Hawkins || Billy Hargrove ||

Chapter 12

TWO DAYS LATER

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Seguí acariciando el pelo de Mike, su cabeza se encontraba en mi regazo.

Desde que luche contra Vecna no se había apartado de mí, y sabía exactamente por qué, mí "muerte".

Observé el cartel que anunciaba que entrábamos en Hawkins, un Hawkins destruido.

Todos los coches que nos cruzabamos salían de este pequeño pueblo, tan encantador y tan lleno de misterios.

El fuego aún salía por toda la ciudad.

—Han pasado menos de 48 horas desde que un terremoto de magnitud 7'4 golpeara la ciudad de Hawkins, a 130 kilómetros de Indianapolis, en un momento que los cismologos califican como un desastre natural sin precedentes. El número de víctimas asciende a 22, pero hay cientos de heridos en los hospitales del condado de Roane y muchos más desaparecidos. Las autoridades esperan que el número aumente.

Todo el pueblo estaba destruido, Mike se incorporó y también miró por las ventanas.

La policía y los medios de comunicación estaban por todas partes, monumentos significativos con los que había crecido estaban totalmente destruidos, como la biblioteca.

Todo era un caos.

>>Esta es la última tragedia que ha golpeado el que una vez fue un pueblo tranquilo, y que hace poco, ha sufrido una serie de asesinatos rituales de estudiantes relacionados con la secta satánica local llamada "Fuego Infernal", Eddie Munson, el líder de la secta y sospechoso de los asesinatos, está desaparecido por el terremoto y se le da por muerto.

Quite una única lágrima que caía por mi mejilla, Eddie Munson, mi Eddie Munon, mi mejor amigo, estaba posiblemente muerto y la gente seguía creyendo que era un asesino.

[....]

Jonathan aparcó en la entrada de los Wheeler, bajamos del coche y no dude en correr para poder abrazar a Steve.

—¿Estás bien?

Preguntó Steve antes de separarse y besar mi frente.

—Sí, ¿y tú?

—Sí, sí, estoy bien.

Le sonreí antes de volver a abrazarlo.

Me giré y lo vi a los ojos.Todo se vino al traste en mi interior cuando contemplé fijamente al chico rubio de pelo largo, cigarro en mano y barba de varios días. Vi cortadas de un único y veloz tajo todas las cuerdas que me ataban a mi existencia, y con la misma facilidad que si fueran los cordeles de un manojo de globos. Todo lo que me había hecho ser como era (mi amor por mi hija, mi amor por mi padre, mi lealtad hacia mis amigos, el amor hacia mis hermanos, el odio hacia mis enemigos, mi casa, mi vida, mi cuerpo, desconectado en ese instante de mí misma), clac, clac, clac... se cortó y salió volando hacia el espacio...y en su lugar se creó otra cuerda de hierro hacia él, había Billy Hargrove.