8.Despertar Confusional

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Pasado Diciembre del 2003

Deje mi mejilla reposar sobre la fría superficie mientras esperaba a que Edward fuera por mi almuerzo, tardo unos minutos que me parecieron horas. Dejo la bandeja de metal frente a mí, moví un poco la cabeza, haciendo que mi mejilla se retorciera.

-Gracias.

-Debí estar contigo este fin de semana, no te habrías enfermado -Edward se cruzó de brazos mientras me veía molesto, acercó la bandeja un poco a mí y volvió a hablar - Come ya -me ordenó - necesitas cargar energías.

-No es tu culpa -proteste mientras me enderezaba -Papá me hizo lavar su automóvil y como no lo hice rápido el ... - me calle de inmediato, tomé una manzana y empecé a masticar, intentando no pensar en lo que sucedió.

-¿El que? -fingí estar confundida- Estabas diciendo que lavabas su automóvil, no te diste prisa ¿Y luego?

-Nada, no sé de qué me hablas.

Edward bufo mientras ponía los ojos en blanco, me encogí de hombros avergonzada, seguí masticando mientras intentaba no pensar en nada, o por lo menos en cosas que tuvieran por consecuencia un interrogatorio por mi familia disfuncional.

El fin de semana Edward salió con su familia de casería, él quería que me quedara con Alice, pero la idea de que mi madre hiciera un escándalo me avergonzaba, que preferí estar en casa.

Mi padre había llegado de casa de sus amigos, estaba borracho y su automóvil estaba lleno de una sustancia viscosa amarillenta con tonos blancos, olía demasiado a alcohol y otras comidas, parecía que un bebé enorme se había vomitado en los asientos y todavía los embarro más, por fuera tenía huellas de manos con la misma sustancia. Demoré como hora y media hora lavando y limpiando el interior del auto, papá ya estaba un poco relajado, pero cuando me vio su frente se frunció y su mirada me transmitió mucho miedo, me saco a rastras del auto y me echo un baldé de agua, que, por cierto, se había medio congelado, por lo que tuve un fuerte resfriado. Ahora es que estoy mejor, pero Edward ve lo contrario, ¿Qué puede ser tan grave para el que una gripe?

-¿Te hizo algo? - su voz aterciopelada me saco de mis pensamientos.

-Nada que no haya hecho antes -le respondí indiferente - pero... no es por el que estoy enferma, solo no me cubrí y me moje un poco -mentí.

-Por favor, parece que te estuvieras muriendo ___, no me gusta verte así - se inclinó hacia mí, con los codos sobre la mesa, yo aspire mis mocos, para este punto, ya no me importaba que me vea fatal, si me muero ahora, mínimo que este yo tranquila con ellos- Aunque te ves tierna así.

Fruncí el ceño molesta, estar enferma es una de las cosas que más detesto, el simple movimiento de agacharme para recoger algo me es difícil. Por supuesto que no tuve que lidiar con esos problemas en casa, pues Edward estuvo cuidando de mi todo el lunes y martes, gracias a que me consiguió un permiso para faltar hasta que me recuperara. Estaba agradecida con él y se lo decía cada que podía, que era cuando dejaba de estornudar y de toser, el me abrazaba solo cuando la temperatura volvía y mi cuerpo estaba demasiado caliente que necesitaba del frio.

-Ya vuelvo, tu padre entrará -este desapareció y segundos después, mi padre entro.

-¿Qué pasa?

-Estoy enferma -dije con un tono brusco -¿Qué haces aquí?

-Venía a ver por qué no estabas abajo, no estaban las cervezas donde tenían que estar -me regaño.

-¿Cómo lo haría si eh estado aplastada en esta maldita cama porque tú no sabes hacer las cosas? -me queje para después toser fuertemente.

AMNESIA ||Crepúsculo| Edward Cullen x TN ||CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora