Y ahí estaba Perséfone, viendo al amor de su vida, yéndose con otra mujer.
Ella sufría por dentro, mineras que su marido estaba más feliz de costumbre.
Hades sabía, que sería la última vez que viese a ese muchacho en un largo tiempo y por eso, entre más rápido ayuda a la parejita, más rápido se irían de allí.
—Fue un honor conocerlo, mi seños Hades— Adonis hizo un pequeña reverencia y sonrió.
El rey rió divertido, se sentía dichoso —El gustó fue mío campeón— le revolvió el cabello —Ahora ¿Qué esperas para irte a festejar tu cumpleaños? Anda ya puedes retirarte de este lugar— con un falso pesar —Despídete de tu madre—
Hades señaló a Perséfone, que tenía una expresión triste y de arrepentimiento en su cara.
La rubia y el azabache, se fueron un rato, dejando solos al mortal con la reina.
Adonis seguía asustado por lo que pasó anteriormente, pero aún así, se acercó a darle un abrazo, que fue rápidamente correspondido.
Era sencillo, pero había sentimiento allí. Perséfone mentiría si dijese que quería que se fuese de allí.
—¿Por que tienes que irte?— entre lágrimas —Se que cometí un error pero...—
—Es lo mejor, aparte ya era hora que de que me fuera y te dejará ser feliz con tu esposo, sin distracciones— respondió, apartando la un poco y viéndola a los ojos.
Ella derramó más lágrimas, mientras agachaba un poco la cabeza.
—Pero ¡Hey! No soy alguien que se dejé llevar por el enojo— la diosa lo vió —Lo que quiero decir es que, te extrañare mucho, a ti, a Hades y a todos aquí, cuídate mucho mami Perséfone, te quiero— sonrió y comenzó a caminar hacia donde estaban los demás.
La diosa primaveral lo seguía —Pero no volverás aquí...—
—Lo se, pero me aseguraré de venir de visitas, es lo menos que puedo hacer— pensó el chico, intentando no hacer sentir mal, a la diosa que lo crío desde bebé.
Perséfone solo se sentía peor, Afrodita le dió un gran abrazo amoroso al chico, algo que ella repudió de inmediato.
Adonis llevaba algunas pocas cosas, ya que, Afrodita le daría la ropa que tenía en el lugar donde vivían.
—¡Adiós!— comentó el rey, en un tono simpático, mientras su esposa, solo miraba triste la ida de aquellos dos.
Ambos ya habían salido del inframundo, estaban caminando tranquilamente, disfrutando de la naturaleza y la belleza misma.
—¡Vaya tarde! Jaja—
—Si, estuvo llena de emociones—
—Si, bueno, mejor dejemos de hablar de eso y mejor me dices, ¿que quieres hacer en estos momentos?— preguntó Afrodita.
—Mmmm ¿Hacer algo extremo?— sonrió divertido.
La rubia pestañeo rápidamente, pero luego rió un poco.
—Esta bien... ¿Como que específicamente, se te ocurre hacer?— preguntó la diosa nuevamente.
El ojos verdes respondió de inmediato —¡Cazar!—
La diosa levantó una ceja. Bueno, si eso quería hacer su cumpleañero, pues tendría que apoyar su moción.
•••
[ En el Inframundo, de nuevo ]
—Jajajaja que bien que porfin se fueron— rió Hades, acompañado de Thanatos, quién también estaba contento —Creo que ahora todo estará como siempre debió ser— cerró los ojos, imaginando un ambiente tranquilo.
—Mi señor, no creo que deba reírse así, la reina parece que está pensativa— aportó Hypnos, con un tono calmado pero serio.
—¡Oh Hypnos! No seas aguafiestas— frunció el ceño para después decir —Todo estará bien por aquí, ¿Verdad Perséfone?— dijo volviendo a cerrar los ojos, esperando que la diosa dijese algo.
Silencio.
—¿Cierto, Perséfone?— preguntó de nuevo.
Otra vez había silencio.
Esta vez, abrió los ojos, notando que... ¡La diosa no estaba allí!
—¿Donde está ella?— preguntó a los dos dioses, que no supieron que responder en ese momento.
Perséfone se encontraba corriendo, sin rumbo fijo, solo quería perderse en los pasillos del castillo.
No le importaba nada en ese momento, solo quería estar sola y llorar.
Sería un triste y eterna noche para la castaña...
┗(•ˇ_ˇ•)―→ Continuará...
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ʙᴇʟʟᴇᴢᴀ ᴄᴀᴘᴛᴜʀᴀᴅᴀ╏ℙ𝕖𝕣𝕤𝕖́𝕗𝕠𝕟𝕖×𝔸𝕕𝕠𝕟𝕚𝕤×𝔸𝕗𝕣𝕠𝕕𝕚𝕥𝕒
Fanfiction━¡𝚈𝚘 𝚝𝚎 𝚊𝚖𝚘 𝙰𝚍𝚘𝚗𝚒𝚜 𝚢 𝚃𝚄 𝙻𝙾 𝚂𝙰𝙱𝙴𝚂! ━𝐝𝐢𝐣𝐨 𝐥𝐚 𝐜𝐚𝐬𝐭𝐚𝐧̃𝐚 𝐬𝐨𝐧𝐫𝐨𝐣𝐚𝐝𝐚, 𝐛𝐞𝐬𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐚𝐥 𝐣𝐨𝐯𝐞𝐧 𝐫𝐮𝐛𝐢𝐨━. 𝙼𝚒 𝚖𝚞𝚌𝚑𝚊𝚌𝚑𝚒𝚝𝚘 𝚕𝚒𝚗𝚍𝚘~ 𝐌𝐢𝐞𝐧𝐭𝐫𝐚𝐬, 𝐞́𝐥 𝐞𝐬𝐭𝐚𝐛𝐚 𝐝𝐞𝐜𝐞𝐩𝐜𝐢𝐨𝐧�...