Comprometidos - omegaverse

3 Diao de visita

Esa noche tuve un muy lindo sueño, soñé el deseo más desesperado de mi corazón. Uno en donde Hia se acercaba a mi y me miraba mientras dormía. Él no hacía nada, solamente me daba una suave caricia, que poco a poco me despertaba dulcemente. Al despertar, se comportaba de forma muy amable, me seguía dando mimos, tenía una mirada cariñosa que no había vuelto a ver desde mi viaje a Inglaterra.

En ese sueño Hia me pedía perdón por confundir las cosas, me decía que en realidad me amaba. Me daba un suave beso en los labios mientras acariciaba mi mano, su suave aroma a madera impregnaba todo, y me adormecía entre sus brazos. Pero entonces...

Desperté.

Maldito Hia, me sigues hasta en mis sueños.

Miré mi teléfono, tengo miles de llamadas perdidas de Hia. No pienso contestar.

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Intento llamar a Kuea, pero no me responde el teléfono. ¿Cuántas llamadas van? Dios que chico más problemático.

Abro el cajón de mi escritorio, tengo una foto de nosotros hace 11 años, me trae lindos recuerdos. Kuea siempre ha sido un omega muy lindo. Me acuerdo cuando poco tiempo después de nacer sus padres descubrieron que su aroma era de omega. Al principio todos estaban impactados, incluso hubo un poco de rechazo en la familia por lo extraño de la situación.

A mi nunca me importó, desde el primer momento en que lo vi en esa cuna supe que quería estar a su lado, ser su protector y único guardián. No se de donde venía ese sentimiento, pues yo tenía menos de 10 años y Kuea era un bebé recién nacido. Pero siempre supe que compartiría mi vida con él, incluso antes de esa ceremonia familiar, incluso antes de que su abuelo nos comprometa, y muchísimo antes de que su madre me preguntara por la confirmación del compromiso.

Kuea... ¿de verdad piensas cancelar el compromiso? Sé perfectamente que no sería capaz de hacerlo. Estoy seguro que, al igual que yo, él sabe que al final del día seré yo quien cuide de él. Tendré que hacer algo para convencerlo.

Abro mi teléfono, y veo de nuevo el video que me envió Yi. El de Kilin tocando la batería y cantando...

Como si Anabelle pudiera engañarme... Parece que Kuea tiene un par de secretos, y eso lo hace un chico divertido. Creí que Kuea era el típico omega florero, pero parece que tengo mucho que descubrir todavía, y no puedo evitar sentirme emocionado.

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Me gusta tocar la batería, aporrear un poco los tambores siempre me ha ayudado a relajarme. El problema, es que no importa cuanto toque, a cada minuto que pasa...

"No tenías hermanos ni amigos para jugar, eso te hace pensar que tú..."

"Dijiste que me propondrías"

"Lo haré"

"Cumpliré la promesa que hice a tu abuelo, eso es todo"

"Si me preguntas si te amo o no, la respuesta es no"

"Podemos vivir separados"

"Quiero casarme con un humano, no con una muñeca"

"Anabelle"

¡MIERDA! Ni tocar la batería me hace sentir mejor... ¿¡Cómo puede ser eso!? Estoy cansado. ¿Cómo puede ser que Hia... no... que Lian no pueda entender por que quiero cancelar el compromiso?