Lo mato

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- La carta estaba escrita en sangre- dijo Jasper.
- Como estás tan seguro. Así solo la pones nerviosa.- dijo Jacob con rabia.
- Ella ya lo sabe. Nosotros podríamos oler la sangre en cualquier forma y podemos captarla más si es de un lobo. Huele muy fuerte.- dijo Emmet encarando a Jacob.
Eran las doce y los de la manada junto con los Cullen estaban en mi salón.
Rosalie me tapó con una manta y me hizo un té para que me tranquilizara.
- Está claro que tienen a Seth como rehén.- dijo Edward con su tan usual calma, como si no nos hubiéramos enterado.
- También sabemos que si no acepto, probablemente lo maten.- dije yo con la taza en la mano.
- Lo que no entiendo es porque se han llevado al perro?- preguntó mi padre.
- Porque probablemente para los Cullen sea más importante el perro que Seth.- dijo Embry.
- Hombre..- dijo Emmet- pues si para que mentir.
Miré mal a Emmet y luego habló mi padre
- Hay que ir a por Seth, tenemos que hacer algo
- Tengo que ir y punto.- dije mirando a mi padre.
- Tiene que haber otra manera. - dijo mi madre asustada
- Haber quien tenga ideas para salvar a Seth que levante la mano- dijo Embry
Todos los de la manada y Emmet levantamos la mano rápidamente y luego habló Jasper
- Y que no supongan matar a nadie.
Todos bajamos la mano.
- Me lo imaginaba.- volvió a decir el vampiro.
- Al final de la carta dice que tengo que ir a Volterra, eso supone casi medio dia de vuelo, reservar hotel en menos de 48 horas y en el supuesto de que ahora haya vuelos, llegar y encontrar el lugar donde tienen a Seth.
- Eso no sería un problema, Alice, lo que pasa es que no vas a ir tú sola. Nosotros iremos contigo y parte de la manada también.
- Somos demasiados.- dijo Jake. - Y todos queremos ir.
- Alguien debe quedarse.- dijo Carlisle.- Nosotros debemos ir con ella y puede ir Jacob y Sam, pero nadie más.
- Yo también voy- dijo Leah- es mi hermano.
- Añadirías mucho sentimentalismo a la misión, Leah. Será mejor que te quedes.- explicó de forma serena Edward.
- En ese caso, sería peor Alice.
- A ella tenemos que llevarla si o si. Es nuestra única opción.- dijo Jasper.
- Jasper está en lo cierto, además Seth es su impronta como la retengamos aquí probablemente le dé un síncope.- dijo Jacob.
- Vamos a empezar a organizar .- dije levantándome de la silla harta de no hacer nada.- Rosalie, coge vuelo lo antes posible, Emmet, reserva hotel, los que se vengan con nosotros, iros a casa a hacer las maletas, nos vamos. Allí ya decidiremos que hacer.
El día 27, ya estábamos en mitad del aeropuerto de Seattle esperando nuestro vuelo.
- Estáis ridículos con los sombreros - dije mirando a los Cullen.
- Es que quien me iba a decir a mí que un 27 de diciembre iba a hacer sol en Seattle- dijo Emmet.
- Tú tampoco estás muy bien que digamos. - me dijo Alice acercándose - tienes las mismas ojeras que un mapache.
- No he dormido bien, la verdad.
- Alice, Seth está bien.- dijo Alice intentando calmarme.
- Lo has visto?- dije refiriéndome a su visiones.
Ella negó lentamente
- Pero tampoco he visto lo contrario. Eso es buena señal.
- Tú crees?
- Supongo.
Cuando nos montamos en el avión, nos colocamos en nuestros asientos y yo saqué mi portátil y unos audífonos.
Busqué en Volterra sitios que parecían antiguos para poder encontrar a Seth.
- Ya sé dónde está.- dije mirando a Jasper.
Este miró el portátil con curiosidad y le empecé a explicar.
- Pensé varias veces que al cambiar de teléfono, el geolocalizador de Olaf necesitaría conectarse y no podría mostrar la ubicación pero se ha conectado bien y muestra la ubicación exacta. Tengo la cámara para ver dónde están.
Pinché en el teclado y pudimos ver una habitación negra con las cortinas en rojo cereza y poca iluminación.
Olaf no se movía y no nos dejaba ver más la sala.
- Pásame la ubicación.
Compartí la ubicación con Jasper y dijo
- Solo queda a un cuarto de hora caminando desde el hotel.
- Iremos mañana a qué hora?
- Sería mejor pensarlo con más tiempo.
- Jasper, a qué hora?
- Alice, tranquilízate. Lo hablamos allí con los demás.
- No podemos estar parados cuando vete tu a saber que le están haciendo esos descerebrados a Seth.
- Hay que hacer un plan. Un día más que un día menos...
- Puede hacer la diferencia.
- Será un viaje largo. Duérmete - dijo dejándome por imposible.
- No puedo dormirme..
Todo lo que había a mí alrededor se volvió negro lentamente.
Más tarde me desperté en la habitación del hotel.
- Buenas tardes, Bella durmiente. - Emmet me sonrió y yo me levanté rápidamente. Busqué a Jasper para pegarle tremendo golpe que lo iba a dejar durmiendo por una semana pero no estaba allí.
- No está, me dejaron a tu cargo
- Que hora y día es.
- Las siete de la tarde, 28 de diciembre.- dijo mirando el reloj.
Había pasado prácticamente un día entero inconsciente y Seth seguía esperándome.
- Donde están Emmet- dije yo muy enfadada. - Como por intentar hacer una plan, lo cual me parece una gilipollez, los chupasangres toquen a Seth, mato a Aro
- Alice la violencia no siempre es la respuesta.
- Lo mato.- volví a afirmar sin separar la mirada de la suya.- Una ostia a tiempo siempre es una victoria. Ahora donde están.
- Se han ido a inspeccionar.
- Llévame con ellos.
- No puedo.
- Haré lo que sea- le supliqué.
- En serio.
- Si, te puedo comprar lo que tú quieras.
- De verdad
- Que sí, pesado- a Emmet se le ilumino la cara y yo pensando que me iba a dejar en banca rota, y dijo lo que quería.
- Me comprarías un peluche de un pato.
- Un... pato?
- Si, son adorables.
Miré al hombre con cara extraña y luego asentí rápidamente sin todavía creermelo.
- Claro, si. Te dejo elegirlo. - el se levantó contento de la silla y cogió las llaves de la habitación y de un coche.
- Vamos.- cogí mi cazadora y mi teléfono y fuimos al coche.
Cuando íbamos en el trayecto iba mirando por la ventana hasta que Emmet pegó un frenazo que un poco más y salgo por el cristal y se bajó corriendo del coche.
Lo miré todavía dentro y me señaló un pato colgado de una tienda de Souvenirs.
Me quedé preguntándome si era mejor pagarle el psicólogo que el pato pero con el pato iba a ser feliz asi que...mejor para mi.
Bajé a pagarlo y luego nos volvimos a meter en el coche y dejo el pato en el asiento de atrás y le puso el cinturón.
- Tú estado de salud mental, cada vez me preocupa más.
Volvió a pegar un frenazo.
- Para ya de dar frenazos, coño. Que se me rompe el cuello.
- Es que están ahí.
Emmet aparcó como pudo y fuimos con los demás.
- Jasper- el chico me miró y se quedó aún más pálido de lo que ya era- Me caguen tus muertos pisaos. Te voy a meter una ostia que vamos a morir los dos. Tú de la ostia y yo de la onda expansiva. Si es que más tonto y naces de canto... Te voy a meter una ostia en los huevos que te voy a levantar en peso..
Mi padre me separo del rubio pensando que lo mataba e intentó calmarme pero yo seguía diciéndole de todo.
- Que agusto se debió de quedar tú madre cuando te parió...
- Ya, ya Alice, ya.- dijo Jacob cogiéndome de los hombros. - Ya se acabó.
Respiré hondo y miré al moreno asintiendo.
- Pido perdón, por esta agresividad. - dije mirando al chico.- Pero en el momento que menos te los esperes te calzo de ostias.- dije otra vez hacia el rubio. Este miró con un poco de temor a la chica- por lo menos habreis hecho un plan.. porque si no ya es cuando os reviento.

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⏰ Última actualización: Mar 24 ⏰

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