007. horror world.

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007:
Mundo de terror.

ISABELLA SIEMPRE SINTIÓ QUE VIVÍA EN UN MUNDO DE FANTASÍA.

Desde niña le gustaba pensar que la casa del árbol era la torre más alta de su castillo. Que Riley era un hadita del bosque. Su madre era su fiel dama de compañía que le confeccionaba los vestidos más bonitos, y su padre era su leal guardia protector.

Flotaba en algodones de azúcar, y hablaba con los animales. No existía una gota de oscuridad dentro de ese reino.

Todo estaba perfectamente pintado de rosa en su imaginación, y la idea de que unos intrusos malignos irrumpieran en su mundo fantástico, no le agradó.

No le gustaba pensar que tendría que ponerse una armadura sobre su vestido de princesa y abandonar su torre segura, pero al décimo día de la llegada de los Otros, Isa entendió que no tenía opción. Ellos habían llegado para arrebatarle todo.

Durante los diez días que los Otros estuvieron estacionados sin hacer nada sobre sus cabezas, en realidad los estaban alertando. Estaban planeando deshacerse los humanos de una manera caótica, lenta y dolorosa.

Isabella fue testigo de la primera ola.

Aquel día parecía uno normal; como si no tuvieran a los Otros amenzandolos. Era soleado, un día cálido faltaba poco para la primavera. Quinn se apareció ese día en la escuela con su auto y el estéreo con You Belong With Me de Taylor Swift a todo volumen.

Esa fue la última canción que escuchó.

Isa rió con su amiga por última vez, su humor elevado mientras asistía a su tercer clase del día; economía con la señorita Paulson. Habían alrededor de quince estudiantes cuando la clase empezó, lo cual superaba a la mayoría de otras asignaturas.

La señora Paulson estaba exponiendo un nuevo método de cálculo con su proyector. La única realmente atenta, era ella quien tomaba notas y se esforzaba por entender el fin de aquellos cálculos. Hasta ese momento, sus notas y su promedio todavía importaban.

Abrió la calculadora de su celular y comenzó a hacer la actividad. Dios el dia estaba hermoso afuera, y ella estaba desperdiciando su tiempo con cálculos. La luz del sol se filtraba a traves de la ventana de su derecha mientras fruncia su ceño y escribía una posible operación.

Entonces, cuando fue a añadir un signo negativo a la calculadora, su celular murió, las luces se apagaron, el proyector dejó de emitir imágen. Isabella tomó su celular confundida, y dio un respingo cuando alguien soltó un grito detrás de ella.

En el futuro, pensaría que no hay nada más estupido que gritar por un corte de luz.

Quitó la bateria de su celular y la volvió a poner, pero el aparato no revivia. Tenía el setenta por ciento de carga ¿que demonios. . .?

𝐀𝐅𝐓𝐄𝐑𝐋𝐈𝐅𝐄 : Ben ParishDonde viven las historias. Descúbrelo ahora