ᴸᵃᵐᵉⁿᵗᵒ ˢᵉʳ ᵗᵘ ᶜᵃᵘˢᵃ ❛ ᴾⁱᶜᵃⁿᵈʳᵃ ❜

Siempre estuvo aquí

En un departamento de pésimas condiciones, se encontraba nuestro querido protagonista; Pico, ya pasaron varios años desde la última vez que lo vimos, él se ve... Distinto.

A pesar de conservar su característico tono anaranjado en el cabello, para este punto es difícil relacionar a aquel niño con este hombre, incluso es complejo comparar su aspecto con el que tenía tras salvar a su amigo de las tropas de tankmen.

¿Dije que era anaranjado? Si, es algo a destacar, como lo es también su nuevo corte, el cual posee un pico de viuda, así mismo, para rematarlo hace gala de un cabello erizado que termina en punta. Sus cejas ahora se ven más pobladas, despeinadas, sin embargo, resaltan los rasgos afilados de su rostro. Por último, pero no menos importante, es la musculatura que desarrolló durante estos años, no era alguien de proporciones bíblicas, denotaba más bien un cuerpo enfocado en fuerza explosiva.

Pico escudriñaba entre los mecanismos de un arma relativamente vieja, con el fin de mejorar algunas otras que el mismo construyó, desde que la novia de Keith (Jane), lo destrozó con pura fuerza bruta por haber intentado matar a su novio, se dio cuenta que no podía seguir perdiendo el tiempo ganando dinero como cazador, necesitaba enfocarse de una vez por todas, perder el miedo e ir por su objetivo principal, el que estuvo esperándolo durante todo este tiempo, pero por miedo, decidió ignorar hasta estar listo.

Claramente hablamos de Cassandra, uno de los muchos penilianos que tienen a la tierra bajo la mira, ¡Ella es la razón por la que Pico es un cazarrecompensas!

El timbre del lugar desvío la atención del pelinaranja, este se alarmo, sabía que no habían riesgos en abrir una puerta, pero el no ir preparado era como estar desnudo, por lo que tomo una escopeta que se encontraba escondida bajo su mesa de comedor, y preguntó sin tocar siquiera la perilla.

-¿¡Quién!?

-¡Ábreme! No tengo todo el día.

Se presenta un tono masculinoa las fueras del cuarto, rápidamente lo reconoció.

-Darnell... - Pico se bajo de la nube y accedió a ceder el paso a su amigo, acto seguido, dejó la escopeta en su lugar.

El otro hombre lo vio guardar el arma bajo la mesa, alarmado, recriminó a Pico.

-¿Estabas por dispararme al igual que Nene, idiota?

-Eso fue un accidente.- Suspiro, para sentarse en el mismo lugar de antes, seguido de Darnell.

Se mantuvo un inquietante silencio entre los dos hombres, hasta que el invitado decidió retomar la palabra.

-¿Para qué me llamaste, Pico?

-...- Se mantuvo reflexivo, pues lo que estaba por hacer no era algo del todo seguro.

-¿Y bien...?

-... Si... Escucha, dejemos los chistes de penes por un rato. - Tarareó, pensativo. - En los próximos días saldré del país... El plan es volver para las próximas dos semanas.

-¿Qué piensas hacer?

-Oh, bueno... Quiero reencontrarme con "el amor de mi vida". - Dijo, sonriente.

-... Tú sabes que ella está muer...

- No. Está. Muerta. - Hizó rechinar sus dientes con fuerza, resaltando cada palabra que pronunciaba. - Todo está ahí, ella va dejando un rastro casi imperceptible... Nadie pudo hacer justicia "El cuerpo del alienígena no pudo ser encontrado"... ¡ME DESCUIDO UN SEGUNDO Y NI SIQUIERA LA POLICÍA ES CAPAZ DE HACER ALGO! Ella merece el infierno en vida, y yo, Darnell, se lo voy a dar.

Pico aclaró su garganta, intentando mantener la compostura.

-Mira, no quiero que le digas a Nene, sabes como se pone.