.⃗ ༉‧ ⃟⛓ ;; Cacería | Spruan.

​ ⃢🌱 ;; One shot

- Mafia Au
- secuestro, acoso.
- Para los que esperan segunda parte del " Especial ", paciencia, no quiero arruinar eso, quiero hacer algo mínimo genial por ustedes.

En la vida siempre hay leyes que algunos siguen, otros ignoran y otros las rompen, pero en este mundo cruel por las límites que se pongan, siempre habrá quien las rompa sin piedad, las pise y se salga con la suya.

De allí nuestro querido mafioso, a los ojos de muchos, especialmente su competencia, un amante del dinero, magnate, egoísta y soberbio, Ivan Buhajeruk era y siempre sería alguien temido, después de todo no tenia compasión con quienes se atrevían a meterse en su camino, respetado, odiado, lo que sea, él era y será inalcanzable, aún así decir que alguien estaba en su cabeza era decir poco, Juan Sebastian Guarnizo, ese molesto muchacho que trabaja de mesero en su restaurante favorito, ¿por qué era su favorito?, Bueno aquel local de comida permitía el acceso a animales como su preciosa gata pelusa, su pequeña consentida, recordó como aquel empleado se robo la atención de su mascota y no paraba de seguirlo mientras el de gafas trabajaba.

" Recuerdo "

- Por favor bola de pelos, déjame trabajar. Se coloco de cuclillas acariciando la cabeza de esta, quien soltó un ronroneo, eso cautivo al exhausto mesero que lo cargo para llevar al intimidante hombre que desde hace rato lo estaba mirando, si las miradas mataran, ya estaría a 10 metros bajo tierra. - aquí tiene.

Juan ni le importo si lo odiaba en ese momento, solo quería su propina por aguantar sus caprichos, las de su gata, era alguien insoportable.
Ivan noto aquello, no lo miraba cuando le hablaba, aunque su trabajo era impecable, seguía siendo maleducado.

Nadie en su sano juicio se atrevía a no mirarlo, si él lo ordenaba se cumplía, Juan era terco y orgulloso, se negó a mirarlo, solo a la gata, nadie le hacía frente, excepto ese muchacho.

" Fin del recuerdo."

En su cabeza seguía el de lentes, se había vuelto una nueva necesidad, aveces iba al restaurante con esperanza de verlo pero o su turno era rotativo o el mundo no quería cumplirle su capricho.

El empresario respiro profundo, impaciente, había pedido información del lugar donde vivía, trabajaba, amigos, nombre, todo lo que le sirviera a favor de saber donde demonios podía encontrarlo y claro, hacer que parezca natural.

- Aquí tiene, patrón. Dijo su secretaria entregando la carpeta, estaba algo cargada, Ivan afirmó agradeciendo, aquella se retiro un tanto preocupada, miró al hombre a lado suyo mientras bajaban en el ascensor. - Estoy preocupada Komanche. Dijo al detective privado, aquel sucio apodo que se coloco para no llamar la atención.

- ¿se puede saber por qué?.

- Ese muchacho que investigarse esta en peligro si el jefe le sigue mirando. El contrario suspiró.

- No podemos hacer nada, ¿te acuerdas lo que le hizo a Osvaldo?, aunque quisiéramos ayudar, Juan está perdido. Al abrirse las puertas del elevador solo abandono a la secretaria, Mayichi lo vio irse y suspiro, no había nada que hiciera.

Por su lado Juan comenzó a recibir regalos, muy caros, al principio eran chocolates con pequeños papeles " Espero te guste ", " Me gusta consentirte ", entre otras cosas pero nunca los comió, ¿y si tenían una droga?, ¿y si lo querían estafar?, hasta los regalos, tan pronto llegaba una caja, la tiraba, sabiendo que el contenido era valioso y su avaricia pedía a gritos que se los quedara, negó rotundamente caer en manos del raro acosador que tenía, ciertamente era algo nuevo, algo que nunca creyó poder sentir, regalos, golosinas, un admirador secreto que rozaba la parte de acosador hasta cierta punto.