Capítulo 89

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El camarero estacionado en la entrada de la mansión de la familia Xiao vino a abrir la puerta. Qin Yubai salió del coche antes de darse la vuelta y ofrecer su mano a Yan Shuang.

La mano de Yan Shuang era muy suave. Tenía algunos callos en la palma, que caían cálidamente sobre la mano de Qin Yubai, haciéndole sentir una exótica clase de firmeza.

Yan Shuang se agachó para salir del coche. Un pétalo de rosa blanca como la nieve cayó sobre su pelo. Cuando levantó la cabeza, el pétalo se deslizó por sus negros mechones. Sonrió ligeramente a Qin Yubai, con sutileza y contención.

Yan Shuang vestía hoy un traje blanco puro, uno que Qin Yubai le había hecho a medida hacía tiempo. Le encantaba ver a Yan Shuang de blanco, creía que este color era el más adecuado para el limpio e impecable Yan Shuang.

Por supuesto, esto fue antes de que realmente 'entendiera' a Yan Shuang.

Sin embargo, Yan Shuang todavía llevaba el traje muy bien.

Realmente le quedaba bien.

La tenue luz proyectada sobre su rostro hacía que su silueta fuera aún más vívida y hermosa. Yan Shuang le sonrió un poco más: "Hermano Mayor."

Qin Yubai vaciló. Un pensamiento pasó por su mente — Yan Shuang se parecía a su pequeño novio.

Qin Yubai tosió ligeramente y apretó aún más la mano que tenía agarrada. Su tono se suavizó. "No puedo guiarte todo el tiempo después de que entremos. Tienes que seguirme de cerca. No hables con la gente casualmente, ¿vale?"

"Entendido." Yan Shuang asintió obedientemente.

Qin Yubai estaba mentalmente fatigado después de las personalidades mercuriales de Yan Shuang. Abrir la puerta del dormitorio cada noche se sentía como entrar en las fauces de un tigre. Yan Shuang rara vez era tan obediente, y de hecho no estaba acostumbrado a ello.

Armar jaleo todo el día en casa, colgarse de él y portarse mal al azar, hacer todo tipo de peticiones excesivas en la cama, pero fuera volvía a ser obediente. Incluso parecía un poco nervioso y tímido...

Menudo tigre de papel.

Comentó Qin Yubai levemente en su corazón. Se esforzaba por no hacerlo, pero le parecía lindo.

No acudió mucha gente a la cena. Se trataba de una pequeña reunión a la que sólo se invitaba a las personas más relevantes. Qin Yubai dijo que no podía guiar a Yan Shuang después de entrar. Le soltó, pero dejó que Yan Shuang le cogiera del brazo.

Yan Shuang se convirtió obedientemente en un accesorio del brazo del hombre.

Qin Yubai era un recién llegado al círculo, pero no era un completo desconocido. La leyenda de su regreso a la cima era un tema candente, por lo que, naturalmente, se convirtió en uno de los favoritos de la cena banquete. Muchos invitados tomaron la iniciativa de acercarse a saludarle.

Por supuesto, también preguntaron por la persona que colgaba de su brazo.

"¿Este es...?"

"Mi hermano pequeño."

"Ah, tu hermano..."

La otra persona exclamó antes de elogiar despreocupadamente a Yan Shuang: "Esa exposición de pintura anterior fue realmente..."

Qin Yubai interrumpió sus palabras oportunamente y cambió el tema a los negocios. Observó a Yan Shuang por el rabillo del ojo y se dio cuenta de que estaba mirando los postres de la encimera de la cocina, completamente ajeno a la conversación a su alrededor. Qin Yubai no pudo evitar sonreír un poco. Poniendo fin rápidamente a las plesantías, le preguntó a Yan Shuang: "¿Tienes hambre?"

No Puedo Ser Este ProtagonistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora