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🤍 ¡Los extrañaba! 🤍
En fin. Comencemos:)

📌PALABRAS: 12 299

La brisa jugaba con unos cabellos rizados mostrando el fresco ambiente del lugar, mientras que aquella persona tenía cargado consigo una caja pesada llena de recuerdos de ese lugar al que ya no volvería a llamar hogar

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La brisa jugaba con unos cabellos rizados mostrando el fresco ambiente del lugar, mientras que aquella persona tenía cargado consigo una caja pesada llena de recuerdos de ese lugar al que ya no volvería a llamar hogar.

Mirando su casa recordaba todos los momentos, tanto felices como infelices, de sus últimos años. Cabe mencionar que siempre estaría en deuda con su querido mejor amigo Atsumu, cierto que si.

Le había regalado un hogar.

Soltando una sonrisa miró la casa para luego mirar las demás cajas junto con varios muebles suyos, mientras sus hijos al igual que él ayudaban trasladando algunas cosas, no tan pesadas para ellos, hasta el camión de mudanzas.

–Mandarina hablante, ¿podrías ayudar a llevar las cajas? ¿O seguirás con una pose de película nostálgica?– preguntaba con gran sarcasmo como era su hábito.

–¡Tsuki!– le dió un codazo su esposo– Eres demasiado insensible. No te preocupes Shoyo, sabemos que es algo difícil dejar algunas cosas atrás.

–No te preocupes Dashi.– le sonrió tiernamente– Y en cuanto a ti Tsukishima...– le sacó la lengua, teniendo como respuesta los ojos volteados de Kei.

–¡Poste con patas insensible!– gritó desde lejos su hijo de cabellera azul.

Shoyo se aguantó la risa mientras huía de la escena donde su amigo trataba de tranquilizar al más alto para no cometer un crimen contra el niño que reía desentendido de la situación.

Colocó lo que tenía en sus manos en el camión y se secó la frente con su brazo, hacía un tiempo que no daba un esfuerzo físico mayor al de estar en la cama en plena recuperación. acostumbraba a hacer algunos ejercicios pero no sobrecargados.

Al voltear la mirada en la entrada de su casa pudo visualizar a su pareja llevando cargada en su espalda a su hija y muy aparte una caja en sus manos, se les veía muy cercanos conforme conversaban. Sonrió ante la escena captando la atención de la niña, haciendo que ella sonría de igual forma.

–¡Mamá mira!– movió sus brazos mientras señalaba al mayor– ¡Tobio es muy fuerte!

–Si ya veo, muuy fuerte.– sonrió de manera burlona hacía el mayor.

–Siento que no lo dices en una manera de halago.– le dirigió la palabra– Pero me conformo con eso.– le dió un casto beso en los labios.

Tobio sintió un jalón de cabello por parte de su hija– No eres digno de tocar a mamá. Le diré a Aki.– bajó de su espalda con cuidado y se iba alejando de poco en poco.

–Vamos Akane sabes que fue justo ganarte por primera vez en Monopoly.– trataba de hacer razonar a la niña.

Y... se fue sin hacerle mucho caso, un dato algo interesante es que la niña era muy orgullosa en algunos momentos, al igual que el más alto pero no lo admitiría, y Tobio temía por su integridad en su futura casa de aquí en adelante. Realmente su hija no dominaba el mundo porque quiere.

 𝐵𝐸𝐹𝑂𝑅𝐸 𝑀𝐸 𝐺𝑂 𝐹𝐴𝑅 || ᴋᴀɢᴇʜɪɴᴀ ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora