La esperanza de los tontos - Omegaverse

XXXIII - Vendettas

Empujaba una de las jaulas para llenarla con producto cuando un colega con puesto superior lo freno - ¿Ah?... ¿qué pasa? -

- Hay un problema, no se harán más entregas hasta tener nuevas ordenes -

Casi no han descansado por las altas ventas que se detuvieran tan abruptamente era extraño ¿qué tipo de problemática es la que se presento? ¿esto podría interferir con el éxodo? gracias a sus informes se concluyo que se tenia lo suficiente para llevar a cabo el desmantelamiento del almacén.

- Te contactare hasta entonces, los demás ya se fueron -

- *Carajo... tengo que averiguar más* - le dijo a República Dominicana que esa seria su ultima semana como esclava y que después la acompañaría a Punta Cana como prometio, bajo este imprevisto seria prudente y no haría preguntas indiscretas - Am ¿hay algo mas que quiera que haga? - tal vez lo mandarían hacer tareas de limpieza u otra actividad sencilla lo que fuera que le diera tiempo para escabullirse y fisgonear.

- Mm.. si, ve con Indonesia a recuperar a Core del Norte, el muy cabronazo volvió a rebelarse y mordió al cliente hasta arrancarle un pedazo - sonrió burlón - Jaja... seguro lo castigaran hasta que claudique -

Le suscito un deseo por golpear al infeliz sin embargo Haití tuvo que fingir una risa de estar de acuerdo con que se le recordara al espécimen inferior su lugar en esta tierra - Jaja si.. pobre idiota - aborrecía oírse decir eso pero como infiltrado era su deber actuar hasta el día D - Bueno, iré con Indo -

- Está donde las camionetas, le avisare de ti -

- Si señor -

Fallo en su misión de obtener una ventana para indagar por el lugar y descubrir las razones para detener el flujo de omegas aun así no desaprovecharía ya que su ruta para llegar con el indonesio se cruzaba por la oficina de los cabecillas, se acercaría discretamente con la esperanza de a lo mejor escuchar algo valioso.

Al parecer su plegaria fue atendida ya que logro ver al húngaro y "RB" en el interior del despacho, se aseguro de que nadie mas estuviera en los alrededores y se ubico en torno a la puerta, agradecía el silencio por la ausencia de personal ya que esto facilitaría oír la acalorada conversación que estos 2 tenían.

⸻

- ¡Ella es tu protegida ¿dónde mierda está?! - como siempre su impaciencia le hacia levantar la voz.

- Gritarme no hará que lo sepa mágicamente - estaba acostumbrado a los arrebatos de su socio afortunadamente el era alguien de carácter estoico y no se dejaba llevar por sus emociones lo que evitaba que le siguiera el juego con una actitud similar o peor guiándolos a una disputa sin espacio para el raciocinio.

Un gran inconveniente con China era que no hablaba con nadie de sus planes aun así jamas ha dejado de atender al estonio o Hungría con los pedidos pactados y si hubiera alguna demora simplemente lo informaría sin falta por lo que era preocupante su repentina desaparición.

Dio un fuerte choque en el escritorio tratando de disipar un poco su frustración - Entiende.. no quedan drogas, tenemos a los compradores con un pie en nuestro cuello y no aceptan el rembolso exigiendo a sus perras dopadas mas las pastillas para ellos -

Le dio una mirada fría - Lo sé perfectamente - aunque aparentaba serenidad compartía el cabreo de su amigo ¿en qué momento su éxito se convirtió en un infierno? involuntariamente la imagen de cierto tricolor le atravesó el pensamiento - *Desde que apareció esa plaga todo se ha estado jodiendo* - 

La locura de Finlandia, los supresores, el posible nacimiento de una competencia, Nazi y ahora su proveedora perdida, era como una maldición gitana que quizás se desvanecería si exterminaba a la arpía que se la dicto en un principio.