A la mañana siguiente, Seth no estaba en la cama y al levantar un poco la cabeza y ver las cortinas corridas vi el panorama que había afuera.
Seguía nevando mucho, el aire hacia crujir la madera de la casa.
Una presencia perruna apareció saltando en la cama cubierto de nieve y con las patitas mojadas
- Olaf, sal de aquí. Me vas a hacer cambiarme. Ahg, Seth puedes quitar al perro de la cama?
Seth apareció en la habitación casi igual que el perro.
- Ya hay luz. Y encontré leña en la bodega. Debajo de una alfombra. Tus padres la debieron de dejar allí porque sabían cómo se iba a poner el clima.
Seth me llevó ropa a la cama y yo me puse mi pijama gordo de Mickey Mouse, unos calcetines por las rodillas y una zapatillas de andar por casa. Me mangué una sudadera de Seth calentita y con una bufanda al cuello bajé a la cocina para preparar el desayuno.
Seth tenía todo iluminado con las luces de Navidad y había puesto velas en la encimera.
El calor de la casa volvía lentamente y cuando justo me senté a desayunar recibí una llamada.
Seth miró a ver quién era y luego dijo
- Es Jasper.- me tendió el teléfono y antes de que lo cogiera me volvió a hablar- como que te llama mucho, no?
- Celoso Clearwater?
- En absoluto. - dijo cruzándose de brazos.
- Dime Jasper.
- Quieres hacer parar este puto vendaval de mierda?!- me gritó desde el otro lado del teléfono
- Que coño te pasa Jasper. Que quieres que haga que sople para dentro o que. Como cojones voy a parar un vendaval. Paralo tu si eres tan listo. No te jode. - escuché un suspiro de frustración.
- Tu puedes parar el aire o hacerlo más fuerte. Vamos a ver. Quiero que salgas fuera.
- Tu quieres acabar con mi existencia verdad?
- Vas a pensar en que el suelo está nevado pero no hace aire y vas a estar así durante un minuto. Luego abrirás los ojos y notarás un leve picor en ellos pero no los cierres hasta que notes que el aire disminuye, confía en mí.
- Está bien, pero no prometo nada.
Hice lo que el vampiro me mandó a hacer y noté como mis manos literalmente se empezaban a congelar.
Cuando ya pude parpadear me metí en casa y por poco me meto en la chimenea de cabeza.
Seth llegó y me abrazó por los hombros para poder entrar en calor.
- Pues que sepas que ha funcionado.
Miré por la ventana y en efecto, el aire había desaparecido casi por completo y ahora caían finos copos de nieve.
Por la tarde empezamos a preparar la cena de Nochebuena, ya que al final si podían venir los de la manada y como nuestra casa era la grande, nos tocaba ordenar y recoger.
Cuando tuvimos todo listo, Seth y yo nos fuimos a cambiar.
Cuando entré a la habitación Seth de forma rápida, me cogió y me tiró a la cama.
Yo me reí por ese acto inesperado y él me besó. Se separó con una sonrisa y luego empezó a hacerme cosquillas.
- Cual es mi regalo de Navidad? - preguntó para sacarme información.
- No te lo pienso decir- dije con dificultad.
- Pues no voy a parar hasta que me lo digas.
Como vio que no tenía intención de decirle nada, me soltó y empezamos a cambiarnos. Él se puso un pantalón azul marino y una camisa, y yo un vestido de punto, largo y ajustado de color beige con un cinturón negro.
Mientras se abrochaba los botones, lo abracé por la espalda, pasando mis manos por su torso acariciándolo lentamente.
- Estás guapísimo.- le dije asomándome por encima de su hombro mirándome al espejo.
- Y tu más. - se dió la vuelta y me besó- porque sé que en toda la cena estaría pensándolo si no, te haría mía ahora mismo. Pero sé que no puedo, ya lo sé, lo sé, es ilegal, con pena de cárcel y todas esas gilipolleces.
- Que atrevido estás hoy. - dije cogiéndolo de la camisa para besarlo.
Poco después nos separamos y yo empecé a hacerme una coleta alta y me ondule un poco las puntas. Me maquillé un poco y me di mi colonia de vainilla.
Bajé al salón e hice los últimos retoques. Cuando Seth llegó, yo ya estaba sentada en el sofá. Se puso en la chimenea y me llamó
- Alice, Alice.
- Que pasa- me levanté y fui hacia él.
El me cogió de la cintura y me dijo
- Tengo los ojos cerrados, los labios separados y estoy debajo del muérdago. - hizo morritos y yo le di un corto beso, pues justamente sonó el timbre.
- Felices Navidades.- dijo Jared entrando con su impronta, Kim, con mucha energía.
- Donde pongo esto- dijo la chica un poco tímida con una bandeja con un cerdo asado.
- Ven, vamos a la cocina, calentaré un poco el horno para que no se enfríe.
Seth y Jared se saludaron entusiasmados y sonriendo se pusieron a hablar. Kim y yo hicimos lo mismo y tras dejarlo todo listo en la cocina llevé un tarro de galletas con forma de muñeco de nieve al salón.
Más tarde, llegó Jacob con Reneesme, y el se fue con los otros dos mientras que Reneesme se vino con nosotras.
Saqué unos dulces y esperamos a que los demás llegaran.
Cuando ya estábamos todos, nos sentamos y saqué los platos con la comida empezamos a hablar y a comer. La cena estuvo muy animada aunque mi padre estuvo interrogando a Seth todo el rato.
Cuando acabamos de cenar, decidimos hacer un brindis.
- Renesme toma tu copa. - dijo Jared mientras Seth le pasaba copas de champagne.
- No, no puedo, Jared.
- Venga ya, Nessie, no te vas a volver una alcohólica por beber una copita.
- Que no, no puedo.
Embry siguió insistiendo y Jacob intervino.
- No no puede.- Jacob tocó la barriga de Renesme y nosotros captamos la indirecta.
Todos los hombres de la manada se levantaron a abrazarlo y yo mientras fui a abrazar a Renesme.
- Tú eres la que está embarazada y él se lleva el mérito.
- Si no fuera por mí, difícilmente Nessie estaría embarazada.
- En eso tiene razón.- dijo Leah.
Abracé a Jacob y le di la enhorabuena y luego brindamos, los que pudimos. Yo por menor de edad que mi padre no me dejó y Renesme, así que nos tocó brindar con zumo de manzana.
- Como lo vais a llamar?- preguntó mi madre, la cual quería tener ya un bebé entre sus manos.
- Aún no lo sabemos.- dijo Renesme.
- Y como te sentiste cuando te lo contó?- preguntó Seth feliz.
- Es difícil de explicar. Pero os juro que fue el día más emotivo de mi vida.- dijo sonriendo.
- En serio?- volvió a preguntar Seth feliz.
- Si, incluso lloré.- Seth sonrió ampliamente.
- Quieto, ahí. No de la forma que os creéis. Alice tienes un proyector? Lo tengo en video.
- Si si tengo.
- Es necesario?- preguntó Jacob avergonzado.
- No es opción, es obligación poner ese vídeo - dijo Embry con su especial sentido del humor.
Puse el proyector y pusimos el vídeo. En el podíamos ver a Jacob viendo el fútbol y Renesme entrando por la puerta.
- Jacob, esto... tenemos que hablar.
Renesme sacó un test de embarazo y se lo dió.
Jacob empezó a hacer berrinche
- Soy demasiado jovenn- dijo llorando a pleno pulmón- No estoy listo para estooo. Aún hay tantos lugares que no he recorrido y tantos planes que quiero hacer- lloraba con todas sus fuerzas mientras hacía la croqueta por el sofá.- No puede ser cierto! - dijo llorando y gritando.
Renesme giro la cámara dejando ver su cara perpleja.
- En que momento me pareció buena idea casarme con él?- susurró a la cámara.
Volvió a enfocar a Jacob el cual se estaba prácticamente desinflando.
- Todo esto es tu culpa- dijo señalando a Renesme la cual le contestó un "Qué?!" indignada- Quien te manda usar ropa deportiva tan corta - dijo intentando buscar una excusa, mientras se volvía a medio desinflar.
- Jake, por el amor de Dios. Madura de una vez.
Salía un corte y luego aparecía Jacob comiendo.
- Ya se puede hablar contigo.
El asintió un poco y volvió a llorar.
- Tú padre me va a matar.
Ahí se cortó el vídeo y nosotros miramos a Jacob con cara de: medicate.
- El niño va a salir sordo de los vocinazos que has pegado- le dijo Embry.
- No se que pasa por tu mente, que a veces eres el más maduro y aquí pareces un niño de tres años- dijo Paul.
- Mira que todavía no se lo hemos dicho a Edward porque cada vez que le digo, se lo voy a contar se pone igual que en el vídeo osea que..
- Jacob, en serio, medicate.- dijo Jared.
- Y tuve que comprarle dos cajas de pizza familiares, de las cuales no me dió ni un trozo, para poder hablar con el y que no se pudiera poner a hacer el gilipollas.
- Nessie, ese no es lenguaje apropiado para el bebé.
- Por dios Jacob si tú te la pasas diciendo Joder que frío cada 30 segundos.
Nos seguimos riendo de Jacob hasta que acabó la noche y todos, como a las cuatro o así se fueron a sus casas.Yo me metí con Seth en la cama, el cual me decía que le era muy difícil dormir porque mañana abría los regalos, así que me tocó estar acariciándole el pelo hasta que se durmió y luego ya me dormí yo.
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Mi lobita. - Seth Clearwater y tú
Manusia SerigalaHola, mi nombre es Alice Uley. Si, hija de Emily y Sam Uley. Me voy a mudar a la reserva, ya que vivo con mi abuela en California, por motivos de la manada. Mi padre me ha dicho que debo ir con ellos, porque en cualquier momento, me puedo convertir...