CAPÍTULO 11

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Xena Danilov Adler:

La cafetería está rellena, lo bueno es que el personal de la cocina, o quiero decir los soldados de cocina hacen su trabajo rápidamente y es fácil poder adquirir la comida.

Tomo un té, una manzana y un sándwich de tofu, lechuga y tomate. Aquí encontraremos variedad de comida, en todas las bases las encontraremos y todos respetan la comida de otro.

Soy un claro ejemplo, soy vegetariana y puedo adquirir mis comidas fácilmente, he incluso es preparada en una zona aparte para no contaminar los utensilios con las comidas no vegetarianas. Para las veganos es más estricto pero realmente todos aceptan las costumbres alimenticias de otros.

Pero si hablamos de otras costumbres como las políticas, encontraremos mucho problema por ello en el comedor está prohibido hablar de política, es una regla no escrita por soldados, agentes, capitanes y todos los que formen parte de alguna de las bases.

— Xena, ven con nosotros. —habla Amelia y a su vez me saca de mi transe.

Me dirigo a la mesa en donde encuentro a la mayoría de personas que participarán de la nueva misión.

— Buenos días. —saludó y todos devuelven el saludo.

— Están preparados para lo que se viene.—pregunta Míriam.

— Claro que lo estamos. —dice Alexander.

— Nacimos para esto. —dice otro, el cual no conozco pero se que pronto lo haré.

— Esta claro. —habla obvio Stefano—Somos los mejores, lo hemos demostrado con los años.

— Está misión es la más difícil. —digo despreocupada.

— Lo es, pero hemos logrado ganar otras misiones, está no será la excepción. —dice Stefano.

— Lo es pero estamos preparados para lo que sea, estamos entrenados para ganar. —habló para alentarlos, porque esta misión es mi siguiente paso.

— La "Misión Danger 58" es nuestra oportunidad de sobresalir y subir al siguiente nivel. —sonrió ante las palabras de Alessio.

Antes de que alguien pueda seguir la conversación vuelve a hablar.

— Bueno Ladies and Gentlemen —dice esto último en inglés— Bienvenidos a los Estados Unidos.

— Pero yo soy de aquí. —dice Lennox.

— Lo sabe cabezotas, es para los nuevos. —Se mofa Daniel.

Sonrió al ver cómo siguen en sus andadas, nunca cambiarán son los más activos cuando se trata de verle fallos a otros y burlarse de ellos.

— Dejen el drama muñecas, y dejen hablar a General. —sonrió ante el sobre nombre de José, para sus mejores amigos.

Todos guardamos silencio para que Alessio hable y podamos seguir comiendo.

— Por ahora no dire nada, pero.. —se mira el reloj— En 20 minutos los espero es la sala de reunión del ala este que es nuestro espacio de trabajo asignado.

Termina de hablar y sigue su camino a no se donde, no me importa así que continuo comiendo rápidamente, me levanto para tratar de alcanzarlo y poder hablar con el, a este ultimo lo noté tenso.

Y tengo la sensación de qué hay gato encerrado porque en todo el tiempo que hablo no me miro y no me devolvió las miradas como suele hacerlo normalmente, no creo que esté molesto por los besos porque claramente lo estaba disfrutando y mucho, porque su pequeño amiguito lo delató.

DANILOVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora