Capítulo V: Se acabo.

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Está bien, Mü estaba un poquito ilusionando con aquel hombre pero se convencía de que Saga no le haría caso, era una relación que no veía posible, de hecho el inocente carnero no sabía que este tenía novio quien resultaba ser el hermano mayor de su estimado amigo Aioria.

-¡Traje mi ropa!- Decía Aioria a todo pulmón al entrar en la cocina donde estaban sus dos amigos llenos de ¿harina?

-Aja... dale la maleta a June- Dijo el anfitrión.

June, la rubia tomo la maleta café medio del leonino y se la llevo.

-Bonita mucama-

-Aioria, tienes un complejo por las personas rubias- Dijo Mü leyendo el libro de recetas rojo.

-Jajaja No lo había pensado- Carcajeo Milo.

-Ok, carnerito que receta has elegido para que ya estén tan mugrientos de harina- Se le acerco Aioria al mencionado.

-Es que hubo un accidente cuando Milo destapo la harina-

-No calcule mi propia fuerza- Sonrió picaron el escorpio.

Y así mientras Aioria leía lo tweets profundos y filosóficos de Shaka mientras sus otros amigos estaban batiendo huevos a punto suspiros y cerniendo harina y azúcar pasaron un rato agradable.

-Oigan qué significa "El insensato que reconoce su insensatez es un sabio. Pero un insensato que se cree sabio es, en verdad, un insensato"- Aioria había leído demasiadas citas.

-Significa que quien reconozca que es una tontería lo que está haciendo pues, debe estimarse como alguien razonable pero el que hace una tontería y encima se cree el rey del mundo por eso, es un idiota- Respondió quien tenía el pelo malva recogido en una cola, desmoldando los bizcochos para ponerlos en la rejilla y enfriarlos.

Milo y Aioria se quedaron mirando.

-Eres muy reflexivo- Le dijo el leonino.

Los tres quedaron mirando los tres pasteles el de coco, dulce de leche y chocolate.

-No quedaron tan elegantes pero se ven sabroso o solo es porque tengo hambre- Desdeño Milo cruzándose de brazos.

-Lo hicimos bien- Sonrió el ariano con sinceridad mirando el reloj.

-Son las tres, comamos algo- Propuso el pelo azul recogido porque estaba cocinando justo escucho el sonido de su teléfono y fue a atenderlo.

-Preparare sandwiches ¿Quieres?- Estimo Aioria viendo el trabajo que habían hechos sus compañeros, el pelo malva solo asintió revisando su celular con pesadez.

-¡June!- Llamo el anfitrión quien después de unos minutos miro a la muchacha de servicio.

-June, el servicio de bufe y bebidas llegaran a las siete así que atenta para que el salón tenga listas las mesas- Justo mordió su sándwich con gusto.

Aioria había ido al cuarto de invitados a descansar un rato y el tibetano se limpiaba la cara.

-Debimos usar delantal, que genios-

-Se te debe de ver genial un delantal- Milo se le acerco por detrás y puso su rostro en la base del cuello para abrazar por la cintura a su amigo.

-No creo-

Milo acariciaba el troco de su amigo...

-Milo ¿Sientes algo por mi?-

El mencionado se detuvo y pensó.

Caballeros Pesados •BL & Mpreg•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora