Frío.
Esa es la única palabra que podría describir como estaba su cuerpo, helado y pálido. Había huellas plasmadas en su piel, su cuello tenía rozaduras de una mano que le había ahorcado con fuerza hasta arrebatarle la vida.
Habían dado al fin con su cuerpo luego de que fuera secuestrada hacia meses atrás, cuando vieron a su novio tirado en el pavimento sin vida y sin rastro alguno de ella.
Los policías se lamentaba tanto aquello.
Pensaron en todo lo que pudieron haberle evitado si ella tan solo hubiera hablado, dijera que algo malo ocurría, que relatara que alguien la estaba acosando.
Encontraron cada maldita nota en su habitación, cada pista de los anteriores asesinatos y ella solo decidió callar.
Cuando el forense la examinó, notó que tenía extrañas marcas negras en su paladar, junto a sus partes íntimas como si algo hubiera tragado o le hubieran introducido. Sin embargo en los exámenes toxicológicos no había ni un medicamento, ningún tipo de alucinógenos, ninguna droga o medicina que la mantuviera inconsciente. Estaba completamente limpia a excepción de las señales de tortura y violación.
El almacén estaba vacío, no había cajas, no había cuartos, no había ninguna señal de que hubieran estado personas allí, que ella hubiera pasado meses encerrada en ese lugar. Era como si solo dejaron su cuerpo para darle una sepultura digna.
Lo que ellos no sabían es que ese lugar estaba repleto y los observaban, los responsables de eses hecho estaban allí.
Caminaban a su alrededor, sonriendo satisfechos, encantados de su obra maestra.
Quien estaba al mando se giró hacia el vacío, sonriendo de manera cínica rozando sus dedos con suavidad al aire, rebotando contra una pantalla.
—Es tu turno, cariño.
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Notas de un acosador ( CountryHumans X Lectora)
Short StorySon pequeñas notas que comienzan siendo inofensivas por parte de un chico,mejor conocido en las notas como "Tú admirador secreto", pero día tras días está se vuelven más tétricas.