(Mark) Jack
Estoy parado en el borde de un edificio.
El frío viento golpea mi rostro, provocando que mis mejillas, mis orejas y mi nariz tomen un tono rojo. Debido a la baja temperatura mi cuerpo tiembla ligeramente. Observo las luces de la ciudad, la noche hace que cada lugar sea mucho más fácil de ver a larga distancia.
Una persona normal pensaría en las luces como un lugar para pasar el rato en la ciudad, pero mi mente me hace pensar que cada luz representa a una persona que vaga entre las frías calles de las inmensas construcciones.
Contemplo la hermosa vista que me otorga la ciudad mientras mis pensamientos me consumen lentamente.
Hazlo. Tienes que hacerlo. Por los dos.
Me tambaleo sobre mis pies, contando del veintitrés al uno de una forma lenta.
...Cinco, cuatro, tres, dos, uno y, me tiro del edificio
Mi vista se fija en la bella capital mientras mi cuerpo cae, solo siento como el viento golpea mi ropa con una gran fuerza por la velocidad, cierro mis ojos esperando a que mi cuerpo choque con el suelo dando fin a esta vida.
Un golpe en seco se escucha fuertemente en todos lados.
Abro mis ojos de golpe, mi respiración se agita en cuestión de segundos, tambaleo un poco por el cambio brusco de ambiente, enseguida trato de calmarme, miro a mí alrededor y solo hay un vacío blanco.
Estoy en el limbo.
Aún no me acostumbro esto.
—Buenas noches, joven Mark —la voz fina y calmada de una mujer resuena en todo el lugar.Giro mi cuerpo para observar de quien proviene la voz y es la misma mujer que siempre me recibe después de cada muerte. Su piel es fina y oscura, por otro lado, su cabello es muy blanco, lo tiene perfectamente cortado por encima de sus hombros, también tiene un fleco que le cubre los ojos, sus labios son blancos y tiene puesto un vestido del mismo color con un aspecto muy elegante que le llega arriba de las rodillas.
—El amo me pidió que lo llevara con Veronika, ella lo preparará para su próxima vida —asiento con la cabeza—. Sígame, por favor.
Camino junto con ella por un camino sin rumbo, todo está tan blanco que no se logra distinguir algo.
Segundos después veo dos puertas blancas de madera muy altas y anchas, ambas se abren solas cuando mi acompañante da dos toques a la puerta.
Ingresamos al lugar de manera inmediata, las paredes del lugar está repleta de una gran variedad de flores y plantas, incluyendo en el suelo y el techo, también se haya una mesa larga de cristal en medio del lugar con una silla de madera fina de casi un metro y medio del otro lado, ambas parecieran muebles caros.
—Mi señora —la mujer hace una reverencia—, ya vino el joven Mark, le diré al amo Uriel el reporte de siempre.
—Muchas gracias Jade, puedes retirarte.
La mujer se retira dejándome a solas con Veronika. Me acerco a la mesa y solo la observo mientras mantiene sus ojos cerrados. Tiene un vestido blanco de gala muy hermoso sin mangas, su cabello castaño claro recogido de forma elegante con unos cabellos cayendo a sus lados, su piel clara como siempre bien cuidada y sus labios pintados por un labial rojo intenso.
—Vida número veintitrés, Mark—abre sus ojos y me mira fijamente—. Dime, ¿cómo moriste esta vez?
Odio los ojos rojizos debido a los ángeles y su razón, pero, las de ella me trasmiten un sentimiento de adrenalina y emoción.
—Me aventé desde un edificio.
—Poco original, pero se requiere de mucha valentía —critica para luego dar una sonrisa de lado.
—No es cómo que haya muchas formas de suicidarse —sentencio y luego rodeo la mesa hacía la derecha.
—Tal vez a los humanos les falta creatividad —se levanta de su lugar para caminar hacía un círculo que se encuentra dibujada en el suelo— Espero que en tu próxima vida existan más ideas originales.
Hago lo mismo y me detengo dentro del círculo.
—¿Aún sigue en pie el plan? —pregunta Veronika haciendo un símbolo al aire enfrente de mí.
—Claro que sí, solo tú y yo podemos acabar con todo esto —digo en tono serio.
Muevo mi brazo y hago un gesto con mi mano para pedir la suya.
—Gracias por no dejarme, Mark —acaba con el símbolo y sonríe.
Me da su mano y le doy un beso ligero en la mano en forma de agradecimiento.
—Y yo a usted, Veronika.
En cuestión de segundos veo como se desvanece todo alrededor de mí.
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Wings game!
Genel Kurgu"En algún momento el alma de cada uno descansará para siempre, pero la mía lamentablemente no descansará hasta desatar un caos total en el cielo y en el infierno." . . . Isaac Snow, producto de un ser angelical y una humana, siendo oculto de los án...