Mi lobita. - Seth Clearwater y tú

Cabaña

POV Alice
Instalamos las cosas y limpie un poco mientras que Seth se volvía a tumbar en la cama.
La cabaña no era muy lujosa pero para nosotros dos era el tamaño ideal, podiamos estar pendientes el uno del otro en todo momento.
Hice unos huevos fritos con patatas para cenar y luego puse la pequeña tele un rato para que nos entretuvieramos un poco.
Nos fuimos a la cama a las doce con el sonido de la lluvia golpeando en el tejado. La casa estaba totalmente oscura así que tuve que coger la linterna del movil para poder llegar a la cama sin matarme.
Me tumbé al lado de Seth acercándome lo más posible y puse mi cabeza en su pecho. Él, me abrazó y me besó la cabeza y así se quedó dormido.
A las dos de la mañana me desperté al escuchar un tremendo golpe en la puerta. Al parecer Seth no se había dado cuenta porque seguía dormido como un lirón.
Bajé con miedo no sea que me matara bajando las escaleras y fui hacia la puerta.
Cogí un cuchillo de la mesa y lo empuñe antes de abrir la puerta.
Al abrir, no había nadie así que fui a cerrar la puerta pero una mano me lo impidió. Yo, sin miedo al éxito, le cerré la puerta en la mano y escuche un grito de dolor un tanto familiar.
Volví a abrir la puerta y vi a Jacob todo mojado.
- PERO TU ERES GILIPOLLAS????!!!
- Te quieres callar, coño.
Jacob se metió en la cabaña y vio a Seth bajar las escaleras.
- Se puede saber que haces aquí?- le dije a Jake.
- Me mandó tu padre no sea que estuvieras haciendo el chaka chaka.
- Joder Jake. - dijo Seth.- son las 2 de la mañana y yo quiero dormir.
- No es eso. Han entrado está noche a inspeccionar. Venía para ver si os encontrabais bien.
En ese momento la puerta se abrió de golpe dejando ver una silueta.
- Pues los has conducido tú solito.
Agarré el cuchillo ese y lo lancé con mi telekinensis.
El otro individuo lo retiró con su magia,( supongo que sería eso y no un imán en los dedos) y entró en la casa rápidamente.
Llegó a donde estaba Jacob y este lo empujó fuera de la casa.
Allí, se convirtió en lobo. Seth salió con él y también se convirtió.
Yo estaba dentro de la casa. Al quitar el cuchillo que le lancé, volvió hacia mí y me alcanzó el estómago.
Seth estaba débil, pues seguía con algunas costillas fracturadas y magulladuras por todo el cuerpo pero luchaba contra el chupasangres.
Salí de la casa y empecé a utilizar mi telekinensis, mientras me agarraba con la mano derecho el cuchillo que seguía clavado en mi estómago, porque en un libro había leído que era peor si se sacaba que era mejor inmovilizar el objeto.
El vampiro salió despedido tras ser lanzado con fuerza por Jacob hacia el tronco de un árbol. Allí, le rompí el cuello y lo prendí para que no diera problemas.
Los chicos volvieron a sus formas normales y Seth se dió cuenta del cuchillo.
Jacob llamó rápido a Carlisle y me llevaron a la casa de los Cullen.
Me tendieron en una camilla que había en el sótano y me pusieron una inyección haciendo que lentamente dejará de ver.
Al despertar, me encontraba en una habitación con las paredes verdes y la cama blanca.
Un gran ventanal, dejaba entrar la luz naranja de un atardecer.
Me levanté pero un leve pinchazo hizo que me tocara el estómago.
Me levanté una blusa negra que supongo que era de Renesme y vi que tenía una venda.
En la esquina izquierda de la habitación había una estantería con varios libros y unas luces led adornaban todo el techo de la habitación.
Encima de la cama unas tablas blancas estaban adornadas con musgo y con terrarios de todo tipo de bichos.
Había hojas adornando la pared y varias fotos de lobos, así que supuse que la habitación pertenecía a Renesme.
Fui al baño de la habitación a darme una ducha y al salir, me encontré con Alice.
- Hola- dijo con su característico positivismo. Fue a abrazarme. - cómo te encuentras. Te dolerá un poco pero cicatrizamos rápido. Aunque tú.. no lo sé. Pero bueno. Habrá que probar. Tu lobo te espera abajo.- se fue dando saltitos y cerró la puerta.
Hice la cama y bajé.
Al llegar al salón Jacob vino corriendo y me abrazó.
Seth, empezó a pegar a Jacob.
- Quita, quita , quita. - me separó de él y me abrazó.- mi amoooorr.- dijo abrazándome con voz aguda.
Me soltó minutos después pero me siguió agarrando de la cintura.
Nos dieron de cenar y estuvimos hablando.
Ya nos habían llevado nuestras cosas de nuevo a nuestra casa. Al parecer había estado 3 días inconsciente por el efecto de la anestesia que me puso Carlisle.
Seth me llevó en su moto hasta casa donde ya estaba mi padre esperándome a la puerta.
Me reviso entera y luego me abrazó.
Entramos en casa seguidos de la manada y decidieron que era mejor que ninguno de los dos saliéramos de ella por el tiempo que hiciera falta.
Esa noche, Seth y yo preparamos unas mantas y nos sentamos acurrucados uno junto al otro para ver una película.
Al final decidimos la de Creed que es una película de boxeo buenísima y al acabar pues no sé qué pasó porque nos quedamos allí dormidos.
POV Seth
Me desperté con los rayos del sol entrando por la ventana. Al estar a principios de junio la hora se notaba y cada vez amanecia antes.
Sentí la respiración de Alice y agaché la cabeza para ver cómo estaba acurrucada con la cabeza en mis piernas mientras agarraba sus rodillas con sus manos.
Saqué como pude el teléfono y miré la hora, 6:38 am.
Me metí en notificaciones y vi que había llegado una del instituto.
Ostias.
Los exámenes finales eran dentro de dos semanas y me quedaban por aprobar todas.
Joder. Pues yo que quería graduarme con Jared, Quil y demás familia.
Pufff.
A las 8 desperté a Alice y fui a hacer el desayuno mientras se desperezaba en el sofá.
Llegó a la cocina y me abrazó por detrás.
- Buenos días.- dijo con voz adormilada depositando un beso sobre mis labios.
Se sentó a la mesa y apoyó la cabeza en sus manos.
- Has dormido bien, cariño?
- Si, sólo que me soñé a las 4 o asi y bueno....- suspiró y levantó la cabeza con los ojos cerrados sonriéndome.- te has movido mucho. Me despertabas.
- Lo siento mi vida.- le dije posando una taza de café delante de ella mientras le daba un beso en la cabeza.
Me senté enfrente de ella y empezamos a desayunar en silencio.
- Tengo algo que decirte.- dijimos los dos al unísono.
Nos reímos nerviosos pero los dos sabríamos que no era grave porque haber somos novios y tal, no?
- Empieza tú.- dijo
- No no es nada, empieza tú.
- No enserio
- No, da igual.
- Bueno vale. Total, es una bobada.
Se quedó en silencio durante un momento
- Me bajó la semana pasada.
Deje de masticar y la mire con cara de no entender. Que coño significa eso.
- Que me bajó la semana pasada. Haber lo que quiero decir es que si puedo tener hijos es decir las vampiras no tienen la regla por rollos esos de la sangre, pues ni modo de que se vayan a comer sangre que sale pues de ahí, entiendes, y...... Bueno que en un futuro, pues si.... Si puedo tener... hijos. Era solo eso.
Bajó la cabeza avergonzada y siguió removiendo el café.
- Ah, ehmm .....vale. Bueno saberlo, supongo. Si.- haber me quedé cortado, no sabía que decir.- pero ey, no pasa nada está bien si, me hace ilusión, no sé qué decirte, me ha pillado desprevenido.
Levantó la cabeza y le sonreí de la manera más sincera posible.
Nos volvimos a quedar en silencio y me arme de valor para hablar.
- Tengo los exámenes finales el 26 de junio y tengo suspensas todas. Y el caso es que me quiero graduar con los chicos y..... no se cómo haceeeer.
Me miró con una ceja levantada.
- Los chicos no son unos años mayores que tú.
- Si pero son tan malos que no saben ni estudiar y ya tienen 21 y siguen a ver si este año se gradúan y se lo han tomado en serio porque las madres están con la chancla en la mano y los han puesto a estudiar. Y llevan mas aprobadas que yo. - dije ya con desesperación.
- Amor, yo te ayudo. No pasa nada. Prepara las cosas. Nos ponemos a estudiar ahora. Cuando tienes el primer examen?
- El 23 .
- De.....
- Junio.
- Hombre ya eso ya lo sé. De que asignatura, subnormal.
- Ahhh. Biología y Lengua
- Vale. Trae todos tus libros, folios, tu estuche, bolígrafos, calculadora... Lo que encuentres.
- Vale, te quiero mucho, graciaaaaass.
Salí corriendo hacia mí habitación y bajé mi mochila con todo lo necesario.
Me puse en la mesa del salón y saqué todo lo necesario.
Al poco tiempo, Alice llegó y se sentó
- A ver. Con que quieres empezar?
- Biología? No lo sé, mira sino ya me graduo para el año que viene..
- Seth, que no pasa nada. Biología, vale. Las leyes de Mendel? Eso es fácil.
Empezó a explicarme las cosas y mandarme ejercicios. Al final de la mañana me hizo una prueba, como un examen y me saqué un 7,75.
- Ni tan mal. Tienes que estudiarte mejor la teoría.
- Vale. - dije con vergüenza.
- Vamos a hacer un poco de matemáticas. Voy a hacer un ejemplo de examen para ver el nivel.
Me dio un papel y unas hojas en sucio para hacer cuentas.
Cuando empecé a leer el examen. Madreee. Que era eso.
Los primeros 3 ejercicios eran fáciles unas ecuaciones y unos logaritmos pero... Todo junto... Una ecuación logarítmica, como voy a calcular el logaritmo de x si no me dan lo que vale x.
- Pues sabes que Leah y Will se han ido unos días a California?
- Ahh. No. Pero concentrate.
Concentrarme pero si no sabía que tenía que hacer ahora.
- Jared y Quil también tenían que mejorar sus mates.
- Vale amor. Sigue.
Hice un problema y al pasar al siguiente.
- Pues Jacob...
- Seth, cállate y haz el examen.
A los 10 minutos me dijo.
- Voy a hacer la comida. Te quedan veinte minutos.
Todavía, y que iba a hacer yo en veinte minutos.
Al poco tiempo, llegó con unos yatekomo y se sentó delante mío. Cogió su teléfono y se puso a escribir.
- Seth, has acabado ya?
- Bueno....
Le di el examen con vergüenza y empezó a corregirlo. Hacía gestos con la cabeza y después de diez minutos me dió el examen corregido.
- Ehh, tienes muchos errores de base. Es decir de no saber cómo hacerlos así que por esos no te preocupes pero..... Seth, como puede tener María 0,345 hijos. Y lo dejas ahí tan pancho. Sinceramente en ese problema te he dado 0,25 por pena.
En el examen me saqué un 3,25 ni tan mal.
- Voy a explicarte las ecuaciones logarítmicas porque te has liado un montón luego te explico el coseno y la tangente y por hoy acabamos.
Se me iluminó la cara y presté atención con fascinación.
Como una chica de 16 podía saber más que un chico de 18.
Estuvimos hasta las seis y cuarto de la tarde estudiando. Alice me ponía ejercicios y yo los hacía. Los corregía y para subirme la moral y motivarme me daba un beso cada vez que tenía uno bien.
Al acabar, nos levantamos, yo me estiré y me tiré en el sofá.
Alice se me tiró encima y yo la abracé.
Se levantó para ir a por unas patatas fritas a la cocina. Vino y puso una película y nos pusimos a verla hasta las ocho. Luego, salí a recoger los sillones del porche porque decían que iba a llover y allí me encontré una carta.