Toda historia tiene un inicio y la mía empieza después de desvelarme viendo aquella série.
Y siendo enviado mil años atrás de lo que conocemos como hora de aventura.
~Que?!, ser un Héroe y detener a los Montruos primigénios?!
Esa era la propuesta de...
Justo cuando creí que todo acabo hubo una pizca de luz que me trajo Esperanza.
No era una poderosa arma mágica o una nueva habilidad, creí que estaba solo y desolado en un tiempo del que desconocía, atrapado y con la obligación de sobrevivir para vencer un mal sin precedentes, sabia que esto de alguna forma solo era para adaptarme a todos los males pero aún así no deja de ser exigente.
Apesar de las pocas cosas que había, logré encontrar a personas, las únicas personas que me ayudarían en este horrible mundo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Simon and Marceline.
Simon, un señor que me contó que era un Anticuario, una persona que estaba interesado en artefactos antiguos,una prueba de ello era la corona que siempre llevaba consigo.
Una corona que conocía bastante bien.
Cuando le pregunté por ello, me dijo que se la había comprado a alguien, que solo es un objeto de colección pero tras lo dicho Marceline me comentó que aquello no era cierto, que tenía poderes...apesar de ello.
poseia un enorme conocimiento pese a su edad, era casi cómo una gran biblioteca y buena persona, se ocupó de nosotros sin importarle si podía o no, desconocía los paraderos de la pequeña Marceline o su pasado pero eso no era importante para el, a sus ojos no sería capaz de abandonarnos en este mundo a nuestra suerte, por ello se le ocurrió una gran idea.
Simon: Así no se usa una espada de verdad, debes mantener los hombros en su lugar o de lo contrario darás mal el golpe.
Exclamó corrigiendo al chico que poseia una ramita.
Yo: A-Asi?
Simon: Está mejor.
Sus conocimientos eras bastantes exactos, me enseñaba muchas cosas que lamentablemente Marceline era muy pequeña para comprenderlos, pero al ver mi mente desarrollada a una temprana edad supuso que debía aprovecharla para tener un conocimiento amplio de las cosas y al final que esto me ayudara a sobrevivir en dado caso que le sucediera lo peor.
Pasábamos entre ciudad y ciudad en busca de suministros, el peligro era contaste pero Simón sabía que hacer, siempre tomaba el camino seguro.
Lamentablemente la comida era poca basta y eso es lo que nos preocupaba, solo podíamos seguir pensando en otras posibles rutas, incluso cuando descansamos.
Actualmente.
Ha pasado bastante tiempo desde que los conocí, son buenas personas y tuve suerte en encontrarlos, de cierta forma me alivianar saber que ya no estoy solo en este infierno, la paz que teníamos es...