La formula para amar. [Koisuru Boukun One Shots]

Papá

Una pequeña Hana de no más de 7 años, se peina limpiamente su sedoso cabello rubio y sonríe a su reflejo en el espejo.

Llevaba su vestido favorito, un vestido corto con cuello en V, y cubierto de flores azules, le había pedido a su padre que lo planchara especialmente para hoy, porque era especial.

Hoy en la escuela de la pequeña se juntarían las celebraciones del día de la madre y el padre, en un día especial llamado “Dia de los padres”

La pequeña Tatsumi estaba emocionada y mareada por ir.

—Hana..— papá Sou, llamo su atención desde la puerta, suspirando al ver a su hija saltarina. — Hija, sigo pensando en que no deberías ir a la escuela hoy.— La niña se acercó con una pequeña diadema y su padre se la puso.— Hija, Papi no está aquí, no creo que los otros niños entiendan si solo vas conmigo a la escuela.

Souichi sabía que tal vez estaba exagerando un poco, pero también había pasado por lo mismo, y sabía lo entrometidos que podrían ser algunos mocosos o más bien, los padres de estos con respecto a que una niña solo fuera con un padre.

Pero la niña le sonrió al rubio, sin miedo. Era una chica fuerte y optimista, al igual que Tetsuhiro.

Pero aún así el tirano no podía sacar la preocupación de su mente.

— Podríamos quedarnos en casa y ver una película.— ofreció.— o ir a casa de tía Kanako para pasarlo con ella.

— ¡No!— hablo la niña tan terca como su apellido Tatsumi.— ¡Quiero ir a la escuela y hablar de mis papás!

Sentía que estaba viviendo un karma por todos esos años que había hecho a sus hermanos, antiguos asistentes, a matsuda y Morinaga sufrir por su terquedad, cuando Hana tenía una idea en la cabeza nada podía hacer que cambiará de opinión, no podía negarle nada a su hija.

Llegaron a su escuela en unos 15 minutos y Hana prácticamente arrastro a Souichi adentro.

Dentro del salón habían muchos papás, parados orgullosamente detrás de sus hijos.

Todos los demás niños también estaban emocionados. Los  niños  se  retorcían impacientes, ansiosos en sus asientos .

Uno por uno el maestro pasaría a los estudiantes para que hablaran un poco de sus padres y madres, de lo que trabajaban, de su rutina diaria, de lo mucho que los amaban.

Se contaron muchas historias, se escucharon muchas risas, los adultos disfrutaban mucho de las palabras de los niños.

Mientras eso sucedía Souichi estaba ansioso, no importa cuánto lo negara sabía que se estaba ablandando gracias a esa mocosa.

Finalmente el profesor la llamó al frente d ella clase..
— Tatsumi Hanako, es tu turno, pasa al frente.

Su hija le sonrió llena de valor, realmente era idéntica a Tetsuhiro cuando lo hacía.

Se puso de pie, todos los niños voltearon y algunos padres comenzaron a susurrar.

— ¿Dónde está tu mamá?— escucho a un niño preguntar.

— Probablemente no tiene una cariño.— la madre de dicho niño respondió.

— Es una pena, pobre niña.— Respondió otra de las madres, mientras algunos más secreteaban atrás.

La niña solo siguió su camino, sin verse afectada por los comentarios o susurros de sus compañeros, subió al pequeño escenario y espero la seña de su maestro para empezar.

—Buenos días, mi nombre es Hanako Tatsumi. — hablo educadamente haciendo una reverencia.— y no tengo una mamá, tengo dos padres.

Hubieron algunos murmullos.