. Iba a abofetearle la próxima vez que se vieran.

¡¿Por qué me has mordido tanto la garganta?!

Yan Shuang: No puedo más.

Según la novela original, Qi Feiyun todavía era virgen, ¿no? 

Yan Shuang se engañó a sí mismo mientras se lavaba: ¿Tal vez pensará que esto es sólo una reacción alérgica?

Cuando Yan Shuang salió, Qi Feiyun ya se había marchado. Cui Zheng estaba sentado en el salón, jugando con una pequeña caja.

El corazón de Yan Shuang dio un vuelco cuando vio esa caja. Sus ojos se estrecharon. "Oye, no es bueno hurgar en las bolsas de los demás de esta manera."

"Yo no—"

Cui Zheng lo miró primero de arriba abajo y alabó: "Yo. Pareces un hermoso espíritu del agua". Luego le explicó: "¿Por qué hay tantos de estos en tu bolsa? Se cayeron cuando tu bolsa se desprendió de la maleta, así que las recogí para ti. No te enfades con la persona equivocada."

Yan Shuang miró a la puerta principal.

La maleta y su bolsa de lona estaban allí en silencio, destacando mucho en este apartamento de alta gama.

Los ojos de Yan Shuang se oscurecieron por un segundo.

Bien, esta vez sí que ha metido la pata.

Después de todo, ¿quién iba a pensar que un transeúnte como Cui Zheng vivía encima de dos gongs escoria?

Yan Shuang sólo quería saber una cosa ahora.

"¿Estaba Qi Feiyun allí cuando la cosa se cayó?" Yan Shuang preguntó con calma.

No Puedo Ser Este ProtagonistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora