Capítulo 139

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La cena fue muy elaborada. Demasiado para dos personas. La mesa estaba cubierta de platos.

Sheng Guangming empezó a sudar. Su camiseta era algo translúcida, lo que revelaba a veces el contorno de los músculos que llevaba debajo. Se tiró de la camiseta. "Hace un poco de calor aquí."

Yan Shuang mordió la punta de sus palillos y descuidadamente dijo: "Quítatela entonces."

Sheng Guangming bajó lentamente la mano. "Me daré una ducha después de cenar."

Yan Shuang bajó la mirada con una sonrisa. "Claro."

La aparición de Qi Feiyun obviamente bajó el humor exuberante de Sheng Guangming.

A pesar de saber esto, Yan Shuang no hizo ningún movimiento para consolarlo.

La línea de relación de una persona normal aumentaba a cuentagotas. No estaba de humor para jugar a las casitas. Quería volverlo loco de celos. Quería hacerle sufrir hasta el punto de obsesionarse con Yan Shuang.

En el baño, Sheng Guangming se echó agua en la cara y se maldijo por ser un enfermo. ¿Cómo podía pensar que Yan Shuang se interesaría tanto por sus pectorales como el presidente de la federación de boxeo?

Era estudiante de literatura en una famosa universidad. Le gustaba la música clásica y siempre tuvo una elegancia natural. Todos los hombres que le rodeaban eran ricos y de clase alta, la élite social...

Ahora que lo pensaba, parecía ser el peor...

El agua caliente se derramó sobre él mientras sus manos caían a ambos lados. Sheng Guangming respiró en silencio durante un rato.

No se comparaba con los demás porque no había nada que quisiera perseguir.

Si te comparabas con los demás, a veces salías perdiendo.

El amor era un campo de batalla que la fuerza bruta no podía ganar.

La apariencia, el pedigrí familiar, la carrera, la personalidad... todos eran puntos que podían compararse.

En términos de apariencia, no era rival para Ji Yao.

En cuanto a pedigrí familiar, bueno, era huérfano.

En términos de carrera... realmente no tenía nada.

¿Personalidad? Debería ser aburrido hablar con un conformista como él, ¿verdad?

"Toc toc"

La llamada a la puerta del baño hizo que Sheng Guangming volviera en sí.

"¿Sheng-ge?" La voz desconcertada de Yan Shuang llegó desde el otro lado de la puerta: "¿Estás bien?"

"...Estoy bien."

"Estás tardando un poco hoy", la voz de Yan Shuang estaba teñida de diversión, "¿estás nervioso? No te preocupes, sólo estaba bromeando contigo en el supermercado..."

La puerta del baño se abrió de golpe. Una expresión de asombro apareció en el rostro de Yan Shuang.

El pelo que era ligeramente natural colgaba mojado a ambos lados. Le caían gotas de agua por la cara, el cuello e incluso una gran franja del pecho. Sheng Guangming había corrido hacia él con sólo una toalla alrededor de la cintura, su expresión rígida de dolor. "... ¿Estabas bromeando?"

Yan Shuang sólo se quedó atónito un momento antes de volver a sonreír como de costumbre. "Me apunto si quieres."

Aun así, Sheng Guangming no se sintió aliviado.

La actitud de Yan Shuang era casual al punto de sentirse poco importante. Se sentía como un marcador de posición para cualquier otro hombre que atrapara los ojos de Yan Shuang.

No Puedo Ser Este ProtagonistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora