Sin Secretos ᴼᵐᵉᵍᵃᵛᵉʳˢᵉ |Yoonmin • Namjin • Taekook|

70

Jimin

No era consciente de lo que sucedía, ni de lo que decían a mi alrededor. Mi cabeza daba vueltas y mi vista se nublaba cada vez más. Mi pecho dolía mucho, el respirar me costaba y sentía que en cualquier momento iba a desmayarme.

Sentía que iba a morir, ya no podía más. Mi cuerpo débil ya no me permitía ni siquiera abrir los ojos.

—Jungkook...

Jungkook me miró, y aún con la vista borrosa pude notar las lágrimas en sus ojos.

—Ya casi llegamos.

Por un momento creí percibir las feromonas de Namjoon; aunque realmente estaba tan confundido que no recordaba nada. Ni siquiera sabía en donde me encontraba antes de entrar al auto.

Sin embargo, en mi memoria mantenía un borroso recuerdo

Un recuerdo que dolía.

En el que Yoongi se encontraba molesto y se sentía deprimido por mi culpa.

Su mirada triste y decepcionada aparecía una y otra vez en mi cabeza, unas veces más claras que otras, trayendo consigo la amarga y dolorosa sensación en el pecho que sentí esa noche.

Miré a Taehyung con ojos perdidos.

¿De dónde había salido? ¿Por qué no recordaba nada?

—Taehyung...

Mis manos temblaron cuando quise tocarle el rostro, así que Jungkook las tomó entre las suyas y las envolvió en un cálido agarre.

Me recargué en el hombro de Taehyung; dejándome llevar por el cansancio que pronto comenzaba a invadirme por completo. Sentía que se me saldría el corazón.

—Quiero a Yoongi...

Para cuando dije aquello, un dolor muy conocido se apoderó de mí. Aquel dolor que sentí cuando Yoongi y yo nos distanciamos y me desmayé en aquel callejón.

Llevé mis dedos hacia mi cuello al recordar ese día.

Es cierto, Yoongi debe estar muy mal en casa...

Cuando estaba a punto de cerrar los ojos, el auto frenó de golpe. Se abrió una puerta y la luz me pegó en el rostro.

En el momento que volví a cobrar la conciencia me encontraba recostado en el sofá con el regazo de Taehyung como almohada; mientras que su mano sujetaba aquel aparato tan conocido para mí que me ayudaba a respirar mejor.

Solté un suspiro que me ahogó por un momento y me provocó tos. La falta de aire había desaparecido, pero el dolor de cabeza y los mareos seguía ahí.

—Duele... —Toqué mi garganta—. Me duele...

—Traeré un poco de medicina... —dijo Seokjin, apresurándose y perdiéndose en la cocina. Cuando regresó traía consigo una caja de pastillas y un vaso con agua—. Toma.

Con ayuda de Taehyung tomé solo un poco de agua, negándome al medicamento.

—Llévame con Yoongi —pedí a Taehyung, pero él no me dijo nada—. Por favor —supliqué, con la voz quebradiza—. Joder, necesito... necesito verlo ahora.

—Primero tranquilízate un poco.

Intenté levantarme, pero Taehyung me tomó por los hombros para detenerme.

—Déjame ir con él.

No había una manera con la que pudiese describir mi desesperación; porque simplemente me sentía aterrado y quería verlo.