Two Worlds Collide [Marvel OC]

EIGHTEEN

Olivia.

Diana abre las puertas del establo, sin decirme aún qué hacemos aquí.

— Antes de entrar aquí... ¿A qué te recuerda mi apellido? —su pregunta me toma desprevenida, y no entiendo a qué viene.

— Uhm... ¿Robin Hood? —le respondo lo primero que me viene a la cabeza, y lo más obvio.

— Exacto. Digamos que soy demasiado parecida a él —termina de abrir las puertas y mis ojos se iluminan con lo que tienen frente a ellos.

Había distintos tipos de blancos, y una estantería repleta de arcos. A un costado, había fechas, muchas flechas.

— Diana, ¿olvidas que me lo habías contado hace un año?

— Okey, entonces... Como te dije, hago arquería hace años, junto a mi prima. Mis padres me compraron este establo en el campo para que pudiera entrenar —la miro, anonadada.

— Lo tenías bien escondido —se encoge de hombros.

— Creo que, ahora que tienes poderes, yo puedo contar esto... Y sé que puedo ser útil si necesitan más refuerzos. Antes, no tenía cómo llegar a ellos, no podía decirles que quería ayudar, pero contigo, no creerán que soy una niña loca en busca de pasar tiempo con los Vengadores.

— ¿Me estás usando?

— ¡Claro que no! Pero, piénsalo, si iba antes de que te conocieran, me tomarían por loca. Así como hizo el doctor Strange contigo y Peter 2 —me explica con calma.

Tiene un punto, pero aún así suena raro.

— ¿Pietro lo sabe? —niega.

— Solo tú, y la verdad no estoy segura de querer contárselo a alguien más. Verás, soy muy buena. Mi técnica se perfecciona cada vez más con el paso de los años, pero quizás no esté calificada para ser parte del equipo.

— Diana, yo hace tan solo un año descubrí mis poderes y creen que estoy calificada. Tú, por lo que me dices, tienes años de experiencia.

— Liv, tus poderes son mágicos, lo que hago es físico y de práctica.

— Tienen a Hawkeye. Bueno, ya no... ¡Es aún mejor! Necesitan a un nuevo arquero —mi amiga toma un arco negro brillante entre sus manos.

— ¿Crees que me dé una oportunidad? —toma una de las flechas, y apunta al blanco más lejano. Estaba por responder, cuando ella dispara.

En el blanco.

Ni siquiera lo pensó.

— Wow. Eso fue impresionante.

— No es nada, solo calentamiento —alzo las cejas, impresionada por su humildad.

— Ahora quiero decirle a Tony.