Capítulo 106

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"¿Cómo has estado estos días? ¿Algo te hace infeliz?" Qin Yubai rodeó audazmente con un brazo la cintura de Yan Shuang. Su tono era extremadamente suave.

Yan Shuang: "He estado bastante bien."

"Escuché que el Dr. Qi tuvo un accidente..."

Yan Shuang inmediatamente miró, sus ojos llenos de aguda sospecha. "Me estás espiando."

"¿Cómo puede ser eso?" Qin Yubai rió con franqueza. "Sólo me he enterado por las noticias."

Estaba diciendo la verdad.

Su relación actual con Yan Shuang estaba en hielo delgado. Se acababa de descongelar un poco, así que ¿por qué iba a hacer cosas innecesarias para crear tensión entre ellos?

Yan Shuang apartó la mirada. Sabía que Qin Yubai no se atrevería a hacerlo también. "Fue apuñalado."

Qin Yubai le dio unas ligeras palmaditas en el costado de la cintura, con tono compasivo. "Debías de estar asustado, ¿verdad?"

"En absoluto." Yan Shuang dijo fríamente, "¿Qué tiene que ver conmigo? Ni que me hubieran apuñalado."

Qin Yubai hizo una pausa y volvió a intentarlo: "Entonces, ¿quieres vivir en otro sitio?"

Yan Shuang le dirigió otra mirada.

Ahora, le miraba con recelosa suspicacia en todo momento.

Qin Yubai se sintió muy amargado, pero sólo pudo decir en un tono aún más suave: "He hecho limpiar la casa que te compré antes. ¿Quieres ir a verla?"

Tener una casa... no está mal, ah. Me iré a vivir allí cuando termine de machacar sus líneas argumentales y necesite un lugar donde 'recuperarme'.

"Tal vez más tarde."

Yan Shuang parecía desinteresado, así que Qin Yubai tuvo que dejar este tema por ahora.

Los dos entraron juntos en el ascensor.

"El tiempo es cada vez más frío. ¿Por qué no eliges algo de ropa de invierno después de cenar?"

"Como quieras."

Qin Yubai asintió, con el corazón en paz.

Ya estaba muy satisfecho de que Yan Shuang todavía estuviera dispuesto a comer y comunicarse con él en este momento.

Cualquier cosa era mejor que el hecho de que ese día se marchara decididamente como si no quisiera volver a verle.

Sus métodos de antes eran demasiado agresivos. Estaba demasiado centrado en obtener a Yan Shuang. Ahora, sólo quería tomarse su tiempo. Seguramente un día, el hielo en el corazón de Yan Shuang se derretiría en respuesta a sus esfuerzos.

Como de costumbre, el restaurante estaba lleno. Sólo cuando el dueño del restaurante vino a saludarlos en el compartimento, Yan Shuang se enteró de que este centro comercial pertenecía a Qin Yubai.

Yan Shuang: A menudo le chocaba el contraste entre la riqueza de Qin Yubai y su tacañería hacia él.

Tras intercambiar unas cuantas cortesías con el dueño del restaurante, Qin Yubai rechazó con una amable sonrisa la petición de la otra parte de servirles personalmente.

Sólo cuando el dueño se marchó, Qin Yubai preguntó a Yan Shuang, que hojeaba el menú sin expresión: "¿Qué te pasa? ¿No estás contento?"

Yan Shuang ni siquiera levantó la cabeza. "¿Por qué debería ser feliz?"

Su actitud hizo dudar a Qin Yubai. Habituales brasas de disgusto se encendieron en su corazón, pero las reprimió a la fuerza.

Tras hacerse con el control de toda la familia Qin, realmente se había vuelto demasiado egoísta y temperamental. Era hora de cambiar eso.

No Puedo Ser Este ProtagonistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora